Sección patrocinada por sección patrocinada

Entrevista

Mina El Hammani, productora: "No quiero encasillarme"

La intérprete se lanza a nuevos retos produciendo, junto a Candela García, el nuevo cortometraje de Pablo Quijano: "Rubio cobrizo"

Mina El Hammani, productora: "No quiero encasillarme"
La actriz y productora Mina El HammaniQUIET PRODUCCIONES

A pesar de no haber cumplido todavía una década en la profesión, la presencia de Mina El Hammani (Madrid, 1993) ya es reconocida a nivel mundial. Buena parte de ese éxito interpretativo, claro está, pasa por el fenómeno global que supuso "Élite" (2017) o la buena aceptación de series como "El Príncipe" (2014). Pero El Hammani no se conforma. De hecho, nunca ha estado en sus planes hacerlo. Y así lo revelaba en el último Festival de Málaga, donde atendía a LA RAZÓN para hablar de una de sus facetas menos conocidas, la de productora. Tras participar en el remake de "El Internado" que estrenó Prime Video tras la pandemia, la actriz se ha volcado en su faceta teatral y en su perfil más empresarial, ejerciendo de directora de orquesta de pequeños proyectos independientes con vocación alternativa.

Ese es el caso de "Rubio cobrizo", original cortometraje dirigido por Pablo Quijano, que se pudo ver en la pasada cita malacitana, y que firma como productora junto a su amiga Candela García. Juntas, como Quiet Producciones, han dado forma a una película que se inspira en relatos de la cultura popular como el duelo entre Joan Crawford y Bette Davis, lo agita con un poco del duelo entre las míticas vecinas de Valencia, y lo sirve envuelto en un espectacular diseño de producción. Protagonizado por María Barranco y Elisa Matilla, el corto de Quijano se zambulle en la estética de videoclip para intentar contar una historia de envidias y malentendidos, una especie de estudio fugaz de la fama en términos de odio fraternal. Sobre esa oda a la querida enemiga, sobre los vaivenes del éxito y sobre su faceta como productora, El Hammani responde.

"Rubio cobrizo", nuevo cortometraje de Pablo Quijano producido por El Hammani
"Rubio cobrizo", nuevo cortometraje de Pablo Quijano producido por El HammaniQUIET PRODUCCIONESQUIET PRODUCCIONES

-¿Cómo nace Quiet Producciones? ¿Cómo nace Mina El Hammani, productora?

-Es una pulsión que siempre había estado ahí. La productora nace cuando yo era muy jovencita. Ya en la escuela de interpretación sabía que quería contar mis propias historias. Siempre he sido consciente de que había muchos factores que me limitaban, y no me equivocaba. En España pasa, que en el mundo audiovisual, hay mucho cliché y hay mucho encasillamiento. Respecto a ciertos personajes y respecto a ciertos orígenes. Como yo no quería encasillarme, como yo no quería que me encasillaran, siempre ha estado muy en mí lo de querer montar una productora, una empresa para poder contar las historias que a mí me gustaría ver. También para trabajar, pero al final fíjate que no estoy haciendo nada como actriz. Y me encanta. Ya llegará el momento donde pueda hacer yo un personaje.

-¿En qué punto esta ahora tu carrera como actriz?

-Ahora mismo estoy en un momento de desarrollo. No ya profesional, si no más emocional. He pasado por muchas situaciones y eso hay que rebajarlo, comprenderlo, asentarlo y volver a leer. No quería y no querré jamás desviarme de lo que verdaderamente quiero hacer en esta profesión. Y eso es contar historias y generar debate en la sociedad. Entonces, ha habido muchas decisiones a lo largo de este tiempo. ¿Me sigo encasillando? ¿Sigo diciendo que no a lo que me llegue para poder decir que sí a lo que sí me desarrolle como persona? Hay mucho que me llega por mis orígenes, pero si eso es distinto a lo que he contado habitualmente, lo voy hacer. Tiene mucho que ver con la intención. Por eso mismo me quiero seguir formando, iré a Estados Unidos, seguiré trabajando como productora y en poquito podremos hablar más de los proyectos. No tengo prisa. No tengo ansiedad por sacar las cosas adelantes ni me fijo en trabajar por trabajar. Obviamente, hay que comer y no vivo del aire, pero si me puedo permitir decir que no a ciertos proyectos para seguir desarrollándome artísticamente lo voy a hacer.

-La popularidad ganada anteriormente, en series como "Élite", imagino que ayuda a darle relevancia a tus proyectos como productora. Pero, ¿crees que pueda pasar lo contrario, que los prejuicios puedan afectar a ese trabajo?

