Cara a Cara: ¿Volverá a ganar la partida Simeone a Ancelotti?

El Cholo es vuestra peor pesadilla

Quim Domènech

Ya es hora de que os bajen a la tierra. Tres victorias fáciles te han vuelto a cargar de una falsa e inocente ilusión para el tramo decisivo de la temporada. Al fin llega lo bueno, toca pinchar el globo de los madridistas y lo va a volver a hacer vuestra gran bestia negra, el equipo que mejor os tiene tomada la medida y comida la moral.

- Miedo al argentino

Seis partidos, cero victorias. Vaya dato. ¿Estás temblando, José Luis? No trates de disimular vendiendo humo. Echa un vistazo a los banquillos. Simeone es vuestra peor pesadilla, el hombre al que no podéis ni ver porque tiene la fórmula para aplastaros cada vez que os cruzáis con él en el camino. En cambio, Carlo Ancelotti sigue dando muestras de su flojera táctica cuando se encuentra a los rojiblancos. Te aferras a la pasada final de la «Champions», en la que forzasteis la prórroga al límite y ante un rival muy inferior y más cansado que vosotros. Desde entonces, habéis mordido el polvo en cada uno de los seis enfrentamientos directos. No te iría mal plantear la eliminatoria con un poco de humildad, los precedentes invitan a ello, aunque por lo que veo tienes ganas de volver a salir escaldado. Ya ocurrió en la pasada eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey. Dos repasos en toda regla que has olvidado con demasiada facilidad.

- Fin de ciclo

Como sabes, esta temporada ha cambiado radicalmente la tendencia. Si bien es cierto que hubo un tiempo en el que buscabais rival digno para derbi decente, la prepotencia se os ha girado en contra y ahora el Atlético manda en la capital. Y en esta ocasión volverá a demostrarse y se confirmará el fin de vuestro breve ciclo ganador. Te noto nervioso, José Luis, demasiada presión por volver a caer ante vuestro rival ciudadano. Otra eliminación sería insoportable y mucho me temo que te costará superarlo. Pero, tranquilo, cuando llegue el momento podrás sentarte y observar cómo se gana un triplete, aquello a lo que ya no podéis optar y que sólo ha conseguido ganar en nuestro fútbol el Barcelona. ¿Te suena?

El traje se hizo en Lisboa

José Luis Sánchez

Qué gracia me haces, Quim. Esa vena atlética sólo tiene un fundamento: tienes miedo al Real Madrid. Apuesta al Cholo, mete todo tu dinero al Cholo. Prefiero tener en el banquillo a un entrenador tres veces campeón de Europa como Ancelotti. Simeone estuvo cerca de conquistarla, muy cerca, casi rozándola, pero en los libros de Historia sólo salen los ganadores. Te aseguro que cualquier atlético se cambiaría sin fijarse demasiado en las estadísticas. Seis partidos sin ganar contra los rojiblancos, es verdad, pero en Lisboa se hizo el traje de verdad. Un campeón de Europa ni se negocia ni se luce en los papeles, se gana en el campo y, ahí, Carletto se comió al Cholo.

- Como balas

No sé si es porque no te has recuperado del bajón del Pizjuán, pero te noto con canguelo, estimado Quim. El Madrid lleva 14 goles en tres partidos, Cristiano está desatado. Messi ve su sombra en la lista de goleadores, y el Vicente Calderón le teme. James, Bale, Ramos... Ay, Ramos. Cuánto vale Ramos. Cuánto pagarían por ese tanto en el minuto 93 los atléticos. El Atlético ganó esta temporada, de acuerdo, pero salvo en la Supercopa no le ha valido de nada. En la Copa del Rey pasó, y ni siquiera ha llegado a la final. En Liga, muy bien, pero está peleando por no jugar la previa de «Champions». Victorias sin recompensa. Sólo demuestra que importa ganar más al eterno rival que priorizar objetivos.

- La bestia afilada

Europa es una corrida de Vitorinos. Una plaza donde no se afeitan los cuernos. Venga, te compro la bestia negra del Madrid al equipo de Simeone... Pero cómo le explicas a sus aficionados que esa bestia negra perdió el partido más importante su historia. ¿Cómo? Es imposible. Por eso, amigo Domènech, siéntate y disfruta del campeón de Europa en su competición, motivado y en su hábitat. Pelear contra el deseo de muchos de superar esta eliminatoria. Más de media España empujando por el lado blanco, el restante sufriendo porque el rey europeo no logre reeditar su cetro. Empieza a pintarte las rayas indias, que Ancelotti ya sabe cómo borrarlas.