Cómo actuar si te encuentras en una riada o caes al agua mientras conduces: consejos para sobrevivir

Las condiciones climáticas adversas pueden transformar rápidamente las carreteras en lugares peligrosos, con ríos desbordados y fuertes corrientes de agua. En tales situaciones, es crucial saber cómo reaccionar si te ves atrapado en una riada o si tu vehículo cae al agua. Aquí te dejamos algunos pasos a seguir para aumentar tus posibilidades de sobrevivir a esta desafiante experiencia. Cuando te encuentres frente a una zona inundada, nunca intentes atravesarla si no estás seguro de la profundidad del agua. Incluso una cantidad relativamente pequeña de agua puede hacer flotar un vehículo y arrastrarlo con la corriente. Si el nivel de agua es alto y la corriente es fuerte, lo mejor es abandonar el automóvil antes de que sea demasiado tarde.

Si te encuentras dentro del vehículo mientras este se inunda o cae al agua, libera tu cinturón de seguridad de inmediato y trata de bajar la ventanilla. Es fundamental actuar rápidamente, ya que solo tendrás entre 30 segundos y un minuto antes de que el vehículo se inunde por completo. Mantén la calma en todo momento y verifica el estado de los demás ocupantes del vehículo. Si alguien está inconsciente o incapaz de liberarse por sí mismo, trata de ayudarlo si es posible.

Utiliza un martillo de emergencia

Intenta abrir la ventana y salir del vehículo. Si la corriente es fuerte, nada a favor de esta hasta llegar a una zona segura. Si no puedes abrir la ventana debido a un fallo eléctrico o porque el agua ya cubre parte del cristal, utiliza un martillo de emergencia diseñado para romper vidrios. Este tipo de herramienta también suele incluir un cortador de cinturones, lo cual puede ser útil si tienes dificultades para desabrocharlo.

Si todas las opciones anteriores fallan y el vehículo se inunda por completo, espera a que la presión se equilibre y trata de abrir la puerta. Es crucial actuar con rapidez, ya que el tiempo es limitado y cada segundo cuenta. Recuerda que es esencial abandonar el vehículo en los primeros metros de profundidad para evitar que la presión del agua dificulte tu salida. Finalmente, prioriza tu seguridad por encima de todo. La ropa pesada y los zapatos pueden dificultar tu escape, así que deséchelos si es posible. En situaciones extremas, recuerda que tu vida es lo más importante, independientemente de las preocupaciones sobre el seguro del vehículo.