Polémica

Els Bous a la Mar: Así es la fiesta taurina de Denia donde caen los toros al agua y que ha generado numerosas críticas

La vuelta de una de las celebraciones más conocidas de la ciudad alicantina ha generado una gran polémica

Varios jóvenes saltan al agua en la localidad alicantina de Denia, donde se celebran los tradicionles "Bous a la mar" .
Varios jóvenes saltan al agua en la localidad alicantina de Denia, donde se celebran los tradicionles "Bous a la mar" .Natxo FrancesAgencia EFE

Els Bous a la Mar (Toros al mar) es una celebración que tiene lugar durante las Fiestas de la Santísima Sangre de Denia, que es la semana de las fiestas patronales del municipio. Se celebra a principios de julio, y este año, comenzó el sábado 9 y terminó el domingo 17.

Durante los nueve días, este festejo se realiza hasta dos veces por día, a mediodía y por la tarde (excepto los sábados, que solo se hace una sesión). El recinto tiene lugar en una plaza semicircular en el puerto de Denia, instalado adrede para la ocasión. El propio agua de la zona sirve de refugio para aquellos que huyan de los toros que recorren la arena, pero también estos animales acaban cayendo al mar. De ahí, su nombre.

Se trata de una de las celebraciones más antiguas de las que se conservan a día de hoy en la ciudad alicantina, y reúne a cientos de personas. Además, desde 1993, es Fiesta de Interés Turístico Nacional. Desde sus inicios en el siglo pasado, ha cambiado poco su esencia.

Prácticamente, se trata de un espectáculo taurino en el que los participantes tienen como objetivo conseguir que el toro caiga al agua, pero sin empujarlo. Los toros y vacas que son llevados a los encierros son metidos en camiones, y llevados hasta el lugar donde comienza la celebración. Una vez allí, los sacan del vehículo, tiene lugar el encierro y son acompañados por una multitud de personas, que corren delante y detrás de ellos, hasta llegar al lugar preparado en el Puerto de Denia.

Ya en en reciento, las personas desplazadas hasta allí persiguen a los animales y los tientan para que caigan al agua. Como la plaza está abierta al mar, los animales siempre acaban cayendo.

El agua no es su medio natural, y aunque saben nadar, hacen lo que pueden para salir de ahí e intentan desesperadamente encontrar un lugar de apoyo. Pero lo único que logran es una embarcación que los recoge, y para remolcarlos hasta tierra, los atan de una cuerda. Por otro lado, al igual que puede suceder en otras celebraciones donde tienen al toro como protagonista, varias personas resultaron heridas.

Lo habitual es que no mueran, pero sí es verdad que después de las fiestas, regresan de nuevo a las ganaderías donde pertenecían para ser llevados a otras festividades.

Críticas

Desde antes de su vuelta, ya había generado fuertes críticas. Un día antes del comienzo de la celebración un grupo de personas de entidades animalistas se concentraron para protestar por el espectáculo.

Así, con pancartas, pedían la abolición de estas fiestas y un referéndum sobre la prohibición de los festejos taurinos. Una manifestación que se fue repitiendo a lo largo de los días en los que tuvo lugar los festejos.