-No lo he pensado mucho, la verdad. Porque sé perfectamente cómo desligarlo, por muy unidas que vayan ambas cosas. Desde la productora hemos estado muy inmersas en ese proyecto. Candela es un coco, es maravillosa, y me ha hecho sentirme muy bien acompañada en este recorrido. Entonces no he tenido esa sensación o ese miedo al que dirán. Ese juicio ya es bastante grande en la parte actoral, y yo lo noto muchísimo. Pero en la parte de producción y en la empresarial no lo noto. Y no me apetece notarlo, la verdad. Ahora mismo solo quiero escuchar a la gente que está apostando por nosotras.

"Rubio cobrizo" se mira de lejos en el vídeo de las vecinas de Valencia y está protagonizado por María Barranco y Elisa Matilla
"Rubio cobrizo" se mira de lejos en el vídeo de las vecinas de Valencia y está protagonizado por María Barranco y Elisa MatillaQUIET PRODUCCIONESQUIET PRODUCCIONES

-Antes hablábamos de los orígenes, de cómo han pesado en lo que te llega. Mirando a ejemplos como el de Francia, con una cultura cinematográfica de asimilación, o el de Estados Unidos, con su atomización. ¿Dónde queda España? ¿Se ha quedado atrás respecto a la inmigración en su cine, en su audiovisual? ¿Cómo lo ves tú?

-Es una pregunta muy complicada, pero he aprendido a ser un poco tajante respecto a ello. Como Mina El Hammani, después de la exposición de "Élite" me lo tomé muy a pecho, muy personal. Creía que tenía que hablar de ello, poner encima esas cuestiones porque no me pasa solamente a mí. Tengo muchísimos amigos, actores, actrices, de muchísimos orígenes, nacidos aquí... Y no reciben personajes que se identifiquen con ellos. Pero claro, como he hablado tanto de esto, el discurso se puede hacer repetitivo. Sí que es verdad que me he dado cuenta, de una vez, que esa pregunta más que a mí hay que hacérsela a la gente que está aquí (n.d.r.: En el Festival de Málaga). A todos esos productores, guionistas, directores de cásting... Son ellos los que tienen las respuestas. Yo tengo muchísimas ganas de contar esas historias, independientemente del origen.

-Entrando ya en "Rubio cobrizo", ¿cómo dais con la historia? ¿Hasta qué punto estás implicada en el cómo del corto?

-La suerte se trabaja, pero he tenido un momento de encuentro que fue clave para acompañar a Pablo (Quijano). Fui a ver una obra de teatro, "Los hijos de", donde estaba mi amiga Georgina Amorós. Fui a verla y fui el último día que había función. Fuimos a cenar y me senté, por casualidad, al lado de Pablo. Nos pusimos a hablar, me pareció que era una persona muy empática que hablaba con muchísima pasión sobre su profesión y sobre lo que quería hacer. Al cabo de los meses me llamó, me envió el guion y, al hacerlo, salí muy emocionada. Ahí había una pasión que se podía leer, algo que pasa muy pocas veces con un guion. Es muy complicado. Hablé con Candela y le dije que se lo leyera. Estamos muy metidas, pero desde Quiet Producciones lo que queremos es dejar hacer, sobre todo desde lo artístico. Si él nos pide consejo, estaremos ahí, pero no vamos a cambiar su visión artística. Es un acompañamiento, él sigue siendo el responsable. Nuestra implicación es otra. Por ejemplo, cuando estábamos repasando los personajes, le pregunté a Pablo: ¿Por qué son todas blancas? (ríe). Y así dimos con la periodista. Pero hicimos cásting, porque no es una cuestión de incluir por incluir, si no encontrar sinergias apropiadas.

-¿Cómo de difícil ha sido levantar el corto a nivel económico? ¿Cómo de difícil está el panorama español en ese sentido?

-Este es nuestro segundo corto, pero he sido muy hormiguita. Como yo siempre he tenido claro que quería montar mi productora, ha habido mucha parte de mis ingresos que yo he ahorrado. Yo quería levantar una empresa y eso necesita unos recursos. Si me preguntas dentro de dos años, quizá la estructura sea otra, pero ahora mismo la inversión es propia. Hemos tenido mucha ayuda, pero la mayoría de la inversión vino de mi bolsillo. No hemos tenido que buscar demasiado en subvenciones y demás. Próximamente sí tendremos que centrarnos en ello.