El Teatro Zorrilla de Valladolid recupera la zarzuela con un ciclo ambicioso y de calidad

La zarzuela vuelve a las tablas del Teatro Zorrilla de Valladolid. Ese género creado para entretener a la alta sociedad española que se aburría con las óperas europeas y que tanto gusta en la capital del Pisuerga ha regresado para quedarse, según esperan el empresario del Teatro, Enrique Cornejo, y el director de la Orquesta Filarmónica de Valladolid, Ernesto Monsalve.

Así lo desearon en la presentación del ciclo de zarzuela que programa el espacio cultural desde este domingo hasta el 31 de mayo, tiempo en el que se podrá disfrutar de tres espectáculos en los que la calidad de todos los que trabajan en ellos está asegurada. «Son grandes músicos, actores y cantantes», afirmó Cornejo.

En este sentido, por el escenario del Zorrilla pasará a finales de semana «La Revoltosa», de Ruperto Chapí, con casi cien artistas en escena. «Es una de las más clásicas, imprescindible», destacó Monsalve, quien apuntó que será la preferida para quienes asocian este popular género al paisaje español.

Más tarde, el 8 de marzo llegará «Katiuska», de Pablo Sorozábal, una «opereta» que se desarrolla en Ucrania durante la revolución rusa aunque con «toques cómicos». La jornada que se interpretará, el Día Internacional de la Mujer, no ha sido elegido al azar, explicaron, ya que es «la zarzuela más reivindicativa de la igualdad entre hombres y mujeres porque en esta historia es ella la que salva la situación de dos mundos enfrentados».

Finalmente, cerrará el ciclo, el 31 de mayo, «Marina», de Emilio Arrieta, una obra más cercana a la ópera y con un «alto nivel de producción» ya que supone casi dos horas de música continuada y muchos personajes. Debido a este despliegue, será la única que cuente con doble sesión.

Con estos títulos nace esta iniciativa con la que, además, se busca llegar a un público más joven para que «la zarzuela no muera, ya que es parte de la cultura española y de su pervivencia tenemos que responsabilizarnos todos», reflexionó el empresario Enrique Cornejo.