Natalia Lacunza: «Tenemos tantos estímulos que es inevitable que nos coma la ansiedad»
En su nuevo y primer álbum, «Tiene que ser para mí», la artista libera sus pensamientos a través de una mezcla de estilos y de un alto nivel de auto exigencia
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Ver, oír y componer. A eso se ha dedicado Natalia Lacunza durante los últimos tres años. La joven que conocimos en los platós de «Operación Triunfo» ha buscado su madurez musical filtrando información, elaborando una narrativa artística y un concepto profesional que ahora desemboca en su primer álbum: «Tiene que ser para mí». Un disco que es fruto de una introspección profesional, y que se presenta como un viaje por la aceptación de la llegada a la madurez como punto de inflexión creativa y vital.
¿Cuál ha sido el principal objetivo de este proyecto?
Quería hacer un disco con un nivel de auto exigencia súper alto, porque para mí un álbum debe ser algo que, a nivel narrativo y sonoro, sea redondo, sin fallo. Buscaba una historia concreta, que no dejara margen a la interpretación, no quería hacerlo así como así. Tuve momentos de no saber si iba a poder darle la homogeneidad que me gustaría. Pero al final no ha ganado el síndrome de la impostora, he ganado yo.
¿Sintió alguna presión externa?
La sociedad en la que vivimos, en la que todo es súper efímero, trabajas un montón en un producto que igual después pasa desapercibido, es un poco frustrante. Es inevitable sentir que todo va muy rápido, pero tienes que pelear contra esa inercia y tomártelo con calma, para hacer las cosas bien y con todas las letras.
¿Cómo le quitaba hierro a esa auto exigencia?
No he conseguido callarla mucho. He tenido un martillo en la cabeza constante de cosas que podrían salir mal. Pura ansiedad, pero mi manera de gestionarlo ha sido componer.
¿Qué ha gestionado?
Me estoy haciendo mayor, tengo 23 años y tengo una carrera musical que dirigir. El disco habla de ese proceso de pasar de una niña inocente a una que se tiene que acostumbrar a cosas nuevas. Le canto a mis demonios, a alguna que otra persona y a mí misma.
¿Cuándo dejó de ser una niña?
Es algo progresivo. Aprendes a base de toparme con cosas desagradables y que no eres capaz de manejar. Me queda mucho proceso y soy mucho más consciente.
¿Qué le ha atormentado?
Me gustaría no haber dudado tanto de mí, no haberme cuestionado constantemente. Haber confiado más y estar más tranquila.
¿Por qué es importante dar voz a todo lo que nos pasa por la cabeza?
Es vital y necesario. En mi caso ,es mi forma de desahogarme. Escribo sobre lo que siento para organizar mis pensamientos y diferenciarlos. Es bastante liberador.
¿Siente vértigo al exponerse sentimentalmente?
Sí. Pero todas son canciones que hablan de temas súper generales. Eso es lo bueno de la música. Son aspectos en los que te puedes sentir súper identificado, cuando después en la vida real no conectas.
¿Qué temas le gusta realzar con su música?
Hablo mucho de la salud mental, de la autoestima, de pelear contra el auto sabotaje, aceptar que las cosas cambian. Es un popurrí.
Cada vez se habla más sobre salud mental.
Y está genial, porque hay muchas veces que ignoramos que lo estamos pasando mal porque pensamos que es normal. Pero igual debemos hacer algo para mejorar cada situación.
¿Por qué cree que son las nuevas generaciones las que más voz le dan a estos temas?
Tenemos tanta sobreinformación y tantos estímulos, las exigencias son tan altas en tan poco tiempo, que creo que es inevitable que nos coma la ansiedad. Somos la generación de internet, que ha hecho que nuestro cerebro aumente un 80% y vea mil posibilidades más que antes. Eso nos hace estar atacados.
Pero internet puede ser algo positivo a nivel profesional...
Sí, a mí me sirve para consumir contenido que me gusta, de artistas que me gustan. Realmente es una maravilla. Pero también hay que saber mantenerte al margen y saber qué mensajes ignorar.
Estilísticamente, ¿dónde sitúa el disco?
Es una mezcla. Tiene influencias ochenteras, noventeras, de música actual, de R&B, boleros, hip hop... Mi música es la combinación de lo que escucho.
¿Se terminará decantando por algún género?
No lo sé. Voy a seguir mezclando hasta el día que me muera. Sí que tengo proyectos más concretos que me gustaría hacer, pero encontraré la manera de hacer un cambio. Mi ídolo es Lady Gaga, una artista que ha hecho todos los tipos de música que puedes imaginar. Eso es lo que la hace legendaria. Estamos en un mundo muy cambiante y explorar da mucha riqueza.