Ibex 35

El Ibex pierde 29.600 millones en su mayor caída desde 2012

La Razón
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Los inversores madrugaron mucho ayer, y no precisamente para salir de compras por Europa. De hecho, la sobredosis de órdenes de venta en la apertura del mercado fue tan fuerte que los operadores tuvieron verdaderos problemas para casarlas con las escasas manos compradoras del parqué. El veneno del «Grexit», inoculado durante el fin de semana, se expandió por los principales índices mundiales. Tal y como adelantaron los analistas en la víspera, el Ibex 35 llegó a perder un 4,9% en un despertar negro que lastró más de un 5% las principales plazas «marca euro», y los bonos de los países «señalados» de la eurozona –como España e Italia– se dispararon en el secundario de deuda soberana.

De ahí al cierre, el principal selectivo del mercado nacional no logró sobreponerse al golpe de la posible ruptura de la zona euro y el corralito en Grecia. El Ibex mantuvo así las ventas hasta el final de la jornada, y el desplome final fue del 4,56% (10.853,9 puntos), lo que provocó unas pérdidas de 29.600 millones de euros a las 34 cotizadas del índice. Este recorte es incluso superior a la deuda que Grecia mantiene con España, de unos 26.000 millones.

Casi la mitad –unos 13.300 millones de euros– correspondió a los bancos. Las sufridas entidades financieras del Ibex 35 fueron las más perjudicadas por las ventas, y Banco Popular lideró los recortes con un «agujero» del 7,1% frente al cierre del viernes. En términos de capitalización, la firma que preside Ángel Ron perdió 717 millones de euros.

Santander, el mayor banco español, fue el segundo valor más bajista y se dejó un 6,7%. La espiral de ventas provocó en la entidad una pérdida de capitalización de 6.502 millones de euros respecto al viernes. BBVA se dejó 3.564 millones, un 6,02%, por lo que el «agujero» conjunto de los dos gigantes del sector financiero nacional fue de 10.066 millones, más de la tercera parte del recorte total de las empresas del selectivo.

Entre las mayores caídas también figuraron Sacyr (-6,45%), Abengoa (-6,3%) y OHL (-6,1%). En línea con la bolsa española, el resto de Europa también terminó con importantes pérdidas, sobre todo, los países periféricos. El PSI 20 de Portugal cayó el 5,22% y el Ftse Mib de Milán registró un recorte del 5,17%. París también cedió un 3,74%; Fráncfort, un 3,56%; y Londres, un 1,97%.

División de opiniones

«El tamaño de Grecia es muy pequeño, representa un 2% del PIB de la zona euro. Si lo contextualizamos a nivel mundial, son tres semanas de crecimiento de la economía china», apuntó el departamento de Estrategia de Mercados de Banca March, restando importancia a la posible salida de la economía helena de la zona euro. «El mercado no nos va a dar oportunidad de reaccionar y vamos a asistir a fuertes bajadas en los bonos y en la bolsa», concluyó la entidad.

«Hemos visto un desconcierto absoluto en los primeros minutos de la sesión, con el Ibex a punto de perder los 10.800 puntos, la prima de riesgo llegando a alcanzar los 185 puntos básicos y el eurodólar por debajo del 1,10. No obstante, desde media mañana los mercados se han empezado a mover en un rango más estrecho», señaló Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank.

«Nuestra previsión es que, aunque esta semana haya ruido, Grecia acabará quedándose en el euro, probablemente con un gobierno distinto al que hay hoy, con un programa de rescate similar al que ofrecieron los acreedores en su última oferta y con unos términos más favorables para su deuda externa», dijo Álvaro Sanmartín, asesor del fondo Alinea Global y Chief Economist en MCH IS.

En los días previos al referéndum sobre el acuerdo con los acreedores europeos, que se realizará este domingo, «el papel del BCE será apoyar al sistema financiero griego», señaló Giordano Lombardo, Director de Inversiones de Pioneer Investments. En su opinión, «la volatilidad continuará estos días en los mercados financieros».

En el mercado de divisas, el euro se apreció con fuerza frente al dólar y, al cierre de la sesión en la renta variable, cotizaba cerca de 1,12 «billetes verdes», casi un 2%.

Sangría en el secundario

Mientras los «charts» de las bolsas europeas dibujaban fuertes recortes, los de los intereses de los bonos periféricos arrojaban justo la imagen contraria. El cupón del bono español a diez años, que evoluciona a la inversa de la demanda, se disparó un 11,2% y se situó en el 2,347%. Durante la jonada, llegó a alcanzar el 2,6%, el nivel más alto desde agosto del año pasado. La deuda italiana a una década escaló hasta el 2,391%, cuatro puntos básicos por encima de la española al mismo plazo. La referencia portuguesa despidió una sesión negra en el 3,083%.

Parte del capital que abandonó la bolsa y los bonos periféricos se refugió en el «bund» alemán, que cerró con un interés del 0,796%. El recorte de la rentabilidad germana disparó aún más las primas de riesgo de la zona euro. Así, la española se situó en los 155 puntos básicos, frente a los 159 puntos de Italia, mientras que Portugal cerró en los 308 puntos.

Entre los escenarios que maneja el mercado, el que más preocupa a los inversores es el de una salida desordenada de Grecia de la zona euro. Mark Burgess y Toby Nangle, analistas de Columbia Threadneedle, consideraron ayer que esta posibilidad llevaría las primas de riesgo de España e Italia «por encima de los 200 puntos básicos». El Servicio de Estudios de BBVA señaló al respecto que el contagio de la crisis helena a otros países será «limitado» gracias al cortafuegos del BCE.