Gerardo Dueñas apuesta por favorecer “mucho más” la producción nacional y la economía de proximidad frente a las importaciones

El consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Gerardo Dueñas, reiteró, en Salamanca, su apuesta por favorecer “mucho más” la producción nacional y la economía de proximidad frente a las importaciones que, según matizó, “desmontan mucha de la capacidad de gestión que tiene España”. Es una de las peticiones que Dueñas le hizo a San Isidro en la celebración adelantada del patrón de los agricultores que tuvo lugar en la iglesia de San Esteban de Salamanca.

En este sentido, afirmó que la relación entre el productor, el industrial y el distribuidor debe ser “mucho más cercana”. La otra petición que tuvo para el patrón estuvo referida a la percepción que tiene el sector entre la ciudadanía. “Le pido que el el resto de la sociedad valore lo que la agricultura y la ganadería hacen, no solo como productores de alimentos, sino también en su faceta de mantenimiento del medio rural y conservación del medio ambiente”, resumió a la puerta de la iglesia ante los medios de comunicación.

Además, Gerardo Dueñas rechazó desvelar las principales medidas que tiene previsto implementar en su recién estrenada Consejería. Unos datos que reservó para su comparecencia en las Cortes de la próxima semana, cuando prefiere desgranar su programa de Gobierno para los próximo cuatro años. Sí afirmó, por otro lado, que “la próxima semana” podría estar completo su equipo con la última designación de las direcciones generales, la de Producción Agrícola y Ganadera, para la que barajan “dos o tres candidatos” en una situación que, según comentó, “está siendo compleja”, informa Ical.

Un dirección general destacada, según Dueñas, especialmente en la provincia de Salamanca, puesto que la sanidad animal es “un aspecto clave” que tiene previsto comenzar a desarrollar “desde el primer día”. “No tenemos que centrar todos los actores que participamos, administraciones, veterinarios y ganaderos y pensar que lo importante, a corto plazo, es controlar, no erradicar”, valoró.

En este sentido, reconoció que piensa modificar “un poco” la política de la anterior Consejería, puesto que, desde su punto de vista, “la prevalencia cero en todas las provincias es imposible”. “Y más ahora que ya hay informes científicos que están diciendo que las especies de la fauna silvestre también están influyendo de manera negativa en ese control”, apostilló. Su idea es sentarse, analizar lo que falla e intentar bajar los índices de prevalencia, frente a seguir una política de erradicación. “Al final es lo que marca Bruselas, que es quien dice que hay que ser oficialmente indemne a las enfermedades sanitarias y eso es una presión que, para algunas provincias, es inviable”, advirtió.

Otra de las cuestiones que tratará de abordar dicha dirección general será la de agilizar lo trámites. “Es de las que más hay que fomentar porque nuestra idea es que el agricultor y ganadero esté mucho mejor asesorado que hoy y, antes de sancionar, asesorar, y simplificar mucha de la burocracia que está haciendo perder mucho tiempo en solicitar ayudas y hacer papeles en la Administración. A ver si somos capaces de digitalizar esas cosas”, concluyó.

Peticiones de Asaja

Por su parte, Asaja Castilla y León pidió a San Isidro, patrón del campo cuya festividad se celebra el domingo, producción y precios que compensen la inversión realizada para la próxima cosecha. “Una lluvia generosa estos días de mayo, y también otro golpe de agua en junio, junto con temperaturas suaves y sin heladas, y con cierto control de las plagas, aportarían las condiciones ideales para cuajar una buena cosecha, tan necesaria para un sector endeudado por los desorbitados gastos de la sementera, como para toda la sociedad, cuando hay problemas de abastecimiento en todo el mundo”, señaló el presidente de la formación, Donaciano Dujo.

Recapitulando el año agrícola, ASAJA recuerda que las siembras se realizaron en bastantes buenas condiciones, aunque desde el invierno, que no trajo nieve, se ha arrastrado un periodo seco solo roto por las lluvias de marzo y de abril. “El agua ha llegado tarde para el regadío, porque no se recargaron a su tiempo acuíferos y pantanos, pero sí ha alimentado al secano y también ha favorecido las siembras de primavera, que este año serán mayores que nunca por la posibilidad abierta por la Unión Europea de sembrar en barbecho. Ahora todo queda pendiente de lo que ocurra en el mes y medio que falta hasta la cosecha: “El agua que caiga a partir de ahora determinará unas producciones mediocres o buenas”, señala.

Para ASAJA, “tanto o más importante son este año las toneladas que cosechemos como los precios que se paguen por la producción, que tienen que compensar los enormes costes que estamos soportando en un periodo de inflación sin precedentes, especialmente en fertilizantes, gasóleo y energía. Por eso este año la petición a San Isidro tiene que ser doble: cosecha y precio, si no vamos a la ruina”.

También preocupa la situación de los agricultores de regadío, con una campaña que ha comenzado ya mermada por las bajas reservas de los pantanos en varios sistemas de riego, y, en el caso de tener agua, por el desmesurado precio de la energía necesaria para impulsarla. Un hecho que para ASAJA confirma la “necesidad extrema que tiene Castilla y León de contar con un regadío potente y modernizado, una región con más disponibilidad de agua que otras del país y sin embargo con un menor porcentaje de tierras en regadío”.