Las prisas, el ajetreo y las obligaciones del día a día apenas nos dejan hueco para disfrutar de lo verdaderamente importante: el tiempo con los nuestros. Y eso es precisamente lo que nos regala la primavera, un «break» para desconectar de la rutina y saborear el privilegio de desconectar en plena naturaleza en alojamientos únicos. Aquí va un puñado de ellos:

1. A los pies del Pirineo

Con un creciente interés por la sencillez y la autenticidad, los viajeros apuestan por acogedoras casas rurales donde relajarse y reconectar con familia y amigos. Y eso es lo que propone Airbnb en algunos de sus alojamientos, ya que la búsqueda puede filtrarse por criterios como «casas naturales», «parques nacionales», «casas de montaña» o «lagos», entre otros muchos.

Una buena elección es, por ejemplo, la casa rural Tres piedras en Ara, Huesca, un coqueto apartamento rehabilitado de bio-auto/construcción está en plena montaña e ideal para cuatro personas. Para familias más grandes, también en la provincia de Huesca, muy cerca de Aínsa, destaca un antiguo edificio tradicional del siglo XVIII disponible en Airbnb con capacidad para 14 viajeros y todas las comodidades, como piscina cubierta y zonas de barbacoa.

2. Esquí en Canfranc Estación

Elegido como uno de los destinos a visitar en 2025 por «The New York Times», Canfranc Estación, a Royal Hideaway Hotel es un enclave ideal para disfrutar de una escapada primaveral. Muy próximo a las estaciones de esquí de Candanchú y Astún, permite aprovechar las últimas semanas de nieve, pues fue reconocido como «Mejor establecimiento hotelero en la nieve» en los «Best Hotel Awards 2024», ya que ofrece a sus huéspedes una experiencia premium para disfrutar al máximo de actividades como rutas con raquetas de nieve, esquí o snowboard, además de contar con algunos servicios de hiperpersonalización como transporte privado a las pistas, clases de esquí o alquiler de material premium.

3. Es Trenc, lo último de Mallorca

Con una ubicación privilegiada frente al mar, en la localidad de Colònia de Sant Jordi, próximo a la icónica playa de Es Trenc, Iberostar Selection Es Trenc 5* abrirá sus puertas en abril concebido para quienes buscan una Mallorca auténtica.

La experiencia en el hotel se completa con desayunos en la terraza con vistas al Mediterráneo, atardeceres de película acompañados de cócteles en el rooftop, zona Star Prestige con beneficios exclusivos y un concepto de hospitalidad en el que bienestar, gastronomía, sostenibilidad y compromiso con alma local van de la mano, pues incluye visitas guiadas a las salinas de Flor de Sal d’Es Trenc.

4. En plena Costa de la Luz

Tras una profunda reforma acometida durante los últimos años, Puerto Antilla Grand Hotel se alza como un refugio de elegancia y sofisticación para toda la familia, en primera línea de playa.

Cuatro piscinas exteriores, una de ellas para niños, pista de pádel y el Prestige Club Sport Wellness & Spa, así como un restaurante a la carta y un completo bufé, garantizan el descanso y la diversión, pues además cuenta con un gran equipo de animación para grandes y pequeños.

5. Un refugio familiar en Sotogrande

Con la Semana Santa, SO/ Sotogrande Spa & Golf Resort despliega una programación exclusiva que combina gastronomía, ocio, deporte y bienestar en una de las ubicaciones más privilegiadas de la Costa del Sol occidental.

Su entorno natural, en plena campiña andaluza, invita al viajero a desconectar. Mientras los niños disfrutan de lo lindo en el Kids Club bajo el cuidado de profesionales, los adultos pueden jugar al golf en alguno de los exclusivos campos de alrededor, hacer una ruta de senderismo o relajarse en el spa de 3.500 metros cuadrados. Y al caer el sol, la excepcional oferta culinaria del resort pone la guinda al pastel.