"Donbass": La ronda del horror
Dirección y guión: Sergei Loznitsa. Intérpretes: T. Yatsenko, L. Smorodina, S. Koresova. Ucrania-Alemania-Holanda-Francia, 2018. Duración: 112 minutos. Drama.
Los medios hegemónicos determinan la agenda política europea, de modo que los ciudadanos de a pie asistamos al paso a paso del Brexit mientras ignoramos qué ocurre en Ucrania, donde el conflicto entre separatistas prorusos y la población local sigue siendo un polvorín. Ya sea en su faceta como documentalista («Maidan») o como realizador de ficción («A Gentle Creature»), Sergei Loznitsa se ha preocupado de visibilizar el clima de tensión que gobierna la zona. En «Donbass» enlaza trece estampas de la vida en Ucrania que hielan la sangre, sin renunciar a un esquinado sentido del humor. Empezando y acabando en el mismo punto –la invención de un ataque terrorista ucranio para venderlo como «fake new» alimentando así la maquinaria de propaganda dirigida por Putin–, Loznitsa estructura su película como «La ronda» de Öphuls pero en clave de horror expresionista. Hay personajes que funcionan como eslabones de una cadena que se desenreda, implacable y oxidada, para formar lo que Dante podría identificar como el último círculo del Infierno. Actos de corrupción y de violencia, humillaciones públicas –especialmente desagradable es el bautizo de golpes y esputos al que es sometido un hombre en plena calle– y bodas de nuevo rico se suceden en «un más difícil todavía» que Loznitsa dirige desde una óptica que oscila entre el realismo documental y la farsa grotesca. La inteligencia con que afronta la compleja arquitectura de su propuesta no logra evitar un efecto de saturación en el espectador, y al final el discurso de la película es tan coherente y agresivo como efectista. No hay posible escapatoria: no nos apetece quedarnos ni un minuto más en «Donbass», y nos convendría para calibrar la verdadera magnitud de la tragedia.