Coronavirus

La aeronáutica ante las turbulencias del Covid-19: Andalucía se aferra al sector militar para sobrevivir

La demanda de producción cae a la mitad en el escenario más pesimista. En el mejor de los casos, se perderán mil aviones. Si las restricciones de movilidad se amplían dos meses, las pérdidas serán del 30%

Los sindicatos de Airbus rechazan el ajuste laboral y convocan movilizaciones
La planta de ensamblaje del avión militar Airbus A400M en la factoría de San Pablo en Sevilla. EFE/Julio MuñozJulio MuñozAgencia EFE

El presidente del clúster Andalucía Aerospace, Antonio Gómez-Guillamón, ofreció en un webinario organizado junto a la Cámara de Comercio de Sevilla, una visión del presente futuro. El escenario en el sector aeronáutico tras la crisis está lleno de incertidumbre.

Antonio Gómez-Guillamón, presidente de Andalucía Aerospace, apela a “posicionar Andalucía como lugar idóneo de Europa para la experimentación de drones”
Antonio Gómez-Guillamón, presidente de Andalucía Aerospace, apela a “posicionar Andalucía como lugar idóneo de Europa para la experimentación de drones”La RazónLa Razón

El antes

La aeronáutica venía de unos meses de enero y febrero -un mundo de tiempo tras la pandemia- en los que “había preocupación” en el segmento de los aviones militares, señaló Gómez-Guillamón. “No se confirmaban nuevos trabajos” y el sector “estaba languideciendo, había que estirar los programas, a la espera de campañas comerciales, había que ganar tiempo”. Se produjo “cierto ajuste de la capacidad en el ámbito de aviones de transporte militar” y existía un “malestar social ante algún tipo de ERE”. En resumen, se vivía con “cierta preocupación lógica”.

Por el contrario, en el ámbito comercial, Boeing tenía problemas con el 737 Max y Airbus canceló hace un año el A380, “con importante peso en Andalucía”. “Quitando estos dos asuntos, el resto eran buenas noticias”, apuntó el presidente de Andalucía Aerospace. El tráfico aéreo crecía a un ritmo sostenido del 4,5%. Airbus tenía una “posición envidiable", con una cartera de 10 de pedidos. “Para 2030, hacían falta 22.000 aviones”. El reto “era aumentar el ritmo de producción” y “aprovechar la revolución digital”. En resumen, “a Boeing la crisis le coge totalmente despeinado. A Airbus, en forma y saneada”.

Preludio

Antes del estado de alarma generalizado, se vive “una situación de miedo, parecía una guerra”. Gómez-Guillamón aludió a “decisiones demasiado rápidas como el cierre de sectores de actividad no esencial, en una tarde”. Aparecieron los “permisos retribuidos recuperables”, una situación que “duró dos semanas” y aún “lo tenemos que somatizar. Y sin saber la evolución”.

El ahora

“El mundo se ha dado la vuelta desde el punto de vista aeronáutico. El asa ahora es el ala militar”, explicó el presidente de Andalucía Aerospace, lo que, de cara a Andalucía, puede ser un factor de “certidumbre”.

Se ha producido “cierta pérdida de ritmo (de producción) ante la prevención de contagios”. La prioridad pasa por “salvaguardar la salud" pero “tenemos que recuperar el tiempo perdido”. El hecho de que el sector militar sea el menos dañado “es una buena noticia. Es el segmento donde más empleo tenemos en Andalucía. Nos da certidumbre para navegar en lo que queda de pandemia”, indicó Gómez-Guillamón.

En el área de los aviones comerciales, “la situación pasa a ser terrible”. En abril, el 70% de la flota estaba en tierra. En Europa, “prácticamente toda” con las fronteras cerradas. “Las aerolíneas se están desangrando pasando su temporada alta”, por lo que es una “situación muy difícil en el empleo. Las compañías tenían planes de futuro, pedidos lanzados, algunos a mitad, en inicio o por recoger. Eso arrastra toda la cadena”. Aún se desconoce “cómo de profunda será la crisis”.

La compra de una avión, explicó Gómez-Guillamón, “se parece a la compra de un piso sobre plano”. Se da una señal y después se producen los pagos “por hitos de cumplimientos”. “Las compañías en principio no pueden echarse atrás. Te puedes enfrentar a penalaciones”. Pero las “compañías están atadas con los aviones en tierra y la industria aeroespacial ve cómo la cartera de 10 años” queda en solfa. “En esta crisis se trata de ganar tiempo. Nadie va a hacer un pedido nuevo. El fabricante pierde la parte más golosa, la reserva. En abril no se produjo ni un pedido. El fabricante tampoco puede ahogar a sus clientes”, explicó Gómez-Guillamón.

