Roma

El Papa recibe a Luis Argüello y la nueva cúpula de la Conferencia Episcopal de España

Tras una hora y cuarto de reunión, los prelados destacaron el interés del Pontífice por la situación social en el país tras el COVID-19 y por la legislación de la eutanasia

El Papa Francisco recibe en el Palacio Apostólico al cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE); al cardenal Carlos Osoro Sierra, azobispo de Madrid y vicepresidente; y a Monseñor Luis Argüello, secretario general y obispo auxiliar de Valladolid
El Papa Francisco recibe en el Palacio Apostólico al cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE); al cardenal Carlos Osoro Sierra, azobispo de Madrid y vicepresidente; y a Monseñor Luis Argüello, secretario general y obispo auxiliar de ValladolidIcal

El Papa Francisco recibió hoy en el Palacio Apostólico al cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), el cardenal Carlos Osoro Sierra, azobispo de Madrid y vicepresidente, y a Monseñor Luis Argüello, secretario general y obispo auxiliar de Valladolid, según el servicio de información del Vaticano.

Tras una hora y cuarto, el cardenal Omella expresó su alegría por el encuentro y manifestó que Francisco “sigue muy de cerca el dolor de toda la gente afectada por el COVID, tanto de la salud, como el tema del trabajo, que crea tantos problemas de cara al futuro; también por la escuela y el problema de los padres con los niños”.

Además, abordaron la situación de la eutanasia, un asunto que, según explicó el arzobispo, se enmarca dentro del interés profundo del Papa sobre la vida, tanto de los refugiados, como de los niños que nacen y de aquellos que mueren. Omella afirmó que este asunto no puede reducirse a la pura eutanasia o a la muerte, sino que dice relación con el sufrimiento de las personas. “Cuando a uno le quitan el dolor y siente la compañía de sus familiares y de profesionales, desea vivir”, sostuvo.

La inmigración fue otro de los temas que trataron los obispos con el Pontífice. Omella destacó que en España hay “una gran sensibilidad y tiene una gran presencia”. El prelado exhortó a “no ser insolidarios: ni con los enfermos, ni con los trabajadores, ni con los inmigrantes”.

“Nos ha animado a seguir avanzando en la evangelización, que es lo nuestro, la Iglesia en el gran respeto a todas las personas, a otras religiones evidentemente, pero seguir anunciando con gozo y con esperanza a Jesucristo Salvador del mundo.”

Como presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Omella, en relación a las profundas heridas a causa del COVID, hizo un llamado en nombre de los obispos españoles “a que se unan más todas las fuerzas que tenemos en España para avanzar en este camino”. El prelado llamó a “los partidos políticos, representantes del gobierno, asociaciones, instituciones civiles, sindicatos, la misma Iglesia, a trabajar conjuntamente para todos los problemas, pero sobre todo el problema que nos está planteando en estos momentos, la gente que se va a quedar sin trabajo”.

En relación a la situación que se está viviendo en Madrid, una de las ciudades más golpeas del país por el coronavirus, el Cardenal Carlos Osoro Sierra, destacó “el trabajo impresionante que está haciendo la arquidiócesis de Madrid, a través de Caritas, a través de Inmigraciones”.

Año Compostelano e Ignaciano

Durante la audiencia, que duró una hora y cuarto, los prelados hicieron junto al Pontífice un repaso de los temas religiosos, sociales y políticos que se viven en España. Al mismo tiempo, aprovecharon de renovar la invitación para que el Pontífice visite España el próximo año, en el marco de la celebración del Año Santo Compostelano y el Año Ignaciano, que se celebra durante el 2021 por los 500 años de la conversión de san Ignacio.

Finalmente, Luis Argüello, quien asumió el papel de portavoz, destacó que personalmente “ha sido una experiencia singular” y lleva consigo “la emoción del encuentro, y una llamada fuerte a la comunión y a la salida misionera”.

Al concluir, los obispos compartieron con los periodistas dos estampas regaladas por el Papa: una fotografía de un refugiado y su muchacho en la espalda con una oración escrita por el mismo Santo Padre, y otra imagen de una anciana rumana presentando a un niño en sus brazos.