Nuevo intento para que el Gobierno andaluz tapone la hemorragia sanitaria

«No saben qué es lo que quieren, no se aclaran y no hay coordinación entre ellos». Se refieren a los integrantes del Gobierno andaluz y son palabras de fuentes de UGT, un sindicato que, como CC OO y CSIF, acudirá hoy «sin mucha confianza» y «por responsabilidad» a la Mesa Sectorial de Sanidad ordenada por el presidente andaluz, Juanma Moreno, para negociar las mejoras laborales de 137.000 profesionales sanitarios. Y ello, pese a que dieron por «dinamitada» la celebrada el pasado 7 de julio por la negativa de la Junta a mantener la carrera profesional en el acuerdo que se negociaba.

El titular de Salud y Familias, Jesús Aguirre, aseveró que se abordarían ese día mejoras laborales para los sanitarios, pero los sindicatos niegan que éstas se trataran. El orden del día del encuentro de esta mañana, que arrancará a las 10:30 horas, recoge en su punto número uno, según pudo saber este periódico, «Medidas adicionales para compensar a los trabajadores de la sanidad andaluza por Covid-19» y en el dos «Mejoras laborales y retributivas SAS –Servicio Andaluz de Salud–». Los sindicatos barajan que se pueda articular cierto tipo de «paga extra» por la lucha contra el coronavirus, en línea con lo aprobado en el Parlamento autonómico, y alguna otra iniciativa como «más días libres».«Pero, veremos», lanzaron desde esas organizaciones sindicales tras «lo vivido».

De momento, los tres mencionados sindicatos impulsarán concentraciones en todos los centros sanitarios de la región a partir de la semana que viene para exigir un pacto sobre condiciones laborales, retributivas y asistenciales. Dichas protestas culminarán al final de julio con un acto frente a los servicios centrales del SAS. Este diario ha podido saber que UGT, CC OO y CSIF han invitado por carta al Sindicato Médico Andaluz (SMA) y al de enfermería Satse a «seguir recorriendo juntos el camino». El último denunció ayer que el SAS pretende subir el salario a los médicos en una cuantía muy superior a la que podrían percibir enfermeros y fisioterapeutas, un «agravio» por el que no descartaron ir a la huelga. Barajan que el alza para los primeros sea de «850 euros», mientras los segundos cobran los salarios «más bajos» del país, «unos 1.300 al mes».