Todos los ojos miran a Felipe IV
El retrato pintado por Rubens en 1628, pieza estrella en Feriarte, que ayer abrió sus puertas con destacadas novedades dentro del mundo de las antigüedades
El retrato pintado por Rubens en 1628, pieza estrella en Feriarte, que ayer abrió sus puertas con destacadas novedades dentro del mundo de las antigüedades
No es sólo una feria de antigüedades. Feriarte se consolida como una de las citas más importantes en la que estarán presentes los anticuarios más prestigiosos de España. Noventa y cinco de ellos exponen objetos, obras y piezas que datan desde la Antigüedad hasta mediados del siglo pasado. Están todas a la venta y poseen una autenticidad garantizada por un comité de expertos. Este año la joya de la corona es una exclusiva pintura, el único retrato conservado del rey Felipe IV que realizó el maestro flamenco Rubens. Un cuadro que lleva impresas las trazas del pintor, como la frescura de su pincelada, el paso de los tonos fríos a los cálidos y la captación de un rey joven que por primera vez viste traje negro con golilla y con el Toisón de Oro. Rubens guardó el original hasta su muerte. Después pasó por varias manos, entre ellas, las de Sir Joseph Duveen, el comerciante de arte más importante de todos los tiempos. Lo descubrió en Londres en 1925, se lo vendió a la familia Vanderbilt en 1929. Posteriormente se le perdió la pista durante cincuenta años y ahora vuelve al mercado de la mano de la galería Mercè Ros, que inaugura por todo lo alto su asistencia a la feria. «Sé que esta obra se ha convertido en un reclamo pero hay otras que también son muy importantes», asegura minutos antes de la inauguración oficial. Al preguntarle si particulares o instituciones habían mostrado ya su interés dijo que «de momento el Estado es el único que tiene capacidad. No se ha ofrecido a ninguna institución. Espero que el ministro se anime porque nada nos haría más ilusión que verla colgada en un museo». Quizá pueda referirse tanto al Prado como al futuro de Colecciones Reales, que actualmente enfila su última fase antes de abrir sus puertas.
- Varios millones
Sobre la valoración del lienzo habló de «varios millones de euros», sin querer concretar una cifra exacta. Sirva como referencia la obra de Rubens que hace un par de años se vendió en la casa Sotheby’s de Londres por 3,8 millones de euros, «Retrato de caballero». La galería pidió el permiso de exportación de la obra el pasado mes de septiembre y éste se denegó y se podría declarar inexportable definitivamente), lo que significa que la Junta de Calificación, Valoración y Exportación de Bienes de Patrimonio Histórico estableció un periodo de seis meses en los que el Estado ostenta el derecho prioritario para ejercer la compra.
La galería Mercè Ros, además, ha traído a Madrid otras obras destacadas como un estudio en tinta de Salvador Dalí que data de 1929 para el cuadro «El hombre invisible». La «Pareja de floreros», de 1660 de Juan de Arellano. O uno de los pocos óleos conservados realizados por María Isabel de Borbón, reina de las Dos Sicilias, cuya obra se conserva en su mayoría en Nápoles.
Y es que Feriarte es toda una sorpresa. Porque de las paredes improvisadas se puede ver colgado de repente un Picasso, un Miró o Barceló o un Sorolla. Incluso una misma galería puede abarcar cuadros que van desde un Antoni Tàpies de 1960 a un Joan Reixac de 1455-1465, como ocurre en la Galería Bernat.
Feriarte es un lugar de encuentro para el que quiera comprar pinturas más antiguas o los que se decantes por el arte abstracto más moderno. Soraya Cartategui trae lienzos en pintura holandesa y flamenca de los siglos XVI y XVII formada por retratos, paisajes, naturalezas muertas o batallas. En Arte Reyes se encuentran obras de la escuela italiana del siglo XVI-XVIII, incluida una estampa de Francisco de Goya de 1797-1799.
Este año, hay algunas novedades. Por ejemplo, Feriarte acoge un nuevo servicio de asesoría para coleccionistas y para interesados en iniciarse en la compra de arte. El objetivo es iniciar y estimular el interés de los potenciales clientes. Hay programados incluso un calendario diario de visitas personalizadas al salón.
La otra es que en esta convocatoria hay una nueva área que da cabida a las librerías anticuarias. Así, expertos de librerías como Astarloa, Delirium books y Librería Pontes ponen al alcance de los amantes a la lectura, documentos de gran riqueza documental, códices, incunables, primeras ediciones, atlas, cartografías, mapas o grabados. Pero hay mucho más. Muebles como un armario de la época tudor inglés. Un biombo japonés de la dinastía Edo (finales siglo XVI), un portón toledano con postigo en medio y clavos de forja. Butacas Luis XV. Una pareja de candelabros en bronce de la época de Carlos X. Un reloj de bronce oro al mercurio y mármol negro, época Luis XVI. Una pareja de espejos barrocos Carlos III, realizado por un artista de la Escuela Española. Así como joyas de todo tipo. La feria permanecerá abierta hasta el próximo día 29 de noviembre en el Pabellón 3 de Ifema. El precio de la entrada es de 10 euros.
¿Quiere ver una villa romana?
Los objetos arqueológicos son otro de los grandes protagonistas de esta edición sobretodo, para los que quieren iniciarse. J. Bagot Arqueología-Ancient Art recrea una villa romana en la que se pueden contemplar una fina selección de obras de las distintas culturas mediterráneas, la griega, romana, etrusca, egipcia. Entre las piezas más antiguas, un bronce representando al Dios Osiris momificado del siglo VI a.C. O un ladrillo paleocristiano de terracota, con escena de dos caballos enfrentados, datado entre los siglos VI-VII d.C. Entre las obras que presenta Ars Historica Arqueología destaca un ladrillo paleocristiano, con escenas de dos caballos enfrentados y un capitel de pared nazarí en mármol blanco del siglo XV. Jesús Vico mostrará un caballo con base, en terracota policromada de a Dinastía Wey china.