Policía Nacional

La Policía Nacional exige una rectificación a la Generalitat por el retraso de su vacunación

El secretario de Salud de la Generalitat dijo que “me importa un rábano si se vacuna a un mosso o a un guardia civil”

El secretario de Salud Pública, Josep María Argimon, durante una rueda de prensa. EFE/Quique García
El secretario de Salud Pública, Josep María Argimon, durante una rueda de prensa. EFE/Quique GarcíaQuique GarcíaAgencia EFE

La polémica con los retrasos en el inicio de las vacunas a los agentes de la Policía Nacional y Guardia Civil destinados a Cataluña sigue levantando mucha polvareda. Fue el secretario de Salud Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, quien lo admitió la pasada semana, y sus declaraciones de ayer martes no contribuyeron a mejorar las relaciones con ambos cuerpos.

Concretamente, defendió que no discriminan a nadie en el proceso de vacunación de la covid-19, después de que el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) haya comunicado la obligación de reanudar la administración de dosis a policías nacionales y guardias civiles.

“Me da igual si es un Mosso o un Guardia Civil. Me importa una rábano”, dijo en rueda de prensa, después de que el TSJC diera un plazo máximo de 10 días al Govern para reanudar dicha vacunación.

Argimon tachó de “ridícula” la decisión del tribunal de alcanzar la misma proporción de agentes vacunados que en el cuerpo de Mossos d’Esquadra entre los policías nacionales y guardias civiles y, aunque aseguró que cumplirán con la orden judicial, lamentó que tendrán que atrasar la vacunación de algunas personas de 70 años.

La respuesta del principal sindicato de la Policía Nacional, el SUP, no se hizo esperar y llegó ayer. Reza que “vamos a seguir denunciando las continuas agresiones verbales que sufren los policías destinados en la comunidad autónoma de Cataluña por parte de algunos de sus dirigentes políticos. No vamos a tolerar el último disparate de la Generalitat intentando crear un enfrentamiento ficticio por las vacunas entre policías y el resto de ciudadanos para encubrir la nefasta gestión que llevan a cabo. Ya basta de jugar con la salud de policías y ciudadanos para sacar rédito político”.

Denuncian que “el alto cargo de la administración catalana llega a decir que cumpliremos, pero para ello retrasaremos la vacunación de gente de 70 años, ahí lo dejo´´. Se trata sin duda de unas manifestaciones gravísimas que ponen por enésima vez a los policías y guardias civiles en el punto de mira”.

Siguen denunciando que “tales manifestaciones cargadas de sectarismo parecen más bien encaminadas a encubrir la nefasta campaña de vacunación que lleva a cabo el gobierno catalán discriminando a policías y guardias civiles. En Cataluña, mientras se ha vacunado prácticamente a la totalidad de policías locales y autonómicos, como personal de emergencias o bomberos, no ha ocurrido lo mismo con los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La vacunación de policías y guardias civiles no alcanza al 10% de las plantillas. Todos son parte de los servicios esenciales que trabajan para garantizar el bienestar y la seguridad de los catalanes y sin embargo el Gobierno catalán al discriminar sistemáticamente a los cuerpos de seguridad estatales perjudica por extensión al resto de la sociedad para la que trabajan esos policías. A cualquiera, menos a este señor, no se le escapa que poniendo en peligro la salud de los policías y guardias, se pone en peligro la salud de todos los ciudadanos. ¿Por qué la Sanidad catalana vacuna a unos sí y a otros no? ¿cómo se explican las diferencias en el trato a policías y guardias frente a las demás comunidades autónomas?”.

E insisten en que “tanto ahínco en discriminar a los policías y guardias civiles en materia de vacunación sólo pueden obedecer a criterios políticos que jamás deberían prevalecer frente a la salud. Es vergonzoso el uso político que desde altas instancias del Gobierno catalán se está haciendo con el proceso de vacunación, por mucho que algunos no quieran entenderlo la Policía y la Guardia Civil trabajan para todos los ciudadanos del Estado incluida la comunidad autónoma de Cataluña como parte de dicho Estado.

“Desde el SUP exigimos que el señor Argimon y otros se retracten de inmediato de sus declaraciones y deje de fomentar un enfrentamiento ficticio entre policías y el resto de la sociedad usando como excusa el proceso de vacunación. Es más, exigiremos responsabilidades a todos aquellos que con su actitud cerril y obcecada no han dudado en poner en peligro la salud y la vida de los demás con tal de alcanzar sus objetivos políticos”, concluyen.