Denuncian a una empresa en Valladolid por provocar fuertes olores tras realizar un vertido ilegal

La Guardia Civil ha denunciado a una empresa por provocar fuertes olores en Valladolid, en concreto en la zona de la avenida de Santander y del barrio de La Rondilla, debido a un vertido que superó los límites establecidos, según informan fuentes de la Benemérita.

Los hechos se remontan al pasado 6 septiembre, día en el que se recibieron numerosas llamadas de ciudadanos de Valladolid alarmados por un fuerte mal olor en los barrios de La Rondilla y las cercanías del Cementerio del Carmen.

Esta situación obligó a movilizar a las patrullas de la Guardia Civil, Policía Local y Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Valladolid, así como a técnicos de la empresa pública que se encarga del ciclo del agua, Aquavall, para esclarecer el origen de los fuertes olores que causaron alarma en la población.

En los días siguientes al incidente, el trabajo conjunto de la Guardia Civil y Aquavall permitió determinar el origen del vertido al alcantarillado público, que resultó ser la causa de los olores. Además, se plantearon medidas de mitigación que tienen como objetivo evitar futuras incidencias de este tipo y resolver el problema de forma definitiva.

Una vez inspeccionada la empresa emisora y con los informes recibidos de vertido realizados por parte de la empresa de agua, así como el cotejo de las autorizaciones ambientales concedidas por parte del Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, se comprobó que el día 6 de septiembre se produjo un vertido por parte de la empresa, el cual superaba los límites que tiene autorizados, provocando los fuertes olores que se produjeron tanto en el entorno del Cementerio del Carmen como a la salida de los colectores en el barrio de La Rondilla de Valladolid, debido a que la red de saneamiento discurre entubada desde la Avda. Santander, atravesando el barrio de La Rondilla hasta su finalización en la Estación Depuradora de Aguas Residuales, para su tratamiento.

Los hechos fueron puestos en conocimiento de la Consejería de Medio Ambiente de la Junta, así como del Ayuntamiento de Valladolid, al haberse incumplido las autorizaciones de vertido a las aguas de saneamiento de los colectores municipales.