Tira tira: El calentón de Saúl

Suele afirmarse que los niños y los borrachos dicen siempre la verdad, a lo que yo añadiría que también de vez en cuando los futbolistas si les pillas en caliente. Hay muchos ejemplos por ahí a lo largo de la historia y le pasó a Saúl nada más acabar el partido de Leganés con ese empate del Atlético que supo a derrota. «Tenemos que ser más ambiciosos», exclamó con más razón que un santo. Era lo que pensaba el magnífico centrocampista del Atlético y quizá, barrunto, lo que estarían pensando muchos aficionados rojiblancos por lo sucedido en el derbi.

Carne de pescuezo

Luego, Saúl lo matizó tras haberse duchado y edulcoró el asunto... en frío. Lo mismo que hizo el Cholo. «Fue un calentón de Saúl y si ve el partido, verá que pudimos haber ganado». Frío, caliente, maquillaje para rebajar la cruda realidad... porque Saúl había hecho el diagnóstico correcto. Y por varios factores. El Atlético entregó todo el primer tiempo, que le salió un tostonazo ante un Leganés muy bien organizado. Esos 45 minutos del equipo rojiblanco fueron más malos que la carne de pescuezo. Y hay que reconocerlo.

Griezmann y Gelson

También es rigurosamente cierto que hubo mejoría en la segunda parte, que Griezmann salió de su letargo con un gol de falta directa que sorprendió a Cuéllar, y que Gelson siguió corriendo como un poseso al ser por fin titular en Liga. Y hay que ver, dicho sea de paso, lo que les cuesta a casi todos los fichajes entrar en la dinámica del Cholo Simeone (Jackson, Gaitán, Vietto, Gameiro y también a Antoine varios meses, aunque luego, eso sí, el técnico le mejoró y le ha ayudado a ser la estrella que actualmente es). Pero el Leganés no se vino abajo y cazó el empate en una falta con despiste defensivo general entre los rojiblancos. Al final, un punto rácano. Otra vez. El calentón de Saúl lo explica todo. Y muy bien.