La CEV afirma que la economía regional podría cerrar el año con un avance global en torno al 2,5 % tras la contracción de la actividad en el cuarto trimestre en un 1,6 % por los efectos de la dana, y advierte de que la velocidad e intensidad de la recuperación dependerán del nivel de apoyo directo a las empresas y negocios y del avance en la recuperación de las infraestructuras.

Las consecuencias de las inundaciones van a lastrar los niveles de crecimiento de la economía de la Comunitat Valenciana, que en el tercer trimestre ha crecido a una velocidad del 3,9 % en tasa anualizada, lo que según la patronal autonómica es un avance superior al esperado y un repunte con respecto a la evolución del trimestre anterior.

Pero la repercusión real de la dana en el cuarto trimestre va a detraer más de dos puntos al crecimiento interanual, que tras la revisión a la baja se aproximaría al 1,2 %, y en tasa trimestral la actividad podría contraerse hasta en un 1,6 %.

De confirmarse estos extremos, y teniendo en cuenta el dinamismo que estaba mostrando la actividad económica hasta finales del mes de octubre, la economía regional podría cerrar el año con un avance global en torno al 2,5 %, según la CEV.

De cara a los siguientes trimestres, en un escenario de recuperación progresiva, en el que se incluyen la recuperación de la movilidad, así como los efectos de las ayudas directas al tejido productivo y a los ciudadanos afectados, la economía de la Comunitat podría crecer en 2025 en el entorno del 2,3 %.

Sin embargo, no será homogéneo entre los sectores y sus ramas productivas: será más lenta en el sector agrícola (cinco años para la plena producción de los árboles arrancados); heterogénea en la industria (el metal no prevé recuperar los niveles previos hasta mediados de 2026); más rápida en servicios, aunque desigual entre sus ramas y con distinto alcance; y más activa en la construcción por el proceso de reconstrucción.

La CEV apela a las distintas Administraciones para que mejoren la coordinación en la reconstrucción y eleven los montos de las ayudas directas para las empresas y autónomos, que deberán ser más intensas en su cuantía y ágiles en su gestión, y dirigirse de forma selectiva a las ramas más afectadas.

En la misma línea, también se apela al Consorcio de Compensación de Seguros para que acelere los pagos pendientes, facilitando así la disponibilidad inmediata de recursos esenciales para las empresas y los autónomos afectados.