Artistas

«Maudie», pintar para sobrevivir

Aisling Walsh firma el «biopic» de la pintora Maudie Lewis, una de las grandes exponentes del «folk-art».

«Maudie», pintar para sobrevivir
«Maudie», pintar para sobrevivirlarazon

Aisling Walsh firma el «biopic» de la pintora Maudie Lewis, una de las grandes exponentes del «folk-art».

Maud Dowley es una alegre mujer de un pueblo de Nueva Escocia. Tiene una vitalidad imponente y es capaz de recorrer kilómetros a pie a pesar de padecer artritis reumática desde pequeña. Debido a esta enfermedad su familia la sobreprotege para evitar las burlas de la gente y ella se encuentra con una constante barrera en sus sueños de independencia. Hasta que conoce a Everett Lewis, un huraño y machista pescador que busca una sirvienta para su aislada y descuidada casa. Sin pensárselo dos veces, Maud se dirige allí en busca del trabajo y no para hasta conseguirlo. Así comienza «Maudie», el «biopic» sobre la pintora canadiense Maud Lewis y su atípica relación con Everett. «Me enviaron el guion y me sentí muy conmovida por su historia, su forma de ver el mundo, su arte y su matrimonio durante 25 años», asegura Aisling Walsh, directora del filme.

Un ejemplo de lucha

Para Walsh, representa «cómo luchar contra las adversidades del mundo» y la considera «un ejemplo para todos». Y es que su vida no fue fácil. Su matrimonio, a pesar de largo, no fue precisamente un cuento de hadas, algo de lo que queda constancia en la cinta. «Creo que refleja perfectamente la dificultad de vivir en pareja. A Maudie algunas veces se le ve triste, otras feliz, pero al final siempre está junto a su marido», apunta Walsh. En los peores momentos su refugio fue la pintura, vehículo a través del cual representaba su visión del mundo, primero en las paredes del grisáceo hogar, que acabó denominándose «La casa pintada» porque cada rincón estaba coloreado, y luego en tablillas que empezaron a venderse por todo Estados Unidos y por las que hasta el presidente Nixon llegó a estar interesado.

De igual forma que el color inundaba la estancia, la vitalidad de Maudie iba rompiendo el caparazón de su acompañante, originando una transformación muy importante en su relación. «Maudie le dio a él un amor que nunca había experimentado en su vida y él a ella un refugio en el que quedarse toda la vida», afirma la directora.

Maudie está excepcionalmente interpretada por Sally Hawkins, que la ha dotado de una gran sensibilidad. «Cuando leí el guión por primera vez ya la quería, porque es mi amiga y sabía de lo que era capaz de hacer como actriz. Aceptó y Ethan Hawke se unió después al proyecto. Ambos realizaron una actuación impresionante y formaron un equipo muy interesante, lleno de complicidad», concluye.