Entrevista

"Hay una necesidad social de familias que se plantean adoptar a niños con necesidades especiales"

Emilio Mercader, Educador social Servicio de Adopciones Fundación Ires

Emilio Mercader
"Hay una necesidad social de familias que adopten a niños con necesidades especiales"La Razón

El Servicio de Adopción de Niños con Necesidades Especiales de la Fundación IRES estudia, forma y realiza un seguimiento a las familias que quieren adoptar a un menor con esta condición con el objetivo de asegurar que el niño está en un entorno que garantiza su desarrollo físico, psíquico y emocional.

¿Cuántos niños con alguna potencial discapacidad hay en adopción en Cataluña?

El año pasado se hicieron unas 60 adopciones en Cataluña en total, las cuales han bajado mucho en los últimos años, puesto que hay mecanismos para poder ser padres sin necesidad de adoptar y, paralelamente, ha subido de manera significativa la necesidad de las acogidas. De estas 60 adopciones, diez fueron de niños con necesidades especiales, de las cuales solo 5 fueron de menores con discapacidad. Lo cierto es que hay pocos niños con discapacidad para adoptar, pero hay menos familias para adoptarlos y no se llega a cubrir la necesidad de adopciones. Sigue habiendo niños con necesidades especiales que esperan ser adoptados cuando hay lista de espera para adoptar a niños sin esas necesidades y de hecho a día de hoy se están evaluando a aquellas familias que presentaron la solicitud de adopción hace cinco años. En cifras, en Cataluña se gestionaron 434 solicitudes de adopción y solo 22 (5,07%) fueron de niños con necesidades especiales.

¿Los requisitos para su adopción son los mismos que los de los niños sin discapacidad?

En cuanto al proceso administrativo y jurídico, es el mismo, pero las familias que adoptan a niños con necesidades especiales deben estar especialmente preparadas para asumir esa dificultad. Es importante que estas tengan bien ajustadas las expectativas, porque va a haber dificultades. Pedimos que tengan una sensibilidad y una manera de enfrentarse a la discapacidad diferente y en el proceso han de prepararse en cuanto a sus capacidades y habilidades y en cuanto al deseo, han de venir con ese trabajo hecho. No puede ser que una familia opte por adoptar a un niño con necesidades especiales porque es más accesible y más rápido. Además, nosotros también hacemos formación a estas familias, durante la cual ya hay un 40% de las mismas que van a abandonar el proceso porque entran en contacto con la realidad. Posteriormente, nosotros también estudiamos si estas familias están realmente preparadas o tienen ganas de hacer esto. Es un sistema garantista porque intentamos que ese niño no vuelva a pasar un trauma por un fracaso en la adopción.

¿De qué perfil de niño estamos hablando concretamente?

Es muy variable. En algunos casos se trata de niños de 7 años o más, en otros, menores con discapacidad física grave o psíquica, también pueden ser niños con alguna enfermedad crónica compleja y la adopción de hermanos también se considera una adopción especial. Las familias pueden elegir ese perfil en función de donde ellas se vean, pero en la fundación eso lo vamos moviendo según como veamos a esa familia. En cualquier caso, las adopciones de niños mayores son las más complejas, más incluso que la de los niños con discapacidad, porque son los que traen más mochilas. Un niño de 7 años no está esperando a una familia para tirarse a sus brazos. De hecho, hay poquísimas adopciones de estas características, concretamente el año pasado de las 60 que se llevaron a cabo, solo dos fueron de mayores de 7 años, pero es cierto que las familias suelen tender a explorar esta alternativa porque intentan evitar la discapacidad. En cuanto al perfil de niño con discapacidad en adopción, los hay con muy diferentes grados de discapacidad y en muchos casos existe incertidumbre acerca del grado de la misma y no hay claridad de hacia dónde va a ir.

¿Qué características comunes tienen las familias que adoptan a un niño con discapacidad?

Cada familia es un mundo, pero por lo general son familias con una gran motivación centrada en las necesidades del niño y no en las del adulto. Son familias muy dispuestas a pedir ayuda y estar en red con todos los servicios para atender a la discapacidad, así como con mucha fortaleza y equilibrio personal, lo cual lo hace más fácil.

¿Cuál suele ser su principal motivación para hacerlo?

Muchas veces en la necesidad especial, cuando hay discapacidad, no suelen ser familias que buscan su primer hijo, sino que ya tienen hijos biológicos o adoptados previamente y no solo buscan ver cumplido su deseo de ser padres, sino que quieren dar respuesta a un niño que no tiene familia del que pueden ocuparse. Hay un punto como de mayor entrega.

¿Por qué es tan necesaria la adopción de estos niños?

En este sentido hay un plus respecto a los niños en adopción sin necesidades especiales y es que es muy difícil encontrarles una familia. Son niños que, de no ser adoptados, van a quedarse en centros durante toda su infancia.

Realmente, ¿es un verdadero reto encontrarles esa familia?

Mientras que existe lista de espera para adoptar, habrá niños con necesidades especiales que se quedan sin familia. Así animamos a las familias con expectativas bien ajustadas, bien trabajadas, tanto por ellas mismas como por la formación que reciben, a adoptar a uno de estos niños, porque no va a ser un calvario. Durante el proceso de formación o estudio, la familia puede abandonar pero si tiene ese sello especial, le animamos a dar ese salto. Muchas veces, estas familias son muy religiosas y pese a que la fe es un valor que acompaña en la dificultad, por sí sola no sostiene esto, lo sostiene el trabajarse y dotarse de recursos para manejar la situación. En cualquier caso, hay una necesidad social de familias que se están planteando la adopción de niños con necesidades especiales.