Sección patrocinada por sección patrocinada

Protestas

El globo gigante “Bebé Trump” se une a la colección del Museo de Londres

El inflable de 6 metros se exhibirá como parte de la colección de protesta del museo, que asegura que no se trata de una decisión “política”

El globo gigante de un "Bebé Trump"en pañales, en Londres
El globo gigante de un "Bebé Trump"en pañales, en Londreslarazon

A pocas horas de la toma de posesión de Joe Biden, al otro lado del Atlántico un Donald Trump inflable gigante entra en la colección de un museo. Se trata de “Bebé Trump”, un dirigible de 6 metros de altura que se convirtió en un símbolo de la protesta del Reino Unido contra el presidente de EE UU, quien aparece ridículamente caricaturizado. Ahora, este globo que voló por los cielos de Londres durante la primera visita presidencial de Trump en el Reino Unido (2018), ha sido adquirido por el Museo de Londres.

El globo de helio, pagado a través de “crowdfunding”, muestra a Trump como un bebé gruñendo que usa pañal, mientras agarra un teléfono móvil. Una imagen que no solo sobrevoló los cielos londinenses, sino que también se ha visto en los franceses, argentinos, irlandeses e, incluso, estadounidenses.

Diseñado por Matt Bonner y construido por Imagine Inflatables de Leicester, el “Bebé Trump” se conservará en dicho museo, que documenta la historia de la capital británica desde la Prehistoria hasta el presente. De esta manera, se exhibirá como parte de la colección de protesta del museo, que incluye artefactos del movimiento sufragista, manifestaciones por la crisis climática y activismo por la paz.

El globo "Bebé Trump", sobrevolando California
El globo "Bebé Trump", sobrevolando CaliforniaCarlos JassoREUTERS

Los propios creadores del muñeco inflable aseguraron, explica “The Guardian”, que esperaban que sirviera como recordatorio de la lucha contra la “política de odio”. “Esperamos que el lugar del bebé en el museo sea un recordatorio de cuando Londres se enfrentó a Trump, así como incitará a quienes lo vean a examinar cómo pueden continuar la lucha contra la política del odio”, explican.

Por su parte, Sharon Ament, directora del Museo de Londres, ha querido subrayar que “por supuesto el museo no es político y no tiene ninguna opinión sobre el estado de Estados Unidos”. No obstante, sí explica que “usamos mucho el humor. Nos burlamos de los políticos. Este es un gran, literalmente, ejemplo de eso”.