Historia

¿Sabes en qué ciudad española se abrió el primer manicomio del mundo?

En el año 1545 sufrió un incendio en el que fallecieron 30 internos

Imagen de la Biblioteca pública de Valencia
Imagen de la Biblioteca pública de ValenciaLa RazónLa Razón

A los típicos lugares que visitar en la ciudad de Valencia se podrían añadir otros menos llamativos pero, no por ello, con menor interés, al contrario. Sería el caso de la actual Biblioteca Pública valenciana, situada en la calle Hospital, una vía que recibe este nombre precisamente porque en las instalaciones de este recinto cultural se creó el primer manicomio del mundo.

El centro sanitario se creó en el año 1410 de la mano del fraile valenciano Joan Gilabert Jofré. Según cuenta la historia, el 24 de febrero de 1409, el religioso se dirigía a la Catedral de Valencia para realizar el sermón del domingo de Cuaresma, cuando de camino se encontró a unos niños que apedreaban y atacaban a unos pobres locos.

El fraile salió en defensa de los dementes y al llegar a la Catedral realizó un sermón en favor de los dementes y furiosos que vagaban por la ciudad y no tenían asistencia alguna. De ahí, que el fraile propusiera la creación de un centro donde darles alojamiento y cuidados médicos, y tuvo éxito: El primer manicomio u hospital psiquiátrico del mundo abrió sus puertas en Valencia el 1 de junio de 1410.

Cabe decir que en la época medieval el concepto de hospital era distinto a como lo entendemos en la actualidad. El nombre de hospital proviene del latín «hospitalem» que, en realidad, quiere decir albergue. Por tanto, el hospital debía de ser una institución o casa encargada no sólo al cuidado médico sino también dedicada a acoger personas sin recursos, niños huérfanos, peregrinos y naturalmente enfermos, de cualquier índole.

El cuidado no se limitaba al aspecto médico, se dedicaba especial dedicación al sustento tanto espiritual como material. Es por eso que los hospitales eran fundaciones mayoritariamente religiosas y posteriormente de carácter civil y benéfico, y prueba de ello es que podemos encontrar diversos textos donde se recogen que los primeros enfermos mentales atendidos (solamente ellos y no personal civil) eran religiosos en propios hospitales de carácter y exclusividad religiosa, como así se hace constar en Barcelona, a principios del siglo XV.

A lo largo de la historia, el centro sufrió, entre otras cosas, un incendió, como el de 1545, donde se destruyó casi todo el hospital y en el que consta el fallecimiento de 30 internos. Poco después fue reemplazado por un nuevo hospital, contando con un departamento especial para niños.

Cabe señalar que el modelo revolucionario del Hospital de los Pobres Inocentes de Valencia fue copiado muy pronto en otros lugares de España y en colonias americanas: el Hospital de la Santa Cruz de Barcelona empezó a acoger dementes que no eran sacerdotes a partir de 1412; en 1425 se fundó el Hospital de Nuestra Señora de Gracia, en Zaragoza; en 1436, el Hospital de los Inocentes de Sevilla; en 1489, el de Valladolid; en 1456, el de Palma de Mallorca, dentro del Hospital General; en 1480, el Hospital de los Inocentes, en Toledo; en 1527, el Hospital Real de Granada empezó a acoger enfermos mentales; en 1566, el Hospital de Madrid; en 1567 fray Bernardino Álvarez fundó el San Hipólito en México, y así podríamos seguir con un largo etcétera.

Los manicomios empezaron a desaparecer en Europa durante las décadas de 1960 y 1970. La aparición, o mejor dicho consideración, de las unidades de salud mental en las cuales se equiparaba a los enfermos mentales con personas enfermas de cualquier patología, hizo que los centros o manicomios tuvieran los días contados. En España fue a raíz de la llamada “Ley General de Sanidad”, que fue aprobada en 1986 y que por desgracia llevo al cierre, en 1989, al que fue considerado como el primer manicomio del mundo.

De aquel edifico, en Valencia, hoy solo quedan la portada y una de las dos enfermerías, además de otros restos esparcidos junto al jardín anexo, que fue considerado el mejor del mundo en 2015 -también existen otros restos en el tramo 7 del Jardín del Turia-. Actualmente es la Biblioteca Pública Provincial y se encuentra en la calle Hospital, 13.