Velázquez, mejor con música

Jesús Torres gana el VIII Premio de Composición AEOS-Fundación BBVA con una obra basada en tres lienzos del artista sevillano

Tres cuadros. Tres lienzos universales de un gran creador. “La Venus del espejo”, el “Cristo crucificado” y “El triunfo de Baco”. Todos salidos de la mano de Diego Velázquez y desde que este hombre en la mitad de su vida recuerda, le han parecido “fascinantes”. Este triángulo de oro le ha valido a Jesús Torres (Zaragoza, 1965) un premio, el VIII de Composición AEOS-Fundación BBVA, dotado con 18.000 euros y uno de los más importantes del panorama musical. Además, la obra ganadora será interpretada por una treintena de orquestas y posteriormente grabada. “Es el mejor regalo que podría recibir este año”, dijo el compositor nada más conocer la noticia. Ha cumplido cincuenta años y ya tiene algo más que celebrar. “Es el premio más interesante a nivel mundial. No solamente por su cuantía económica, sino porque que 27 orquestas interpreten tu obra es un lujo para cualquier compositor. No creo que exista otro que garantice su difusión”, aseguro. Le llega, dice Torres, en un periodo de madurez, de cambios, de consolidación: “Tu escritura se ha hecho más factible. Mi música ha cambiado bastante: ahora es igual de compleja que lo era antes, pero probablemente resulta más sencilla para los músicos que tiene que interpretarla”, declaraba.

“Tres pinturas Velazqueñas” tiene una duración de 15 minutos. Y así explica cómo se han imbricado los cuadros para tejer esta composición.

El primer movimiento se dedica a “La Venus del espejo”: “Un constante fluir de diversos motivos en permanente ebullición, con sus múltiples ecos y ramificaciones” refleja “la sensualidad y poesía de la imagen”, comenta el autor. El segundo movimiento aborda “la traslación sonora de Cristo Crucificado, recorriendo caminos que van desde el sombrío y dramático comienzo hasta el místico y desolado final”. Termina la obra con El triunfo de Baco, donde Torres explora “la posibilidad musical de pensar en la ligereza, con una célula recurrente de seis notas que aparece completa, fragmentada o pulverizada en una miríada de mixturas tímbricas y armónicas”.

Jesús Torres estudió en el Conservatorio Superior de Música de Madrid. Paralelamente realiza diversos cursos de Análisis Musical con Luis de Pablo. Entre los años 1986 y 1988 trabaja la Composición con Francisco Guerrero. Es uno de los compositores más notables de su generación, autor de 95 composiciones orquestales y de cámara de muy diferentes formaciones instrumentales. Destaca su estrecha relación con la poesía: de Aleixandre a San Juan de la Cruz pasando por Cirlot, Leopoldo Panero y Rubén Darío.

Entre sus obras de la última década destacan Sinfonía (2005), para el 40 aniversario de la creación de la Orquesta Sinfónica de RTVE; Fausto (2008), música orquestal para la proyección de la película muda de 1926 de F. W. Murnau y estrenada en el Teatro de la Zarzuela de Madrid; Evocación de Miguel Hernández (2010), para soprano, coro y orquesta, compuesta para el centenario del nacimiento del poeta y que se interpretó por primera vez en el Festival de Alicante y Apocalipsis (2011), para coro gregoriano, doble coro y ensemble, con textos de San Juan, encargo de la Semana de Música Religiosa de Cuenca.

Su música se ha interpretado en festivales y series de conciertos de numerosos países: desde la Bienal de Venecia y Musica 99 Strasbourg hasta Musikfestspiele Saar o Ars Musica de Bruselas y Présences 2000 de Radio France, entre otros.