La pequeña villa cántabra que mejor conserva su arquitectura medieval: fue declarada BIC y Conjunto Histórico en 1985

La región cántabra cuenta con un amplio atractivo natural y cultural que hacen del lugar un territorio extraordinario. Su geografía litoral bañada por el mar Cantábrico, los grandes macizos montañosos, como la extensa cordillera Cantábrica que surca la comunidad, o sus recónditos pueblos, que testimonian la herencia histórica a lo largo de los siglos, hacen que sea un destino elegido para visitar por muchos turistas nacionales y también internacionales.

Uno de sus municipios más especiales se encuentra en el corazón de la región. Se trata de la pequeña villa de Cartes, que cuenta con casi 6.000 habitantes distribuidos por las localidades de La Barquera, Bedicó, Corral, Mercadal, Mijarojos, Riocorvo, San Miguel, Santiago de Cartes, Sierra Elsa, Yermo y Cartes, que es su capital. Esta villa fue declarada Bien de Interés Cultural (BIC) y Conjunto Histórico en 1985 por conservar su arquitectura histórica, que data desde el siglo XV hasta el XVIII. Un paseo por sus calles adoquinadas y su casco histórico ofrece un viaje en el tiempo.

Un recorrido por la Edad Media

A escasos minutos del Museo de Altamira, Cabárceno, Santander, magníficas playas, el Parque Natural Saja-Besaya... la villa de Cartes destaca, entre sus construcciones, el Torreón de Cartes, una casona fortificada medieval construida por la familia Manrique hacia 1421 para defenderse de los señores de la Vega (actual Torrelavega). Fue sede de la justicia para el valle de Toranzo en 1432, después se convirtió en la residencia del corregidor condal y actualmente ha sido rehabilitado para acoger un museo de divulgación científica.

El circuito medieval del municipio se completa con la iglesia de Santa María de Yermo, una edificación del románico que, por su buen estado de conservación, fue declarada Bien de Interés Cultural en 1930. En el siglo IX fue un monasterio adscrito al Obispado de Oviedo, aunque la iglesia que actualmente se conserva data del siglo XIII. Es uno de los edificios más característicos del estilo románico montañés por sus relieves escultóricos en los canecillos y en los capiteles.

Otros símbolos populares de interés

Al catálogo patrimonial del municipio se incluye la ruta de ocho molinos que, incluidos en el Inventario General de Patrimonio Cultural de Cantabria desde 2003, tuvieron una gran relevancia para la economía agrícola e industrial de la zona. También el puente de piedra del siglo XVIII, que fue construido estratégicamente para establecer la comunicación a través del Camino Real. Este antiguo camino es la calle principal de Cartes, que tiene una longitud de 500 metros, en torno a la cual fueron levantadas las casas de estilo montañés que los vecinos del lugar adornan con plantas y flores con una gran dedicación.

En cuanto a las fiestas tradicionales, según señalan desde el Consistorio municipal, "Cartes es conocido por el ambiente festivo de San Cipriano que se vive tan intensamente en el municipio con la Subida al Alto de San Cipriano, declarada Fiesta de Interés Turístico Regional. La solemnidad de la festividad se pone de manifiesto con la tradicional subida en albarcas desde Riocorco hasta la ermita de San Cipriano en Cohicillos, para honrar al santo y celebrar en su honor una romería montañesa que tiene lugar 16 de septiembre".