La supervivencia pasa por un plan de ayudas a las aerolíneas. Además, se ha perdido el ritmo de producción mundial. Cada país se ocupa de una parte del proceso y al vivir la pandemia en distintos tiempos y escala, la producción presenta “ineficacias”. “La orquesta no toca en armonía y es una situación nueva”, indicó Gómez-Guillamón.

Las soluciones inmediatas pasan por “protegerte: bajar la producción a un porcentaje prudente”. “Lo importante es salvaguardar la industria y capacidad de crecer en el fututo”, esto es, “salir vivos y con capacidad de crecer como antes”, señaló el presidente de Andalucía Aerospace. Airbus decidió bajar según qué avión un tercio su ratio de producción; en Boeing “es más complejo por el Max pero también” hizo lo propio. 2La pena es que no sabemos lo que va a durar la situación. En Europa se va mejorando la situación sanitaria. Lo importante es ver aviones en el cielo y tener ambiciones. Vivimos de nuevos aviones", explicó Gómez-Guillamón.

El presidente de Andalucía Aerospace señaló que “las naciones replantearán sus presupuestos. En Defensa, en España suelen salir perdiendo. En otros países no. No se sabe cómo afectará esto a los programas aeronáuticos”, expuso. “Hay quien dice que vamos a salir como un mundo más amable y conciliador, creo que estamos en polaridad, en grandes naciones sacando músculo. Y algunas se ponen nerviosas. Y Europa no puede dejar de ser una integrada y unida. Europa también tiene que tener potencia militar si quiere peso. España no puede quedarse atrás. Es necesario más europeismo, y más integración en la defensa europea”, señaló.

El mundo que viene

En la aviación comercial, “en 2021-22, el turismo crecerá. El mundo cada vez es más global”. En la parte de negocio, “nos ahorraremos viajes con las plataformas digitales”. “El problema es que el crecimiento del 4,5% estaba asociado al crecimiento del PIB mundial. Donde más crisis haya, más reducción puede haber”. Habrá “menos turismo” y “se espaciarán más las visitas” a familiares y amigos.

“Ver el futuro significa dibujar escenarios”. Todo está condicionado a “cuánto dure la crisis”. Como Clúster Andalucía Aerospace tenía una cartera hasta 2030 de 22.000 aviones y se esperaban nuevos. "Si la movilidad se recupera, si se llega a la campaña de invierno con cierta normalidad, sería una crisis en V pero pequeña. En lugar de 22.000, serían 21.000. El escenario más optimista es “difícil” que ocurra. “Sin Covid para el 2030 tendríamos unos 35.000 aviones volando”.

Si las restricciones de movilidad en lugar de dos meses son de cuatro, y la campaña de invierno se ve afectada pero se retoma primavera-verano y el tráfico queda tocado en un 90%, después de la V, “se volverá a crecer esperemos al ritmo de antes de la crisis, pero se habrá perdido un 30% de nuevos aviones: serán 16.000 en lugar de 22.000”. “La tarta será más pequeña para todos. Sería volver unos años atrás”, indicó Gómez-Guillamón.

“El mundo aeronáutico ha dado la vuelta, ahora vuelve a cobrar importancia la producción de aviones militares, y afortunadamente este es el segmento que más empleo y negocio genera en Andalucía”

El escenario más pesimista es que la pandemia siga y con ellas las restricciones de movilidad en 2021. Se perderá la campaña de verano, no habrá demanda de aviones y afectará al invierno. Habrá que esperar a 2022, en primavera-verano “para volver a coger plena capacidad: se perderá casi el 50% de la producción” y sólo se requerirán 11.000 nuevos aviones.

En todos los parámetros, “hay combinaciones intermedias”. Lo que está claro es que “si no se toman medidas suficientes de rescate de compañías aéreas, con estrategias defensivas de innovación, miraremos y nos encontraremos al coche chino dispuesto a adelantarnos”, lo que se traduce en “la amenaza de ser tres en lugar de dos potencias”.

“La inexistencias de pedidos nuevos ha hecho que bajemos la cadencia de producción para protegernos, y salvaguardar la industria y la capacidad para poder crecer en un futuro”

Retos

“El Covid es la definición perfecta de cisne negro” pero también está “el cambio climatico”, que es “un elefante en la sala”. “Nuestra industria tiene mucho margen de desarrollo”. Andalucía Aerospace aboga por "ponernos a la cabeza para que sea sostenible y duradera en el tiempo. “El avión más eléctrico tiene que estar ahí. El mundo va a seguir siendo global” y se usarán “aeropuertos menos congestionados”.

