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Política

El PSOE ve más motivos en Castilla y León que en Murcia para presentar la moción de censura

La socialista Ana Sánchez insiste en que siguen trabajando en ella con discreción

Ana Sánchez, secretaria de Organización del PSOE en Castilla y León y vicepresidenta de las Cortes
Ana Sánchez, secretaria de Organización del PSOE en Castilla y León y vicepresidenta de las CortesMiriam ChacónIcal

La moción de censura presentada por PSOE y Ciudadanos en la región de Murcia -según fuentes socialistas pactada con Inés Arrimadas hace un mes y ejecutada anoche para desbancar al popular López Miras de la Presidencia ha desatado un terremoto político este miércoles en España, que está por ver sus consecuencias.

Dice el sabio refranero que “cuando las barbas de tu vecino veas pelar, pon las tuyas a remojar”. Y en Castilla y León, el PSOE ya hizo saltar la liebre hace apenas dos semanas dejando abierta la posibilidad de llevar a cabo esta misma iniciativa en esta Comunidad para echar a Fernández Mañueco del Gobierno autonómico.

Desde entonces, el tema se mantiene vivo en la actualidad informativa de la Región, también porque el PSOE se ha encargado de que la llama no se apagara, y desde el partido del puño y la rosa esta misma mañana siguen insistiendo en que están trabajando con discreción, sin prisas, en esta iniciativa porque no depende de ellos, y advierten, en palabras de la secretaria de Organización, Ana Sánchez, que en Castilla y León “hay más motivos” que en Murcia para presentar una moción de censura, en referencia a la gestión de la pandemia por parte de la Junta que los socialistas califican de “nefasta” y perjudicial para castilla y león

Además, confirma que sería el socialista Luis Tudanca el que ocupara la presidencia de la Junta, descartando así que fuera un dirigente de Ciudadanos -partido del que necesitarían el apoyo de al menos tres procuradores para llevar a buen puerto la moción dando por hecho que suman los dos de Podemos y uno de la Unión del Pueblo Leonés para lograr los 41 escaños que dan la mayoría-. el que se postulara como presidente de Castilla y León, mientras que tampoco tienen pensado hacer extensible esta iniciativa a otros ayuntamientos o diputaciones de la Comunidad, donde PP y Cs tienen la mayoría y gobiernan, como así parece que ocurrirá en el Ayuntamiento de Murcia, que entra en el lote y permitirá a ciudadanos gobernar en un cambio de cromos. en referencia a las diputaciones de Burgos, Zamora, Salamanca o Palencia, así como a los consistorios de Palencia o Salamanca.

“Nosotros no pensamos en cuotas de poder como sí hicieron Fernández Mañueco y Francisco Igea en su momento”, apuntaba esta mañana Ana Sánchez.

También defendía que el PSOE tiene un proyecto autónomo para la Comunidad y rechazaba que pueda estar ligado a una estrategia nacional del Gobierno y el PSOE de buscar la alianza con Ciudadanos ante dificultades con ERC. “Luis Tudanca tiene el apoyo de PSOE de Castilla y León” para presentar la moción, decía, mientras apuntaba a “la decepción” en ámbitos de la formación naranja por prometer el cambio y no llevarlo a cabo.

Sánchez insiste en que mira a Ciudadanos para pedirle “una reflexión”, que “escuche a la calle” y que “tome decisiones rápidas”. “Está en su mano”, zanjaba.

La moción de censura presentada en Murcia llevaba negociándose más de un mes aunque se precipitó en la noche de ayer. Además, está pactado con la dirección de Inés Arrimadas, según indican fuentes de Ferraz, que apuntan que los acuerdos que firma el PSOE son con las direcciones de los partidos, pues no pactarían con tránsfugas.

Cada comunidad autónoma es una historia distinta, señalan fuentes socialistas, que aluden como motivos de la moción a la crisis de las vacunas en Murcia, que provocó la dimisión del consejero de Salud por haberse vacunado antes de tiempo, o la polémica en el Ayuntamiento de Murcia, donde el teniente de alcalde, de Ciudadanos, denunció contratos irregulares.

También descartan que haya un acuerdo global con Ciudadanos que facilite mociones de censura en otros territorios donde los naranjas gobiernan junto al PP y dependen de los votos de Vox, como Madrid, Andalucía o Castilla y León.