Mortier se queda en el Teatro Real

La pregunta estaba en el aire desde el momento en que el coliseo decidió relevar a Gerard Mortier de sus funciones de director artístico para encomendarle la nueva tarea a Joan Matabosch, cuyo contrato entra en vigor el 1 de enero de 2014. ¿Qué iba a pasar con el saliente? Tras unos primeros días de incertidumbre, largas conversaciones y espadas en alto, la solución y el acuerdo han llegado en forma de nuevo cargo. Ayer lo desvelaba el presidente del patronato de la Fundación Teatro Lírico, Gregorio Marañón: «La relación iniciada hace cuatro años continúa con una nueva situación profesional absolutamente distinta. Será asesor artístico del teatro, un puesto de nueva creación que tendrá un contrato nuevo que sustituirá al anterior», aseguró. ¿Y supondrá un coste extra para las arcas del coso? «No vamos a dar un solo dato económico del equipo directivo de este teatro. Las decisiones económicas que se han tomado están muy medidas. No va a costar ni un euro más de lo que se estaba pagando», y añadió que desarrollará funciones de asesoramiento en el área artística y colaborará con sus conocimientos y reconocida experiencia, en la proyección internacional y la difusión de actividades de la institución».

El ya ex director artístico no estará presente de manera continuada en el Real dado su delicado estado de salud, pues fue intervenido de un cáncer a finales de julio y actualmente se somete a un tratamiento de quimioterapia. Otra de las incógnitas que sobrevolaron la rueda de prensa (con una puesta en escena austera, diametralmente opuesta a la que vivimos en la casa hace cuatro años en una abarrotada Sala Gayarre cuando fue presentado Mortier) era saber hasta qué punto se respetará el trabajo hecho por el gestor belga. La temporada que ya ha arrancado, es decir, la 2013-

2014, se mantendrá tal y como la concibió: «No hay la menor voluntad de entrar aquí como un tanque y barrer con lo que está pactado. Lo avanzado se respetará y se verá qué hacer con lo que aún está en estado incipiente», declaró Joan Matabosch, que abrió su intervención reconociendo la labor, no sólo de su antecesor, sino de todos los directores artísticos que han pasado por el coliseo.