En el empleo quedan “dos años muy complicados por delante”. “Hay que proteger el talento”, señaló. “La contracción de ahora ya la tenemos: el segmento militar funciona y da visión a corto o medio plazo. En el comercial, sin la reducción de un tercio en Airbus eran meses de superviviencia”. Por su parte, “el plan estratégico andaluz es válido conjugando con protección del sector” y haciendo “más visible lo que hay en Andalucía”.

Con todo, para el presidente de Andalucía Aerospace, “la globlización es imparable, irá a más. Eso se compagina con un mundo más polarizado de grandes potencias”. “Tenemos que ser potencia única jugando el tablero con los mayores. Rivalizar y colaborar con las demás”, dijo. “La evolución hace entender que te interesa controlar la cadena de suministro en un entorno cercano que sabes que no te va a fallar”, señaló como aprendizaje de esta crisis. De “la revolución de producir de la forma más barata, evolucionamos a fabricar de la forma más inteligente. No es tan importante el coste de la mano de obra sino lo inteligente que eres en un entorno digital, flexible y dinámico y el liderazgo tecnológico forma un papel predominante”.

Andalucía

“Sevilla es el centro de gravedad de la industria aeronáutica pero está Cádiz y Málaga. Jaén está jugando su papel. Esta semana se ha incorporado una nueva empresa. Está Córdoba y pronto Huelva. Hay que trabajar en asociación andaluza espacial. Aprovechar sinergias. Defender lo nuestro y atraer trabajo. Visión regional y multiactividad. No sólo ensamblaje, hay software, ingeniería, multiactividad, hay que conjugar todo. Podemos presumir del ciclo completo y competir", destacó Gómez-Guillamón. "Nuestras empresas tienen oportunidades y nuevos horizontes para diversificar su trabajo, como por ejemplo en la operación con drones. Debemos posicionar Andalucía como lugar idóneo de Europa para la experimentación de drones”, indicó.

Francisco Herrero
Francisco HerreroLa RazónLa Razón

Por su parte, el Presidente de la Cámara, Francisco Herrero, expresó su preocupación sobre la situación de “un sector que resulta fundamental, tanto por el volumen de facturación como por el elevado número de puestos de trabajo que genera, puestos de trabajo cualificados, en una industria que representa innovación tecnológica, desarrollo y futuro. Por lo que ahora más que nunca, las distintas administraciones tienen que ayudar con medidas económicas, sociales, laborales, de desarrollo de negocio y de apoyo a la I+D, para que las empresas puedan continuar desarrollando su actividad, generando riqueza y empleo”, añadió Francisco Herrero.

El Covid-19 ‘vacía’ los aeropuertos andaluces un 99%
Los aeropuertos andaluces registraron un total de 8.641 pasajeros durante el mes de abril, lo que supone un 99% menos respecto al pasado mes de marzo con un total de 1.554 operaciones de tráfico aéreo registradas, ante las consecuencias y restricciones decretadas por la expansión del coronavirus.
Según datos de Aena, recabados por Europa Press, la terminal andaluza que más pasajeros registró durante el mes de abril fue la de Málaga-Costa del Sol, que alcanzó los 5.254 viajeros, una bajada interanual del 99,7%. Tras el de Málaga, el aeropuerto de San Pablo Sevilla registró un total de 2.085 viajeros, un 99,7% menos que en el mismo periodo del año anterior.
El helipuerto de Algeciras (Cádiz) registró en abril hasta 449 pasajeros, con un descenso del 83,5% y el aeropuerto de Federico García Lorca Granada-Jaén contabilizó 371, lo que supone un 99,6% menos. Almería, con 234 viajeros, ha registrado un retroceso del 99,7% respecto al mismo mes de 2019; mientras que el aeropuerto de Jerez de la Frontera (Cádiz) registró 157 pasajeros y un descenso del 99,8%. Por último, el de Córdoba contabilizó 91 viajeros, un 86,9% menos que en el mismo mes del pasado año.
En cuanto a las operaciones, la terminal que más registró fue el aeropuerto de Málaga, con 580, lo que supuso un 95,6% menos con respecto a 2019, mientras que Sevilla registró 579 operaciones, lo que supuso un descenso del 89,8% con respecto a 2019.
Por su parte, Algeciras ha contabilizado hasta 132 operaciones, un 43,6% menos que en abril del año anterior; Almería, con 76 operaciones, registró un descenso del 92,2%, y Jerez de la Frontera, con 66, descendió sus operaciones en un 98,5%. En Granada-Jaén se registraron en abril 61 operaciones, un 94,2% menos, y en el de Córdoba, 60 operaciones, lo que supuso un descenso del 89,8%.