Golf

Las lágrimas de Tiger Woods por la ovación que recibió en el British tras no pasar el corte (vídeo)

El mejor golfista de la historia juega muy limitado después del grave accidente de coche que sufrió en 2021. Jon Rahm y Sergio García se meten en la pelea

Tiger Woods saluda a los aficionados desde el Puente Swilcan, icono de St. Andrews
Tiger Woods saluda a los aficionados desde el Puente Swilcan, icono de St. AndrewsROBERT PERRYAgencia EFE

Tiger Woods continuó con la pesadilla en St. Andrews en la segunda jornada del British Open, pero se llevó una alegría en medio de su pelea con el campo: el público, por supuesto, no olvida quién es ni lo que ha conseguido a lo largo de su carrera, y cuando se dirigía a cerrar su participación en el hoyo 18, sabiendo que no iba a pasar el corte, los aficionados le brindaron una larga y ruidosa ovación que llegó al corazón del golfista estadounidense. Mientras caminaba, no pudo reprimir las lágrimas.

No es la primera vez que Tiger llora en este torneo. En 2006 lo hizo, pero en una situación totalmente diferente. Después de embocar la última bola y proclamarse campeón, en el que era su undécimo “Major”, se echó a los hombros de su caddie sin poder frenar el llanto. En su memoria estaba su padre, “su mejor amigo”, como él lo definía, que había fallecido unos meses antes. Esta vez la emoción le llegó porque quién sabe si va a ser la última vez que juega el British.

El golfista estadounidense se quiere seguir dando oportunidades con los palos porque es su pasión, aunque difícilmente va a volver a ser competitivo. En febrero del año pasado sufrió un accidente de coche que a punto estuvo de costarle la pierna derecha, que quedó destrozada, pero se la salvaron. Es casi milagroso que vuelva a jugar. Lo hizo en el Masters de Augusta y pasó el corte y vivió una última jornada con Jon Rahm, sin opciones de triunfo, claro, tranquila en la que charlaron de la vida, de la paternidad... “Fue terapéutico”, explicó el vasco. También acudió al PGA y logró superar el segundo día, pero estaba visiblemente cojo y después de la tercera jornada, abandonó cuando iba último en la clasificación. Una cosa es jugar por el placer de hacerlo y otra agonizar.

Al US Open no fue y en el British se había propuesto que le saliera al menos una vuelta buena. Pero no lo ha conseguido: el jueves hizo +6 y el viernes se ha quedado en +3, con algún golpe de genio, pero sin salirle en general nada bien. El total de +9 le deja fuera de las rondas finales. El mismo Woods ha reconocido que es es imposible que regrese a la cima en esta ocasión. Sí lo logró después de unos años de tortura por su espalda. Llegó a hacerse incluso adicto a los medicamentos que tomaba para aliviar el dolor, dejando alguna imagen más que preocupante. Tuvo que operarse, cambiar incluso la forma de golpear la bola, pero en 2019 volvió a hacer magia con los palos para conquistar el Masters de Augusta, su décimo quinto “Major” y seguramente ya último. Se va a quedar a tres de igualar el récord de Jack Nicklaus.

Jon Rahm y Sergio García se reenganchan

Por otro lado, la segunda jornada del British sirvió para que Jon Rahm y Sergio García se recompusieran y puedan intentar hacer algo importante si siguen con esta tendencia al alza en los dos últimos días. Sergio tuvo una vuelta fantástica de -6 para arreglar el +3 del jueves después del terrible triple bogey que hizo en el 17. Esta vez, el castellonense hizo cinco birdies, un fantástico eagle y un bogey, para situarse con un total de -3. Rahm, muy sólido durante todo el viernes, hizo seis birdies (y pudieron ser algunos más) y un bogey. Está con un total de -4, dentro de la pelea también, aunque como jugaron por la mañana la jornada no había terminado.