Sucesos
Un hombre de 95 años, trasladado al Hospital tras inhalar humo en un incendio en la cocina de su vivienda en Aranda de Duero (Burgos)
La rápida actuación de los bomberos evitan males mayores
Un hombre de 95 años tuvo que se atendido y trasladado al Hospital, tras inhalar humo del incendio en la cocina en su vivienda. El suceso tuvo lugar a las 00.39 horas de la madrugada de este jueves 10 de julio en la calle Hospicio de la localidad burgalesa de Aranda de Duero.
Según fuentes municipales, A las 00:39 horas, la sala de operaciones del 1-1-2 Castilla y León recibía varias llamadas alertando de un incendio en una vivienda del número 33 de la calle del Hospicio, en Aranda de Duero. De inmediato, se activaron los protocolos de emergencia, dando aviso a los Bomberos de la localidad, a la Policía Local, y al Cuerpo Nacional de Policía.
En ese momento, la dotación de bomberos de guardia se encontraba interviniendo en otra emergencia en la localidad de Gumiel del Izán. Gracias a la disponibilidad del servicio de retén, que salió de inmediato hacia el lugar del incendio, se pudo iniciar la intervención sin demora, “lo que demuestra la importancia de tener un servicio de retén”, aseguraron las mismas fuentes.
A su llegada, los efectivos del retén realizaron un rápido despliegue y tendido de mangueras hasta la vivienda afectada. Tras forzar la puerta para acceder, centraron su actuación en el rescate del único ocupante de la vivienda: un varón de 95 años que no podía salir por sus propios medios y que fue localizado en el suelo del baño. Gracias a su profesionalidad y determinación, los bomberos lograron rescatarlo con vida y entregarlo al personal sanitario, que procedió a su traslado al hospital tras ser atendido en el lugar por intoxicación por humo.
Al momento, llegaron al inmueble la dotación que se encontraba en Gumiel del Izán y el jefe del servicio, completando la extinción total del fuego, cuyo foco se localizaba en el salón. Tras la extinción, se revisaron todas las viviendas del bloque junto a sus inquilinos, sin que se detectase ninguna anomalía en la calidad del aire.
Esta intervención vuelve a subrayar la trascendencia del servicio de retén, que volvió a funcionar hace justo un año, en agosto de 2024, tras varios años sin prestarse y que hace solo unas semanas renovó su acuerdo entre los Bomberos de Aranda de Duero y el Ayuntamiento. Su reactivación ha resultado clave en numerosas actuaciones, como la de esta madrugada, en la que gracias a la rapidez y coordinación de los bomberos de retén, se ha salvado la vida de un vecino arandino.