El cuarto árbitro avisó al colegiado de la falta del uruguayo a Varane en la jugada del segundo tanto del Barcelona. Hernández Hernández amaga con pitar, pero no lo hace.

Hay un momento en el que cuando Luis Suárez hace la falta a Varane en el germen del segundo gol del Barcelona el colegiado Hernández Hernández se lleva el silbato a la boca como si fuese a pitar, pero no lo hace. La jugada continúa y Messi marca el tanto que pone en ventaja al conjunto local y al Madrid le entra una ansiedad que sólo con el paso de los minutos y el tanto de Bale consigue calmar. Las imágenes de GOL descubrieron ayer la razón de que el árbitro haga ese movimiento de como si fuera a pitar la falta.

Desde la banda, el cuarto árbitro, que está viendo la jugada entre Valverde y Zidane, le grita por el micrófono: «Falta de Suárez, falta de Suárez», pero Hernández Hernández no le quiere escuchar, considera que su visión de la jugada es mejor y permite que continúe.

Nada más marcar, Zinedine Zidane se acerca al juez de línea y le parece decir que ha sido falta, pero éste, que se encontraba un poco más lejos de la jugada que el cuarto árbitro, le asegura dos veces y muy firme que no ha visto nada. El entrenador francés pone cara de circunstancias, lo deja pasar y con un par de palmadas se pone a animar a los suyos en busca del empate en el marcador

La jugada de Varane y, después, el penalti de Jordi Alba a Marcelo son la dos acciones que han sacado de quicio al Real Madrid, indignado porque cada vez que va al estadio barcelonista durante los últimos tiempos se vuelve con alguna decisión controvertida que no le favorece. La expulsión y posterior sanción de Cristiano Ronaldo en la Supercopa de España en agosto fue un lastre para el conjunto blanco, que le perdió en el comienzo de la temporada.

También el primer año de Zidane, cuando el Real Madrid ganó por 1-2, se anula un gol a Bale en el que el galés aún se está preguntando qué es lo que le señalaron en su salto con Jordi Alba.

Hernández Hernández fue el colegiado que no dio un gol al Barcelona en un partido contra el Betis, reconoció en un programa de Movistar que errores así te dejan tocado. «Era una jugada muy clara, groseramente clara, y el no haberlo podido ver te hace un daño mediático y futbolístico importante. Es tan claro el error como claro de entender que si tengo tres personas delante, no puedo ver», aseguró.

Las polémicas del encuentro del pasado domingo han tenido aún más alcance mediático y más repercusión. Y más cuando se sabe ahora que uno de sus ayudantes sí que vio con claridad una de las jugadas polémicas y decisivas del encuentro, pero el colegiado decidió no hacerle caso.