Revolución en el cielo: así es el nuevo F-47, el avión furtivo que sustituirá al F-22 Raptor

La Fuerza Aérea de Estados Unidos ha confirmado su firme compromiso con el nuevo caza furtivo F-47, una aeronave de sexta generación desarrollada por Boeing, como el eje de su estrategia futura de superioridad aérea. El avión, ganador del ambicioso programa Next Generation Air Dominance (NGAD), representa un salto cualitativo en capacidades de combate, aunque sus características siguen siendo altamente clasificadas.

Durante un evento organizado por la Asociación de Fuerzas Aéreas y Espaciales (AFA), el mayor general Joseph Kunkel, responsable del diseño de fuerza y planificación estratégica en el Pentágono, calificó al F-47 como “revolucionario” para las operaciones aéreas conjuntas. Según sus palabras, permitirá a EE.UU. llegar a zonas actualmente inaccesibles y contrarrestar amenazas en entornos altamente disputados.

Diseño secreto y planes inciertos

El arte conceptual del F-47 ha sido “manipulado intensamente” para ocultar elementos clave de su diseño. Aunque la Fuerza Aérea había anticipado la compra de 200 unidades NGAD como reemplazo del F-22 Raptor, ese número ahora está bajo revisión, dado que la visión de cómo lograr la superioridad aérea sigue en evolución.

Mientras tanto, se están realizando modernizaciones significativas del F-22, lo que plantea dudas sobre el cronograma real de incorporación del F-47. El general Kenneth Wilsbach, jefe del Comando de Combate Aéreo, declaró en 2024 que ya no existía un calendario firme para retirar al F-22.

F-47: Nodo central de una red de guerra futura

Además de sus propias capacidades furtivas y ofensivas, el F-47 se espera que actúe como un controlador avanzado para drones de combate colaborativo (CCA), parte esencial del ecosistema NGAD. También jugará un rol crítico en operaciones de reabastecimiento aéreo de próxima generación, y en la integración de plataformas distribuidas con inteligencia artificial y sensores avanzados.

Costes millonarios

El desarrollo del F-47 ya ha absorbido más de 20.000 millones de dólares, y su coste unitario se estima en más de 300 millones de dólares, tres veces el precio de un F-35. Estos costos, junto con las exigencias presupuestarias, influirán directamente en el tamaño final de la flota.

El general Kunkel subrayó que el F-47 representa una "historia ganadora" para el futuro de la Fuerza Aérea, aunque todavía hay preguntas sin resolver sobre su integración plena, número total a adquirir y la evolución del conjunto de misiones que se le asignarán.