Competiciones deportivas

El deporte español lanza un SOS

Las Federaciones necesitan diez millones de euros para cumplir compromisos, «pero no hay un céntimo»

La Selección de hockey, campeona del Mundo
La Selección de hockey, campeona del Mundolarazon

No es oro todo lo que reluce en el deporte español, aunque los éxitos contradigan esta aseveración. Cierto que por equipos España es primera potencia mundial, tan cierto como que la crisis se va a llevar por delante deportistas y medallas si alguien no lo remedia. La alarma ha saltado, el ADO no puede cubrir su presupuesto, dos empresas patrocinadoras se han dado de baja, Bankia y Campofrío; Leche Pascual ha descendido un escalón, que asciende Damm, y Televisión Española, que antes aportaba 16 millones más IVA, ahora sólo ayuda con cuatro, todo incluido.

Si no se cubre el presupuesto del ADO, algunas becas desaparecerán, el deporte base morirá por inanición y repetir en Río'2016 los éxitos de Londres'2012 (17 medallas) será una utopía. Si a esa contrariedad se suma que las subvenciones a las federaciones nacionales han descendido en torno al 70 por ciento en los últimos tres años, el fracaso está tan garantizado como antes los podios. El paso atrás será irreversible y la ausencia de resultados, un lugar común, como en los años 80. Aspirar a las 22 preseas de Barcelona'92, con 13 de oro irrepetibles, será una utopía y aquellos Juegos, un maravilloso recuerdo.

Entre el 20 y el 28 de septiembre próximos, después de que el COI haga público en Buenos Aires el nombre de la sede de los Juegos Olímpicos de 2020, se celebrará en Angola el Mundial de Hockey sobre Patines. Por primera vez en 41 ediciones, este acontecimiento tendrá lugar en un país africano. Los últimos cuatro mundiales y los últimos siete campeonatos de Europa los ha ganado España. La selección de Carlos Feriche es la mejor del planeta. El sorteo la ha encuadrado en el Grupo A, con Suiza, Brasil y Austria. Es favorita y se juega con Portugal la supremacía universal. Cada una de estas selecciones ha ganado 15 mundiales; el desempate es en Angola, y la pregunta: ¿jugará España?

Participar en este campeonato supone un desembolso de unos 100.000 euros. En caja «no hay un céntimo». Carmelo Paniagua, presidente de la Federación, remueve cielo y tierra para conseguir dinero y patrocinadores. Las cuentas están hechas. Dormir en Luanda cuesta 400 euros la noche por persona. Los expedicionarios son 15. El Mundial dura diez días: 60.000 euros. Más 30.000 en pasajes de avión y otros 10.000 para la concentración previa, pues hay que prepararse. A día de hoy, el viaje de la mejor selección del mundo es imposible.

También este año, a finales de mayo y primeros de junio, está previsto en Sevilla el campeonato de Europa de Remo. Organizarlo cuesta 150.000 euros. Pues tampoco hay un céntimo. Fernando Climent, el presidente de la Federación, lleva meses llamando a muchas puertas, sin éxito. Los federativos internacionales le dicen que cómo Madrid va a organizar unos Juegos Olímpicos si España no puede pagar 150.000 euros por un Europeo... En su Federación hay ocho empleados, con él; tiene que prescindir de cuatro. El problema, sin embargo, no son las indemnizaciones, pues parece ser que el CSD va a disponer de una ayuda, o una subvención, de entre 120.000 y 150.000 euros a fondo perdido, según sea la federación afectada, para hacer frente a los despidos. Por cierto, para obtener recursos, Remo piensa compartir la mitad de su sede, un piso de 200 metros cuadrados, a cambio, claro está, de que el otro inquilino pague el 50 por 100 del alquiler.

Seguro que hay algún presidente desaprensivo en alguna federación ya señalada con un sueldo anual superior al de Mariano Rajoy. No tardará mucho el CSD en hacer públicos los salarios de los federativos. Sería lo suyo, ya que proceden en su mayoría de subvenciones públicas. Pero también es cierto que se han apretado el cinturón. Ha habido rebajas de sueldo en todos los niveles; algunos presidentes, como José Luis López Cerrón, de Ciclismo, no cobran, aunque el antecesor lo hacía, porque «no hay un céntimo» –la frase más repetida en cualquier acto donde coincide la gente del deporte–. Pero eso no es lo importante, lo trascendental es que hay deportistas que no salen a competir al extranjero, y conste que ya lo hacían en inferioridad de condiciones... económicas.

Corre el rumor de que en el deporte español se va a instalar el copago, es decir, que quien quiera jugar fuera tendrá que correr con los gastos, y se alude a Inglaterra como ejemplo. Y no es verdad absoluta. El presupuesto del deporte inglés para Río es de 470 millones de libras; el de los brasileños, 800 millones de dólares, y el de los españoles, 35 millones de euros.

Hace unos años, en tiempos del Gobierno de José María Aznar, cuando como ahora se veían las orejas y hasta los colmillos al lobo, el presidente se reunió con el Rey y unos cuantos empresarios españoles y la situación de carestía se corrigió. ¿Será también hoy ése el camino? Las cuentas están hechas: para que el deporte de este país continúe siendo el mejor embajador de la marca España, necesita sólo 10 millones de euros más de los que el ministerio del ramo, o el de Hacienda, le han asignado. Respirarían los deportistas y las federaciones; igualar en Río los resultados de Londres no sería empresa imposible y a la Candidatura de Madrid 2020 la librarían de no pocos obstáculos y de unos cuantos prejuicios.

El ADO, incompleto

El 28 enero de 1988, el Comité Olímpico Español, el Consejo Superior de Deportes y Radiotelevisión Española constituyeron la «Asociación Deportes Olímpicos» para impulsar el desarrollo del deporte de élite y garantizar los medios financieros para favorecer la preparación y el crecimiento de los deportistas españoles en las diferentes citas olímpicas. El ADO acoge socios patrocinadores que aportan anualmente 862.500 euros cada uno: Coca- Cola, El Corte Inglés, La Caixa, Loterías y Apuestas del Estado, Repsol, Movistar y Endesa, que se lo está pensando. Además, empresas patrocinadoras que desembolsan 275.000 euros cada una: Leche Pascual, Air Europa, Allianz, Correos y Cola Cao. Bankia y Campofrío se han dado de baja. Hay negociaciones con otras firmas, y un problema, que, si no afloran, las becas R, concedidas a deportistas que han quedado finalistas en unos Juegos, desaparecerán. Faltan más de diez millones.