Fórmula Uno

Carlos Sainz o cuando tu jefe prefiere al otro

La llegada del nuevo responsable de Ferrari, Frèdèric Vasseur, no favorece las aspiraciones del madrileño

Frèdèric Vasseur, nuevo responsable de Ferrari
Frèdèric Vasseur, nuevo responsable de FerrariZsolt CzeglediAgencia EFE

Vuelta a empezar y van… Ferrari afronta la temporada 2023 de la Fórmula Uno con nuevo jefe de equipo, algo que si lo lleváramos a términos futbolísticos sería algo así como tener nuevo entrenador, lo cual no siempre es garantía de éxito. Una vez más, la Scuderia no ha tenido la suficiente paciencia como para consolidar un proyecto deportivo que llevaba un buen camino de la mano de Mattia Binotto, hasta hace unos días máximo responsable del equipo. El italiano, de origen suizo, tuvo la suficiente lucidez y valentía como para pedir un tiempo para rearmar el equipo desde 2019, que venía de una crisis tremenda de rendimiento por un problema de motor que no supieron arreglar. Más bien, era una trampa que no supieron esconder. Con todo y con eso, Binotto llevó a Ferrari al subcampeonato, pero no ha podido con Red Bull en 2022. Y en Ferrari sólo vale ganar. Pero, qué ha motivado el despido de Binotto. Para la nueva dirección, en realidad como ha sido siempre, sólo cuenta ser los mejores, pero detrás de su salida están las consecuencias de una de sus políticas. Dar a los pilotos la máxima igualdad, al menos en la primera mitad de la temporada o sólo cuando la diferencia entre ambos fuera muy grande, algo que en el caso de Leclerc y Sainz no ha ocurrido, aunque el español terminó el año por detrás.

Manda Leclerc

Leclerc es la estrella en la que Ferrari puso sus ojos desde que el monegasco apenas tenía 17 años y quieren que gane a toda costa. Pero no contaban con el rendimiento de Carlos Sainz, rápido y metódico y muy del agrado de Mattia Binotto, que no puede esconder su espíritu de ingeniero, algo que casa muy bien con la forma de trabajar de Sainz, que busca hasta el último resquicio en la puesta a punto del coche para encontrar una décima.

La temporada de Leclerc ha sido buena, aunque también ha cometido errores. No más que su equipo con él mismo, sobre todo, si nos referimos a cuestiones de estrategia. La situación y la tensión subieron en los últimos compases de la temporada y fue entonces cuando Leclerc pasó a la acción para cambiar los cimientos deportivos del equipo favoreciendo sus intereses. Puso a trabajar a su representante, Nicolas Todt (hijo del que fuera presidente de la FIA y el jefe de equipo más exitoso que haya tenido Ferrari, Jean Todt) y poco a poco fueron minando la capacidad de influencia de Binotto dentro del equipo. De repente, de la confianza total se pasó a la desconfianza y eso terminó con el despido de Binotto y el fichaje de su sustituto: Frédéric Vasseur.

¿Quién es el nuevo jefe de Carlos Sainz? Este ingeniero francés lleva mucho tiempo dentro del automovilismo, tanto en la F-1 como en categorías inferiores. Procede de Sauber, que ha sido adquirido por Audi y ha puesto a un alemán de confianza al frente, Andreas Seidl, que viene de McLaren. Vasseur fue jefe de equipo de Renault en 2016 (sólo duró un año) y allí quiso fichar a Carlos Sainz, o al menos mostró interés por el madrileño, que al final aterrizó en el equipo galo a finales de 2017 cuando él ya estaba fuera.

Vasseur es conocido por su asociación con Nicolas Todt para montar un equipo de GP2 llamado ART, uno de los mejores de la categoría y que vio crecer y triunfar a pilotos como Nico Rosberg o Lewis Hamilton. Todt y Vasseur son amigos, han ganado dinero con sus asociaciones y está claro que, en este sentido, Sainz vuelve a partir con desventaja frente a su compañero Leclerc.

Vasseur es un superviviente de la F-1, tiene experiencia, pero pocos éxitos salvo los de optimizar y sacar un buen rendimiento con pocos recursos. En Ferrari le sobrarán, aunque tendrá que demostrar que sabe hacerlo.