Laure, el futbolista que ha decidido invertir en ozono contra el coronavirus

Laureano Sanabria, ‘Laure’, (Madrid, 1985), futbolista y capitán del Alcorcón, está pasando las últimas semanas “preocupado” por la situación global que se está viviendo debido a la pandemia de coronavirus.

Además, el deportista madrileño afronta este tiempo con la doble responsabilidad de quedarse en casa, pero también de buscar la manera de reinventarse y ser útil con su empresa, GS Group.

La empresa, radicada en el municipio madrileño de Moraleja de Enmedio, la forman cuatro socios y tiene cuarenta empleados. Empezó enfocada a la construcción, aunque también trabaja la cerrajería, y desde hace tres años entró en el sector de la hostelería.

Para afrontar la vuelta a la normalidad, Laure y sus socios se han embarcado en "un proyecto ilusionante" con el que quieren ayudar a frenar el virus y dotar de "seguridad" a las empresas.

"Una cosa que creemos que puede ayudar es la desinfección de los espacios mediante el ozono", confiesa a EFE Laure, cuya empresa ya cuenta con unas máquinas en proceso de homologación para colocarlas en los aires acondicionados o en los conductos de ventilación de diferentes estancias.

"Con esas máquinas se purifica el ambiente al desprender dióxido de carbono y ozono", declara el jugador alfarero, que para poner en marcha este proyecto junto a sus socios ha estado asesorado en todo el proceso por expertos en la materia.

El ozono es un desinfectante natural que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es el biocida más eficiente que existe. Sus beneficios son una desinfección inmediata, puede disponerse mediante un sistema totalmente automatizado que es rápido y sin obra, no daña a las personas ni a la ropa, no genera residuos y su acción es microbicida, oxigenante y descontaminante.

"Tenemos homologadas las dosis, pero falta el trámite de las máquinas, que están en el proceso. De momento hemos vendido 450 a una empresa y hemos pedido otras 500 más, pero tenemos mucha demanda y esperemos que sean más", señala.

"Estamos a expensas de recibir de un laboratorio la homologación del agua ozonizada pulverizada que desinfecta el virus y que se puede pulverizar sobre el ser humano", comenta el futbolista, que subraya que ese agua siempre debe ser ozonizada pulverizada porque "el ozono sobre la atmósfera sin agua es tóxico".

Esas máquinas purificadoras de ozono no son el único eje de este proyecto frente al coronavirus, sino que también están trabajando en los arcos desinfectantes para puertas, ya sean de empresas, centros de ocio o recintos públicos y privados.

Para su distribución por toda España tienen diversos proveedores. Los precios de las máquinas purificadoras son de unos 1.500 euros, mientras que los arcos de las puertas dependen del modelo y capacidad.

Este proyecto para hacer frente al coronavirus cuando se reanude la actividad de una manera más generalizada lo ha ido poniendo en marcha Laure junto a sus socios mientras permanecía confinado en casa.

"Estas semanas las he pasado con mi mujer y los dos hijos en casa intentando aprovechar el tiempo", comenta Laure, que también tiene tiempo de entrenar a distancia siguiendo un plan de trabajo que le marcan los preparadores del club alfarero.

"El club nos hace un trabajo específico de ejercicios, también de dieta, y tres veces a la semana, por videoconferencia, estamos conectados virtualmente para trabajar juntos", apunta.

En su papel de capitán, Laure es uno de los encargados de velar por el bien de su equipo y también del resto de futbolistas para una progresiva vuelta al trabajo cuando lo decrete Sanidad. Si se vuelve a competir, lo que parece claro es que será en estadios sin público.

“Si fuera por nosotros siempre sería con público porque el público es el que da vida al fútbol, pero no está en nuestra mano. Este virus no lo podemos controlar, es una desgracia y hay que ir adaptándose a esta nueva situación”, concluyó.