Pactos electorales

Reformas sobre impuestos o Sicav, sin tocar la Constitución

El PP busca consenso en cinco grandes áreas, que incluyen una reforma fiscal y de financiación

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, durante la rueda de prensa posterior a su reunión con el líder del PSOE, Pedro Sánchez
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, durante la rueda de prensa posterior a su reunión con el líder del PSOE, Pedro Sánchezlarazon

El denominado «Programa para el Gobierno de España», marca cinco grandes pactos en áreas como el empleo, la reforma fiscal y la financiación, un pacto social, un pacto por la educación y un pacto por el fortalecimiento institucional.

El documento que ayer remitió Moncloa a los demás grupos políticos no incluye sorpresas. Como ya anticipó este periódico, Mariano Rajoy no tenía la intención de hacer ofertas sonoras de enmienda a su programa electoral ni de anunciar cesiones sin que hubiera un acuerdo viable y la perspectiva de una mayoría parlamentaria estable para sacar adelante esas reformas. Después de constatar que Albert Rivera no quiere negociar nada antes de la investidura, como él mismo volvió a confirmar ayer públicamente, y que Pedro Sánchez no se mueve de su «no» a Rajoy, Moncloa oficializó un amplio documento abierto a la negociación sobre cuestiones políticas y económicas, pero sin concretar el sentido de esas modificaciones programáticas.

Marco de entendimiento sobre España

El documento está basado en el programa electoral, en las incorporaciones al mismo que realizaron a cuenta de las convenciones del PP que celebraron durante la legislatura fallida, y sobre los cinco pactos de Estado que Rajoy ya defendió tras las elecciones de diciembre. Es un «compendio» de todas las propuestas, sobre el que Rajoy dice estar dispuesto a sentarse a negociar e introducir matizaciones. No incluye, por ejemplo, la reforma constitucional, que el PP no llevaba en su programa, pero sí apela a la necesidad de buscar un marco de entendimiento con las fuerzas constitucionalistas en el debate territorial y en lo que toca al desafío independentista.

Empleo, impuestos y crecimiento

Rajoy ofrece un pacto por el empleo, para favorecer el crecimiento, fortalecer el Estado del Bienestar, la reforma fiscal, por la educación y para defender la España constitucional. Es una propuesta «abierta al diálogo y al pacto», se puntualiza en el documento «Programa para el Gobierno de España». Rajoy mantiene sus compromisos de rebajas fiscales y hace un guiño a la demanda de la izquierda y de Ciudadanos de revisar el tratamiento de las Sicav «para garantizar que se utilicen como instrumentos de inversión colectiva». El PP plantea computar sólo a efectos del número mínimo de 100 accionistas los que tengan una participación superior al 0,55 por ciento.

En su programa electoral, Ciudadanos planteaba devolver el control fiscal de las Sicav, que tributan al 1 por ciento, a la Inspección de Hacienda y promover su apertura, de tal forma que cualquier ciudadano pudiera invertir en las mismas condiciones que los dueños reales.

En materia de empleo, para favorecer la estabilidad propone ampliar a los contratos indefinidos y a los temporales que se conviertan en fijos la exención de la cotización de 500 euros durante cuatro años. La constitución de un fondo de capitalización para los trabajadores al estilo austriaco, desarrollar el nuevo modelo de formación para el empleo e implantar el cheque de formación. No entran, por tanto, en las reformas más delicadas que exige la oposición.

Reforma electoral, sólo para ayuntamientos

La oferta de pacto de Rajoy incluye negociar sobre la reordenación de la financiación del sistema de pensiones para dotar de una mayor sostenibilidad al conjunto. Un nuevo acuerdo en materia de Educación o una reforma electoral, pero ajustada a su planteamiento de que gobierne la lista más votada. Otra de las propuestas es un acuerdo por la ciencia, abogándose porque en 2020 la inversión en I+D+i supere el 2 por ciento del PIB.

Europa y política Exterior y de Defensa

Por supuesto, apela también al entendimiento en relación al proyecto europeo, en la financiación autonómica o sobre la Justicia. Así como reforzar el acuerdo en política de Defensa o Exterior. El texto no hace ninguna alusión a proyectos controvertidos, como la Ley de Seguridad Ciudadana, ampliamente cuestionada por la oposición.

Corrupción y regeneración democrática

Este resumen de propuestas programáticas, que Rajoy ofrece como base para negociar apoyos, incluye sus propuestas electorales en materia de regeneración democrática y de lucha contra la corrupción, entre ellas la de limitar, no suprimir, el aforamiento, o aumentar los controles en la contratación pública y regular los «lobbies». Esto último entró en la agenda de la primera legislatura de Rajoy, y aunque llegó al Parlamento, se quedó sin concretar.

En suma, se trata de una propuesta genérica, en la que Rajoy no baja al terreno de lo concreto porque de momento ni PSOE ni Ciudadanos le han dado margen para sentarse a negociar un programa de gobierno.

En el documento se rechaza expresamente el proyecto soberanista y el referéndum de autodeterminación, apostando, en cambio, por reforzar la unidad nacional. Las urnas han dicho que quieren un Gobierno «basado en el respeto a los valores de la Carta Magna». El PP también ratifica su compromiso contra el terrorismo y a favor de la memoria de las víctimas. Apostando por ampliar las indemnizaciones y por crear un Centro Memorial de las Víctimas en Madrid, en reconocimiento a las víctimas del terrorismo yihadista.

El nuevo Gobierno «debe buscar la recuperación económica y estar guiado por la moderación» y la voluntad de diálogo, afirman.