El forense contradice a Pistorius

El forense que hizo la autopsia de la novia de Oscar Pistorius, Reeva Steenkamp, declaró hoy en el juicio por asesinato contra el atleta que la víctima comió dos horas antes de morir, mientras que según el acusado la pareja se acostó cinco horas antes de que ella muriera por los disparos del deportista.

En el estómago de Steenkamp se encontraron 200 mililitros de comida parcialmente digerida, compuesta principalmente de verduras y queso, precisó el perito, Gert Saayman. "Steenkamp comió aproximadamente dos horas antes de su muerte", dijo.

El forense precisó que la cantidad ingerida por Steenkamp no era la equivalente a un aperitivo o un tentempié, sino a una "comida principal".

En un momento anterior de su declaración como testigo, Saayman había descrito las heridas que causaron la muerte de Steenkamp, cuyo detalle hizo que Pistorius, con la cabeza en el regazo durante toda la vista de hoy, vomitara en varias ocasiones.

Pistorius sostiene que la pareja se fue a dormir a las 22 horas del 13 de febrero del pasado año, unas cinco horas antes de que el corredor matara a tiros a Steenkamp al creer que era un ladrón, según su versión de los hechos.

Saayman señaló asimismo que las balas que acabaron con la vida de Steenkamp eran del tipo "Black Talon", un modelo de munición expansiva diseñada para provocar el máximo daño posible al abrirse cuando entran en el cuerpo.

La modelo tenía heridas en la cabeza, la cadera, la mano y el brazo, y todos estos disparos podrían haberle causado la muerte, agregó Saayman.

Steenkamp presentaba también marcas de varios golpes en el cuerpo, que podría haberse dado al caer tras ser disparada, observó el forense. La joven pudo no morir inmediatamente al recibir los disparos, que sin embargo sí la incapacitaron para hacer cualquier acción voluntaria.

En otras informaciones aportadas en su declaración, Saayman explicó que en la vejiga de la modelo había la cantidad equivalente de orina a una cucharilla de azúcar.

Por contra, la defensa de Pistorius mantuvo en febrero del año pasado durante la vista sobre su libertad bajo fianza que la vejiga de la víctima estaba completamente vacía, ya que había ido al baño a orinar y no huyendo de la ira de su novio, como mantiene la Fiscalía.

Pistorius reconoció al inicio del proceso haber acabado a tiros con la vida de su novia a través de la puerta cerrada del baño de su casa de Pretoria, la madrugada del 14 de febrero de 2013.

La Fiscalía acusa al deportista, de 27 años, de matar intencionadamente a Steenkamp, y pide que sea condenado por asesinato premeditado, un cargo que le costaría la cadena perpetua.

Por su parte, el velocista alega haber disparado contra Steenkamp -que entonces tenía 29 años- por accidente, al pensar que lo hacía contra un ladrón que se había colado en su casa.

El juicio a Pistorius comenzó el lunes pasado en el Tribunal Superior de Pretoria, y está previsto que se extienda hasta el 20 de marzo.

La vista de hoy estuvo marcada por la angustia de Pistorius, que vomitó en repetidas ocasiones en un cubo azul colocado entre sus pies durante el testimonio del forense, con ruidosas arcadas que pudieron oírse en toda la sala.

La juez Thozozile Masipa le ofreció al abogado de Pistorius, Barry Roux, aplazar la declaración, pero el letrado lo desestimó tras contactar con su cliente.