Tregua Sol-Moncloa

Ayuso se apunta al punto y aparte en el 2 de mayo: hace una loa de la región en la que “ganan las ganas”

Elogia a los “héroes” que “plantan cara a la adversidad a la Madrileña” y recuerda que "lo que pase en Madrid resuena en toda España"

Es un puente «goloso» y se ha notado en Sol en los actos conmemorativos del Dos de Mayo en la Real Casa de Correos, sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid. Y no solo porque hubo una menor afluencia de gente, en comparación con el año electoral anterior, sino también por ausencias que llamaron la atención, como la del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, o de la dirección del partido. Pero en Sol no dieron importancia al hecho en sí en un momento en el que el foco está puesto en la campaña de las elecciones catalanas y en las que el partido «estuvo ampliamente representado», decían. Los populares negaron que pudiera haber tiranteces entre Núñez Feijóo y la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, por cuestiones tan vanas como que ésta reaccionara antes que el presidente del partido a las declaraciones de Pedro Sánchez cuando anunció hace unos días que continuaba en el puesto. «Se ha tomado dos días de descanso» para proseguir con la campaña catalana, acabó justificando a Feijóo desde Santo Domingo de la Calzada (Logroño) la secretaria general del PP, Cuca Gamarra.

Con una puesta en escena más sofisticada que nunca y con la intervención, por primera vez, de la Patrulla Águila, que aportó aún más espectacularidad a la celebración, el discurso de la presidenta madrileña por el Día de la Comunidad de Madrid fue estrictamente protocolario, sin entrar en cuestiones políticas de ningún tipo en lo que pareció un alto el fuego Sol-Moncloa.

Convirtió su disertacón del Día de la Comunidad de Madrid en una loa a una región en la que «ganan las ganas» a lo largo de la historia, y a los «héroes» que «plantan cara a la adversidad a la madrileña», vaciando de cualquier contenido político su intervención.

«Esos héroes anónimos que levantan hoy este Madrid al servicio de España son autónomos, padres de familia, bomberos, taxistas, Policías, Guardias Civiles, militares, médicos, profesores, ingenieros… Gentes, como siempre, de toda procedencia y condición. Pero que, a la madrileña, plantan cara cada día a la adversidad y dejan en el recuerdo otros momentos históricos cuando el pueblo de Madrid ha destacado por su generosidad, valentía y solidaridad, ya sea ante un atentado terrorista, una borrasca histórica, una DANA o una pandemia», sentencio.

Lo que pase en Madrid resuena en España

Volvió a pronunciar una de sus frases convertidas en leitmotiv de sus discursos: «Lo que pase en Madrid resuena en toda España» para evidenciar la relevancia de la capital, dijo enfundada en un vestido Macarena de color rojo, aunque también deslizó que «España nunca ha sido sumisa y sometida», haciendo referencia a la historia de resistencia y lucha por la libertad.

Al mismo tiempo ensalzó a los distinguidos con las grandes cruces de la orden del Dos de Mayo, un reconocimiento que fue especialmente emotivo en el caso de Constantino Mediavilla por sus más de 30 años de carrera periodística, fundador del primer digital dedicado a información regional y «uno de los cronistas de la villa más queridos». Mediavilla se emocionó al agradecer «inmensamente» la Gran Cruz que le llegó de manos de Isabel Díaz Ayuso, al borde del llanto al escuchar al periodista, que subió a recoger su galardón ayudado por un andador. En un momento en el que la profesión está cuestionada, el periodista sentenció que «se puede hacer periodismo en libertad, informar, convivir y cohabitar».

Quienes también salieron en defensa de la profesión fueron otros periodistas premiados en representación del Grupo Crónica: Pilar García Cernuda Lago y Antonio Casado Alonso. «Hemos hecho nuestro trabajo con rigor, con objetividad, con libertad y, por tanto, es auténticamente doloroso e incomprensible que en este momento los periodistas y los jueces seamos demonizados», dijo Cernuda, para rematar con la idea de que los jueces «no son dependientes de nadie, su obligación es que se respete la ley». Casado Alonso, por su parte, pidió un reconocimiento a la importancia del trabajo de los periodistas para acceder a la información «por caudales no reglamentados», remachó.

Espíritu del "punto y aparte"

Después de un año como el pasado, marcado por la polémica con el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, quien acudió al acto sin estar invitado y quiso subir a la tribuna de autoridades del exterior, este año el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, quiso llevar el «espíritu del punto y aparte» de Sánchez al tender la mano a la mano al Gobierno de Ayuso para «caminar juntos» en la «cogobernanza, la convivencia democrática y la regeneración» para después arremeter contra el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, al que le invitó a hacer una reflexión al estilo de jefe del Ejecutivo, Pedro Sánchez. Sin estar presente, su parón de cinco días fue motivo de comentario en los corrillos políticos populares, lo mismo que su figura «agotada» tras un cambio de escenario con un efecto que se desconfía que llegue a las europeas.

La nota musical animada la puso el vocalista de OBK Jordi Sánchez con canciones como «Historias de amor», que se vio coreando a la presidenta madrileña.