Quirónsalud consolida su apuesta en el tratamiento de la obesidad en Andalucía

Los datos del último Estudio Nutricional de la Población Española (ENPE) vislumbran que Andalucía es una de las comunidades españolas en las que más han aumentado las personas con obesidad o sobrepeso. Según el informe, la región andaluza muestra una tasa de obesidad del 26,7%, una de las más altas del país. Los expertos coinciden en que la obesidad es la pandemia silenciosa que más crece en los últimos 20 años. Esta situación se ha visto agravada con la irrupción de la Covid-19 porque el confinamiento obligatorio y las restricciones han expandido más aún los malos hábitos de vida que provocan la enfermedad.

Conscientes de esta situación, el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón inauguró a finales de noviembre de 2021 el Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad, en el que ha unido a un equipo de expertos en el tratamiento de esta patología, cirujanos, endocrinos, nutricionistas, psicólogos y licenciados en Educación Física para ofrecer a pacientes con obesidad un “tratamiento integral e individualizado” con el objetivo de que logren sus objetivos de una forma permanente y con las mayores garantías.

El responsable del Centro de Excelencia, jefe de Cirugía del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón y experto en Cirugía Bariátrica, Salvador Morales, explica que el centro nace con el objetivo de “asegurar los mejores resultados” en un lugar en el que un equipo especializado “acompaña al paciente antes, durante y después de la cirugía”. Ahí es donde se encuentra la clave del éxito del nuevo Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad de Quirónsalud. El seguimiento del paciente se prolonga “durante al menos un año” después de la operación para que la pérdida de peso sea correcta. Para Morales, la cirugía es “una parte tremendamente importante” en el tratamiento de la obesidad, pero asegura que mediante un equipo “que trabaje de forma conjunta” se pueden conseguir mejores resultados que “si solo nos basamos en el acto quirúrgico”.

En este contexto, ¿por qué debería una persona con obesidad recurrir a este centro? Para mejorar la salud de la mano de los mejores profesionales. La obesidad está íntimamente relacionada con enfermedades como la hipertensión, la diabetes tipo 2 y las cardiopatías. Sin embargo, Morales explica que algunos pacientes “pueden dejar de tomar la medicación prácticamente al día siguiente de realizar la operación”. Así las cosas, el experto en Cirugía Bariátrica asegura que los pacientes “se sienten más ágiles, felices, se pueden asear mejor y les duele menos las articulaciones” después de pasar por el centro.

Por otro lado, el responsable del Centro de Excelencia insiste en que este tipo de cirugía “es bastante segura” gracias a la tecnología con la que cuentan tanto en el quirófano como en el resto del centro. “Hemos avanzado muchísimo en este ámbito para realizar operaciones con un alto margen de seguridad”, recuerda Morales.

Respecto al tiempo que un paciente necesita una vez que ha decidido acudir al centro, Morales explica que en un mes y medio aproximadamente se prepara al paciente para la operación (en el que puede hacer una vida completamente normal) y, después de la intervención, desde el centro piden “bajar el ritmo de su actividad laboral” durante un mes para que el cuerpo se “adapte” a la nueva situación. En otras palabras, después de la operación, el paciente podrá hacer su vida normal cuando pase un mes o mes y medio.

El jefe de Servicio de Endocrinología y Nutrición del centro, Alberto Aliaga, es el encargado de realizar la valoración médica “para entender los factores determinantes de la obesidad y con ello poder planificar el abordaje terapéutico más apropiado”. Según explica, “en algunos casos será necesario realizar estudios para evaluar posibles trastornos médicos causantes de la ganancia de peso o que dificultan la pérdida de peso durante el tratamiento, o aquellos hayan aparecido o agravado a consecuencia del sobrepeso”. Asimismo, Aliaga recuerda que el origen de la obesidad “suele ser un problema complejo y multifactorial, donde se unen factores externos (hábitos de vida, polución, factores laborales y socioeconómicos) y factores biológicos, entre los cuales si pudiéramos evidenciar alteraciones en hormonas relacionadas con el apetito o con el metabolismo”.

Aliaga hace hincapié en que, además de las enfermedades citadas anteriormente, la obesidad acarrea otros problemas como “dislipemia, hígado graso, apnea del sueño, infertilidad, problemas articulares, problemas de la esfera emocional y social y determinados tipos de cáncer”.

