Paula Hawkins: «No existen trucos para crear suspense»
La escritora británica presenta su nuevo libro «Punto ciego», un «thriller» sobre la amistad
Creada:
Última actualización:
Paula Hawkins está condenada a que le pregunten siempre por «La chica del tren», su primera incursión en la narrativa de ficción y que la convirtió en una de las escritoras más leídas en todo el mundo. Desde entonces ha vendido 27 millones de ejemplares en medio centenar de países. Ahora acaba de publicar en nuestro país, de la mano de Planeta, «Punto ciego», una novela en la que podemos constatar toda la habilidad de Hawkins para enganchar a quien se acerca a sus páginas. En este caso nos encontramos un «thriller», en el mejor estilo de la casa, con una amistad que queda dolorosamente marcada.
El universo de Hawkins queda compensando en este libro que, según explicó la autora a este diario, nace de un encargo de «Quick Reads de la organización benéfica inglesa The Reading Agency. Es una entidad benéfica que intenta ayudar a la alfabetización. Nos piden a una decena de autores una pieza muy condensada, que no pase de las 20.000 palabras. Eso es lo que he hecho, pero intentando no dejar de ser yo misma». La escritora reconoce que está entusiasmada con esta iniciativa porque «evidentemente está pensada para gente que tiene dislexia, pero para también está destinada para aquellos a los que le cuesta leer historias largas. Se usa en escuelas, en cárceles, en hospitales... Por eso este es un libro que está pensado para que se lea en un par de horas».
En «Punto ciego» nos encontramos ante un relato en el que los hombres parecen débiles y las mujeres fuertes. Paula Hawkins añade, a este respecto, que «es cierto, aunque Edie, una de las principales protagonistas de este libro, es al mismo tiempo fuerte y no fuerte. En esta historia he querido que las mujeres sean ambiguas moralmente. Sí, es cierto que los hombres son débiles mientras que las mujeres son decididas, como es el caso de Lara, otra de las protagonistas. No hay gente buena en esta novela porque todos tienen un lado más oscuro».
El hecho de tener que limitarse a menos páginas no ha hecho que Hawkins deje de desplegar sus habilidades para crear suspense. ¿Hay alguna fórmula para saber cómo atrapar al lector, para saber crear suspense? La novelista lo tiene claro porque «no existe un truco para crear suspense. Todos los libros son diferentes. Todo viene de ese clima, de esa atmósfera, que te viene de un lugar en el que se desarrolla la historia. En este caso me lo ha dado una casa con acantilado donde tú no tienes la luz, pero sí los de dentro. Es algo que puede pasar en una urbanización, como en “La chica del tren”. Todo pasa también por el personaje que se pregunta por sus recuerdos, por su pasado. Esto es muy Hitchcock».
Es inevitable preguntarle a Paula Hawkins si la realidad, especialmente en un mundo tan convulso como en el que estamos, se lo está poniendo difícil para poder sorprender al lector. «Creo que hay algunos lectores que quieren leer sobre lo que está pasando, pero también hay otros que quieren leer algo distinto, quieren ir hacia escenarios literarios más tradicionales. Tal vez les genere más calma leer sobre una casa encantada que enfrentarte a guerras o cambio climático. No escribiría sobre eso», concluye Hawkins quien no quiere ni oír hablar de volver a su anterior profesión: el periodismo.