Economía

Almería abre una puerta al pleno empleo

El turismo inicia su recuperación con la cifra más alta de cotizaciones y menor tasa de paro de la década en la provincia

Imagen de camiones en el centro de transportes de Almería
Imagen de camiones en el centro de transportes de AlmeríaLa RazónLa Razón

El empleo parece germinar en la parte oriental de Andalucía. En diciembre, la provincia de Almería alcanzaba la cifra más alta de afiliados a la Seguridad Social, sumando seis meses de generación de empleo consecutivos. Datos para la esperanza con más de 600 empresas creadas, yacimientos de empleo y doce mil nuevos trabajadores que hacen que se supere ya el mercado laboral prepandemia. «No hay paro. Aquí uno se puede hinchar de trabajar», asegura Juan Álvarez, de la Asociación de Transportistas de Almería, Atralme Fedinasmer, que representa a la patronal y pymes de la Federación Nacional de Mercancías por Carretera, con unos mil camiones y doscientas empresas asociadas. Apenas una parte, un diez por ciento, de todos los transportistas y flotistas que tienen su central en Almería. «Había un problema de deslocalización, de empresas que se iban fuera, por ejemplo, a Rumanía. Y operaban desde aquí, por lo que competíamos con sueldos diez veces menores. Ahora se están intentando transponer las directivas europeas para armonizar el transporte», explica. En el transporte se encuentra una de las bolsas de empleo de una provincia que ya tiene un 3,95% más de afiliados que en diciembre de 2019.

En las claves de la recuperación están «la buena salud de la base de nuestro tejido productivo, que es el sector agrícola, con sus actividades económicas asociadas». El delegado de Empleo en Almería, Emilio Ortiz, analiza el mejor dato de tasa de paro de los últimos diez años: «2021 se ha confirmado como un año de intensa recuperación del empleo, alcanzando cifras de reducción del paro desconocidas en toda la serie estadística, con 13.500 parados menos en el año».

Pendientes de la evolución del primer trimestre, ante la sexta ola y las posibles restricciones que puedan aprobarse, también en el turismo asoman brotes de recuperación. Según el delegado de Turismo de la Junta, Vicente García Egea, «hemos recuperado más de un 60% de visitantes respecto a 2020. Veinte millones de turistas y previsiones, según nuestros datos, que pueden dejar un aumento hasta los 25 millones en 2022. Estaremos ya cerca de nuestro año récord, que fue en 2019, con 32 millones».

La pandemia ha hecho que se fortalezca el turismo nacional y, sobre todo, que crezca el mercado de los alojamientos rurales. El turismo interior se convierte en referente, con ocupación total en Laroya y con una media del 80% en comarcas como Los Vélez o el Almanzora. «Bajó en diciembre con la nueva oleada, pero nos sigue dejando una base muy importante para trabajar con touroperadores internacionales y de cruceros». Pero no todo el mundo quiere acceder a los empleos disponibles por su exigencia, su dureza o sus salarios. Volviendo a los datos del transporte, «aunque se ganen entre 2.500 y 3.500 euros, es duro para un conductor estar fuera de casa tres semanas», reconoce uno de los fundadores de Atralme. Los sindicatos ponen el foco en las sombras del crecimiento laboral: «Lo hemos pasado todos muy mal en pandemia y está claro que los datos son buenos: 56.000 desempleados, una tasa por debajo del 19% y tres puntos por debajo de la media andaluza. Pero positivo todo no es». La secretaria general en Almería de UGT, Carmen Vidal, incide en la relevancia de impulsar el trabajo decente. «Nuestro mercado laboral está muy marcado por la temporalidad, por la agricultura y el manipulado».

A la espera de una reforma laboral que tendrá que pasar por el Congreso, un 10,92% de los contratos en Almería fueron indefinidos, un porcentaje muy similar a la media nacional, que los representantes de los trabajadores ponen en entredicho por insuficiente. «La tasa de temporalidad ha subido al 96% de los contratos en diciembre», dice Antonio Valdivieso, secretario provincial de Comisiones Obreras. «Se descendió con mil cien nuevos trabajadores por el ‘efecto Navidad’. Seguramente enero y febrero sean mucho menos positivos». En el último mes, el sector servicios fue el que más creció, con más de quince mil contratos; seguido, de nuevo, por la poderosa agricultura y sus ocho mil altas. En tercer lugar, la construcción, que tiene peor comportamiento en esta tierra que la media andaluza, pese a generar más de mil puestos de trabajo en diciembre. Y un modelo productivo que deja en último lugar la industria, incipiente con sus 813 nuevos contratos. Pero, ¿qué perfiles de trabajadores encuentran su sitio? Siguiendo con la comparativa interanual, el paro ha bajado en todos los grupos de edad, especialmente entre los jóvenes menores de 25 años (con la mayor bajada relativa, casi un 31%). Del total de contratos suscritos, 9.490 lo fueron a ciudadanos extranjeros.

«Hay yacimientos de empleo que nadie quiere cubrir y cuyas vacantes son aprovechadas en su mayoría por población extranjera», como el trabajo en el campo o en el transporte. Desde CSIF, su presidente en Almería, Juan Fernández, señala que hay que aprovechar la coyuntura para «hacer políticas de empleo en la agricultura y en el turismo para mejorar la estabilidad y calidad». Un milagro laboral, aún con pies de barro, pero que deja un ejemplo claro en el feudo agrícola por excelencia de la provincia, El Ejido. Allí la tasa de desempleo no alcanza ni el 12%. Los sindicatos esperan que la estabilidad y la calidad de las contrataciones se mejore con una reforma laboral que pretende aplicar un modelo que ya es antiguo en el manipulado almeriense: el trabajador fijo discontinuo.