En esta línea, el médico recomienda que las personas con obesidad se olviden de las dietas milagro y que acudan a un especialista para “abordar su problema de salud desde una visión científica y profesional alejada de modas o teorías no probadas que solo generar falsas expectativas, resultados transitorios y frustración en el paciente”.

En lo que respecta a la nutrición, el jefe del Área de Nutrición, Felipe del Valle, asegura que, aunque la alimentación –en general– de los andaluces “está lejos del concepto de dieta mediterránea, está habiendo un cambio sustancial en los últimos años en el que la población se preocupa más y con verdadero interés en cuidar y prestar atención a la alimentación”.

¿Dónde está la causa de la obesidad? Del Valle afirma que “la genética influye, pero no es determinante” y apunta a que la principal causa es “la descompensación en la balanza energética, es decir, ingerir mas kilocalorías que las que se gastan no solo por un exceso de ingesta, sino también por escaso gasto”.

En este contexto, el jefe del Área de Nutrición garantiza que, desde el centro, gracias a “un abordaje multidisciplinar”, consiguen cambiar los malos hábitos de los pacientes. Según explica, “resulta clave entender bien el contexto del paciente, buscar diferentes ambientes motivadores desde el punto de vista de la alimentación, del ejercicio y actividad física”.

Del Valle recalca que en el Centro de Excelencia en el Tratamiento de la Obesidad de Quirónsalud han realizado –gracias su la dilatada experiencia– un completo manual que “detalla y guía paso a paso lo que debe ir haciendo el paciente tanto en la fase previa como en las posteriores fases postquirúrgicas”. Además, otro dato diferenciador del centro es que se “realizan con la ayuda de un laboratorio formulaciones propias de suplementos vitamínicos y proteicos con un resultado en composición, calidad y biodisponibilidad superior a las que actualmente nos ofrecen las marcas comerciales”.

Por otra parte, otro de los pilares que ayudan a los pacientes a conseguir sus verdaderos objetivos es el área de Salud Mental. Paloma Carrasco, jefa del Área de Psicología, detalla que, aunque “no hay un perfil homogéneo” en las personas con obesidad, sí hay algunos factores comunes como “una mala educación alimentaria en la infancia, un excesivo interés por la comida como compensación o placer y demasiado sedentarismo”. Además, asegura que encuentra con bastante frecuencia “una mala gestión emocional, que hace que a través de la comida se cuelen síntomas ansiosos y/o depresivos”. En este sentido, la psicóloga recuerda lo importante que es contar con un profesional: “tras la cirugía se producen muchos cambios a una gran velocidad que si no se acompañan de los cambios a nivel interior pueden verse descompensados”.

El Área de Psicología ayuda a que los pacientes desarrollen buenos hábitos, entiendan qué los llevó a tener ese problema y cómo superarlo para siempre. Carrasco subraya que “la clave de todo cambio personal es interior, debemos entender y comprender qué me ha llevado a desarrollar este problema y encontrar la motivación y la fuerza para ser constantes en el proceso, querer cambiar a mejor”. Asimismo, Carrasco anima a todas a aquellas personas que están en esta situación a que den el paso de la mano de profesionales para ser “más libres y fuertes”.

Por último, la responsable del Área de Educación física y entrenamiento deportivo, Adriana Núñez, destaca que “independientemente de la edad y las circunstancias de cada persona siempre hay una actividad física” que se puede desarrollar. Con estas palabras, Núñez quiere reflejar la importancia del deporte en el tratamiento de la obesidad porque, según detalla, la actividad es beneficiosa para “el aumento de la capacidad pulmonar, el incremento de la fuerza y la masa muscular, control de los factores de riesgo cardiovasculares o la mejora del equilibrio psicológico”.

La obesidad es un problema endémico que cada vez más personas sufren en el mundo. Actualmente, el 53% de los españoles, uno de cada dos, tiene esta enfermedad. Sin embargo, gracias a la ayuda de los profesionales de Quirónsalud, que trabajan de forma conjunta para ofrecer una respuesta integral, se puede acabar con ella y conseguir, sin excusas, un estilo de vida saludable.