La cámara hiperbárica de la Armada atiende con éxito a un buceador de la almadraba de Barbate

Un buceador de la almadraba de Barbate (Cádiz) que, tras finalizar una inmersión, sufrió una parálisis en el brazo, ha comenzado a recuperar la sensibilidad en el brazo gracias al tratamiento que recibió tras el accidente n la cámara hiperbárica de la Unidad de Buceo de la Armada en Cádiz.

En una nota de prensa, la Armada explica este viernes que el accidente ocurrió el pasado 2 de julio cuando el buceador de la almadraba - las personas que en el mar se encargan de seleccionar a los atunes que se van a pescar con este arte milenario - sufrió la parálisis del brazo a consecuencia de la descomprensión, una de las patología más corrientes que padecen los buceadores.

Tras ser asistido en primera instancia por los servicios de emergencia del Sistema Nacional de Salud y haber mejorado con estos primeros auxilios, fue trasladado a la Estación Naval de la Armada de Puntales, en Cádiz, donde, durante 90 minutos, recibió tratamiento especializado en la cámara hiperbárica de la Unidad de Buceo.

"Este equipo de medicina hiperbárica proporciona oxígeno a una presión tal que favorece una recuperación mucho más rápida, además de evitar los posibles efectos secundarios a largo plazo", explica la Armada.

La Jefatura de Apoyo Sanitario aplicó al paciente una tabla de tratamiento estándar al objeto de atajar la enfermedad descompresiva.

“La cámara hiperbárica recomprime y emula las condiciones en las que el buzo se encontraba bajo el agua para después practicarle un ascenso a la superficie más controlado”, explica en la nota el teniente médico Francisco Manuel Ruiz Reyes, que atendió al paciente.

Tras salir de la cámara hiperbárica, el paciente comenzó a recuperar la sensibilidad del brazo.

La cámara hiperbárica de la Armada se destina fundamentalmente para accidentes de buceo de las Fuerzas Armadas y Guardia Civil, además de dar apoyo al buceo civil.

También da asistencia a otras patologías que atiende el Sistema Andaluz de Salud, ya que puede ser empleada para favorecer la cicatrización de heridas de mala evolución.

El equipo encargado de operar esta cámara hiperbárica estuvo compuesto por un teniente médico con la aptitud de buceo y dos suboficiales camaristas destinados en el hospital de San Carlos, quienes se encuentran en régimen de plena disponibilidad para atender este tipo de urgencias.

Asimismo, contaron con el apoyo de los camaristas con aptitud de buceo destinados en la propia Estación Naval de Puntales.

"Este suceso ha puesto de manifiesto, una vez más, la excelente coordinación entre los recursos civiles y militares. La actuación conjunta del Sistema Nacional de Salud, la Unidad de Buceo de Cádiz y la Jefatura de Apoyo Sanitario ha permitido una respuesta rápida, eficaz y con altos estándares de seguridad ante una situación de emergencia", explica la Armada.