Personalidades
El megayate del sobrino del magnate Amancio Ortega surca un año más las aguas de Baleares
La embarcación está valorada en siete millones de euros y está bautizada como Tumberry C. De momento, navega por las aguas de Ibiza y Formentera
La silueta imponente del yate Tumberry C vuelve a dejarse ver en aguas de Ibiza y Formentera, uno de los enclaves favoritos del turismo de alto poder adquisitivo durante la temporada estival.
Pero más allá de sus líneas elegantes y de su presencia en enclaves exclusivos, lo que ha llamado la atención en los últimos días es la identidad de su propietario: Juan Carlos Rodríguez Cebrián, un nombre discreto pero clave en el entramado empresarial vinculado a Inditex.
Rodríguez Cebrián está casado con Dolores Ortega, sobrina del fundador del gigante textil, Amancio Ortega, cuya fortuna supera los 115.000 millones de euros, según las estimaciones más recientes.
Con una extensa trayectoria en el sector, el empresario gallego llegó a ocupar el cargo de director general del grupo entre los años 2000 y 2005, etapa en la que consolidó su influencia en el desarrollo y expansión del holding.
Una historia singular
El Tumberry C, como se llama actualmente esta embarcación de lujo, cuenta con una historia singular. Su nombre original fue Núfer, y durante años estuvo vinculado al empresario vigués Fernando Fernández Tapias.
En su cubierta han navegado personalidades del panorama mediático y político español, como Isabel Preysler, Lydia Lozano o incluso la familia del expresidente José María Aznar. Con posterioridad, el yate fue adquirido por Rodríguez Cebrián, que lo rebautizó con el nombre que luce actualmente.
Además de su conexión familiar con Amancio Ortega, el actual armador del Tumberry C ha construido su propio emporio a través de diversas sociedades mercantiles centradas principalmente en el sector inmobiliario, la hostelería y el ocio nocturno. Entre ellas destacan Marlolan e Inversiones Saona, dos firmas que gestionan parte de su actividad económica fuera del núcleo textil.
Los últimos datos disponibles reflejan la magnitud de estas operaciones. En el ejercicio de 2023, Marlolan registró un patrimonio neto de 175 millones de euros y activos valorados en 177 millones, con un beneficio neto consolidado de 5,6 millones.
Dos magnates de la inmobiliaria
Esta sociedad tiene un marcado perfil inmobiliario y ha participado en diversas operaciones de inversión en activos de alto valor, tanto en Galicia como en otras zonas del litoral español.
Por su parte, Inversiones Saona concentra su actividad en el ámbito de la restauración y el ocio nocturno, sectores que han experimentado un repunte tras la pandemia. En 2023, esta firma incrementó sus activos hasta los 661.000 euros, con un patrimonio neto que supera el medio millón y un beneficio de 226.000 euros. Se trata de cifras significativas para un sector especialmente sensible a los cambios de coyuntura económica y regulatoria.
Una visita ya habitual
La presencia del Tumberry C en las Pitiusas es habitual durante los meses de verano. Ibiza y Formentera se han consolidado como destinos privilegiados para grandes fortunas y embarcaciones de gran eslora, especialmente en zonas como Cala Jondal, Ses Illetes o Es Caló.
La discreción, los servicios exclusivos y la oferta gastronómica convierten a estas islas en punto de encuentro de inversores, empresarios y figuras públicas nacionales e internacionales.
Pese a su bajo perfil mediático, Rodríguez Cebrián mantiene una influencia notable en el ecosistema empresarial español. Su paso por la alta dirección de Inditex y su capacidad para gestionar activos en sectores clave lo convierten en uno de los empresarios más relevantes del entorno familiar de Amancio Ortega, aunque siempre alejado de los focos. La imagen de su yate en aguas baleares es una estampa que, año tras año, confirma esa silenciosa pero firme presencia.