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Cine

Polémica

¿Qué hay tras las acusaciones de canibalismo y vampirismo a Armie Hammer?

En los últimos días, son varias las voces que han acusado al actor de “Call Me By Your Name” de mantener una actitud abusiva y desatar un supuesto fetichismo caníbal en Instagram

Armie Hammer ha sido acusado por un grupo de mujeres de tener comportamientos abusivos y de hacer explícito su "fetichismo caníbal"
Armie Hammer ha sido acusado por un grupo de mujeres de tener comportamientos abusivos y de hacer explícito su "fetichismo caníbal"La Razón

En estrambótica metáfora, todo comenzó como una nevada de calendario nuevo. Unos pequeños e inofensivos copos, en forma de capturas de mensajes privados en la red social Instagram, situaban a Armie Hammer, el que fuera protagonista de la celebrada “Call Me By Your Name”, manteniendo conversaciones de carácter sexual. Hammer está legalmente soltero desde el año pasado y las mujeres con las que hablaba parecían entregar su consentimiento de manera explícita, pero las supuestas revelaciones no habían hecho más que comenzar. En principio, no habría nada punible más allá de los ojos de la pura castidad, ya que aprovecharse de la fama todavía no es delito y todos los involucrados dejaron atrás la mayoría de edad hace mucho tiempo.

La nevada, que se hizo copiosa durante el fin de semana, parecía demostrar una truculenta evidencia: según las imágenes, que todavía están sin verificar ya que entrañaría la revelación de datos personales a los que Instagram no puede acceder, el actor que ha sonado para ponerse en la piel de Batman o James Bond habría desatado su fetichismo caníbal, insistiendo en su deseo de “beber la sangre”, “devorar” y mantener relaciones sexuales con las entrañas de las destinatarias de sus mensajes. De hecho, algunas de las supuestas conversaciones privadas que habría mantenido el actor con sus diferentes amantes, un grupo de acólitas que habría llegado a tatuarse la muñeca izquierda para demostrar su sumisión, alcanzan nuevas cotas en lo que podríamos considerar como vampirismo explícito. “Soy 100% caníbal, quiero comerte. Joder, da miedo admitirlo” se puede leer en las imágenes que ha compartido la usuaria Houseofeffie.

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Las acusaciones vertidas sobre Hammer, más allá del obvio morbo por tratarse de una figura pública, vuelven a cuestionar los métodos de saneamiento de Hollywood tras el huracán #MeToo y la ocultación de determinados comportamientos no ya poco honrosos, sino ilegales, que se dan en la meca del cine. Según varias de las supuestas afectadas por el constante mensajeo de Hammer, su actitud posesiva y psicótica es conocida por cuantos han trabajado con él. No en vano, el actor protagonizó una extraña polémica hace no tanto, cuando lanzó a sus seguidores contra una redactora de Buzzfeed. Atendiendo a Hammer, la periodista Anne Helen Petersen habría escrito el artículo por envidia y “desde una perspectiva jodidamente ácida”.

Las consecuencias de la broma infinita

Lo que en principio fue recibido con algarabía y chiste en ese oscuro pozo que es Internet en 2021, se reveló como enquistado bloque de hielo durante el día de ayer, en el que Hammer, en consonancia con la productora Lionsgate, anunció su desvinculación definitiva del proyecto “Shotgun Wedding”. La película que estaba rodando junto aJennifer Lópezen República Dominicana queda así en punto muerto tras el directo y conciso comunicado del intérprete: “No pienso responder a esas acusaciones de mierda, pero debido a la naturaleza de los brutales ataques que se han proferido contra mí en Internet, no puedo abandonar a mis hijos durante cuatro meses”.

Por si fuera poco, no son pocos los usuarios que han rebuscado entre las publicaciones e intervenciones públicas de Hammer con la perspectiva de la sospecha que se cierne ahora sobre su figura. No ayuda en absoluto al fin de la “broma”, que el actor sea un enamorado confeso de la carne de cerdo y haya narrado en infinitud de ocasiones su gusto por lo sangrante y los cortes casi crudos.

El morboso “holocausto caníbal” al que se enfrenta ahora el actor solo se puede entender como la enésima bola de nieve del #MeToo y pone en jaque dos proyectos tremendamente ambiciosos que tenía por delante: a su participación en “La oferta”, película que recreará el rodaje de “El padrino”, se suma ahora la incertidumbre sobre si volverá a retomar su papel de Oliver en la secuela de la película dirigida por Luca Guadagnino que tanta fama y reconocimiento le otorgó.