Dos años del triunfo del PP

Mazón, en el ecuador de una legislatura que nadie pudo imaginar

El presidente Mazón logrará este miércoles el apoyo de Vox para sacar adelante los presupuestos de 2025 con el objetivo de abrir una nueva etapa tras la dana

El presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón
El presidente de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón Agencia EFE

El 28 de mayo de 2023 la Comunitat Valenciana volvía a teñirse de azul PP. Carlos Mazón ganaba las elecciones a la Generalitat. Los populares recuperaban además ayuntamientos de capitales determinantes como Valencia, Castellón o Elche recabando los votos suficientes para lograr presidir también las tres Diputaciones. Hoy se cumplen dos años de aquella noche en la que todo parecía indicar que los populares iniciaban un largo ciclo que comenzaba con el apoyo de Vox, pero que les permitiría crecer para aumentar su mayoría en las elecciones de 2027.

Cuando se cumplía el primer año de la investidura de Mazón, el presidente de Vox, Santiago Abascal, rompía los pactos en todas las autonomías y dejaba al PP gobernando en solitario. Mazón, que había sido el primero de los presidentes autonómicos en cerrar un pacto con Vox- cuestión que todavía algunos dentro de su propio partido critican- remodeló su Consell en menos de 24 horas iniciando, en cierto modo, una segunda legislatura.

Comenzó así un periodo de negociación con Vox, pero en el que el PP se propuso buscar el acuerdo con quien hiciese falta.

Con todo, los de Abascal no podrían frenar las prioridades de Mazón: la rebaja de impuestos y todo lo referente a la «libertad educativa», pues había sido Vox quien le había dado sus votos para ejecutar esas reformas.

El mayor de los problemas el 28 de octubre del Gobierno de Mazón era tener que enfrentarse a una prórroga de los presupuestos. Al final y al cabo, mientras el Gobierno de Pedro Sánchez siguiese sin aprobar sus cuentas cualquier crítica que viniese motivada desde la izquierda por este motivo quedaría deslegitimada. Además, como reiteraban desde el Consell, cumplirían con su obligación de presentarlos.

Vox dará hoy sus votos al PP para lanzar el mayor salvavidas que nadie pueda dar al jefe del Consell en la que es ya, en sentido figurado, su tercera legislatura, la que empezó el 29 de octubre cuando una dana asoló la provincia de Valencia dejando a su paso una devastación nunca imaginada.

Desde entonces, el presidente trata de mantener la esencia de ese Mazón enérgico, que impulsa reformas fiscales y sociales que alcancen a una mayoría social, pero lo hace con el lastre de la gestión de aquel día de la dana en el murieron 228 personas. Así tratará de exponerlo en el balance que se presentará en los próximos días.

Siete meses después de la riada, Mazón sigue siendo el centro de todas las críticas. Todas ellas se apoyan en los autos de una jueza instructora que sigue afirmando auto tras auto que la Generalitat valenciana era la que tenía la competencia en la emergencia.

Las hipótesis sobre su inminente salida del Consell van perdiendo valor, aunque ahora todas se apuntan en un horizonte claro: el congreso que el PP celebrará el julio. Es la última fecha a la que se hace referencia para que Alberto Núñez Feijóo, que mantiene en público que el futuro de Mazón está ligado al éxito de la reconstrucción, mueva ficha. De momento, no hay congresos autonómicos en el horizonte, ni tampoco un recambio que Vox pueda aceptar para que empiece una «cuarta legislatura».