Pacientes

Última tecnología para tratar el daño cerebral infantil

El Instituto de Neuro-rehabilitación Quirónsalud Pontevedra es el único del norte de España con Lokomat, un sistema de rehabilitación robotizada adaptado a niños

Última tecnología para tratar el daño cerebral infantil
Última tecnología para tratar el daño cerebral infantillarazon

El Instituto de Neuro-rehabilitación Quirónsalud Pontevedra es el único del norte de España con Lokomat, un sistema de rehabilitación robotizada adaptado a niños

Hay patologías en las que la constancia y el esfuerzo son la mejor medicina. Y eso es lo que ocurre precisamente con el daño cerebral adquirido, es decir, con esas lesiones cerebrales que aparecen derivadas de un accidente cerebrovascular agudo (ictus isquémico o infarto cerebral), un traumatismo cranoencefácilo (provocado por accidentes de tráfico, laborales, etc.) o por causas sobrevenidas como tumores cerebrales. Más de 420.000 personas viven con esta patología en nuestro país, lo que se traduce en alteraciones tanto a nivel físico como cognitivo, sensorial y emocional, provocando en muchos casos una situación de dependencia para los pacientes.

Con el objetivo de recuperar la autonomía del afectado en el menor tiempo posible, resulta fundamental que los pacientes trabajen su movilidad a través de salas dotadas de aparatología específica de última generación. Buen ejemplo de ello es el Instituto de Neuro-rehabilitación Quirónsalud Pontevedra, cuya unidad de tratamiento es única en el norte de España gracias al uso de Lokomat, un equipo de alta tecnología diseñado para la rehabilitación robotizada y que puede utilizarse también en niños a partir de cuatro años a través de la inclusión de un módulo pediátrico. «Con los niños trabajamos siempre a través del juego, propiciando la concentración en el tratamiento mediante bio-feedback, programa propio del Lokomat, para la intervención más activa posible del paciente», explica Ana Enríquez, responsable médico del Instituto de Neuro-rehabilitación Quirónsalud Pontevedra.

Frente a otros tratamientos tradicionales, «el Lokomat destaca porque se trata de una terapia muy completa donde se activa todo el sistema locomotor simultáneamente, lo que permite acelerar los progresos de la recuperación. Al mismo tiempo trabajan los grandes grupos musculares para conseguir mejorar control cefálico, de tronco, ciclo de marcha y automatizar el movimiento», detalla Enríquez.

Sistema robotizado

En el caso de los adultos, Lokomat permite substituir, total o parcialmente, el entrenamiento de locomoción asistido manualmente sobre cinta rodante. «Es una órtesis de marcha de accionamiento eléctrico que destaca por ser una terapia muy completa en la que se activa todo el sistema locomotor», explica Enríquez. Para pautar el tipo de tratamiento que se lleva a cabo, antes de iniciar cualquier terapia el equipo de profesionales neuro-rehabilitadores realiza una valoración previa del paciente. En concreto, el médico rehabilitador de la unidad es quien valora al paciente y establece la aptitud o no para el tratamiento, así como la pauta de frecuencia, duración, revisiones periódicas, etc».

El daño cerebral adquirido deja secuelas importantes. «Cada caso es diferente y es muy difícil generalizar, pues hay muchos factores que influyen», asegura Enríquez. Sin embargo, el esfuerzo realizado en estas salas tiene su recompensa. «Nuestra experiencia nos demuestra que podemos conseguir la recuperación de muchas de las funciones dañadas, potenciar capacidades preservadas y conseguir que el paciente pueda adaptarse progresivamente a las limitaciones derivadas del daño. En definitiva, lo que sí conseguimos en la mayoría de los casos es mejorar la calidad de vida del paciente», concluye Enríquez.