Informe de la Generalitat
El Govern intervendrá en la tutela familiar de agresores sexuales
Un informe de la Generalitat, sin embargo concluye que las agresiones entre menores generan alarma pero son minoritarias
A raíz del alarmante aumento de denuncias de agresiones sexuales entre menores de edad –diversos ocurridos en Badalona–, la Generalitat juntó a un grupo de expertos para que analizaran este fenómeno. Ayer, el conseller de Derechos Sociales, Carles Campuzano, junto con representantes del grupo, presentó el informe final y anunció las actuaciones que se pondrán en marcha para combatir este tipo de violencia. Entre estas, destaca el despliegue territorial que harán del Servicio de Atención a Menores Inimputables y el plan para reparar daños, que de no funcionar, anunció que el Govern empezará a tomar medidas sobre la tutela de estos menores.
El informe, realizado por expertos de varios departamentos –Derechos Sociales, Justicia, Interior, Educación, e Igualdad y Feminismos–, busca «contribuir a la comprensión de la situación actual de estas violencias». A pesar de que el estudio estuvo motivado por el auge de agresiones entre menores (con implicados de incluso menos de 14 años), el informe concluye que las víctimas de violencia sexual entre estos son «minoritarias». Campuzano expresó que el Govern «quiere evitar generar alarmismo» y aseguró que es un fenómeno «acotado que está siendo abordado».
El coordinador del grupo de expertos, Eduard Vallory, insistió en que es «inmensamente mayor» el grosor de casos de agresiones perpetradas por mayores de edad. Además, la mayoría son hombres cercanos a estas menores. «Las víctimas están en peligro por las personas que precisamente no generan alarma social», advirtió Vallory.
El documento también analiza los factores que alimentan estas actitudes en jóvenes, que el grupo concluye en cuatro: las características cambiantes en la adolescencia, la falta de acompañamiento comunitario de niños y adolescentes, el marco cultural que normaliza la dominación de hombres hacia mujeres, y el impacto de la digitalización y la exposición a la pornografía.
Una de las principales realidades que buscan combatir es «la sensación de impunidad que hay entre los agresores», que Campuzano aseguró que esta «sí que genera alarmismo». Aun así, tanto el grupo como la conselleria coinciden en que rebajar la edad penal «es una pésima propuesta que no repararía ningún daño».
Ante este diagnóstico de los expertos, el Govern impulsará 21 acciones de prevención, atención, investigación y reparación –algunas ya están en marcha–, entre las que figura una revisión, refuerzo y despliegue territorial del Servicio de Atención a Menores Inimputables. Este hará especial énfasis en las acciones sobre responsabilidad, restauración y reparación del daño cometido a las familias con un plan individualizado para cada agresor y su entorno familiar.
Otras de las medidas son el despliegue de la estrategia Barnahus de atención a las víctimas menores de agresión sexual, refuerzo de la atención policial especializada en casos de violencia sobre menores o un nuevo modelo de educación sexual integral en los centros en el curso 2024-2025, que impulsará un servicio de intervención especializada en violencias digitales.
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