Polémica

El escandaloso silencio de las "12 rebeldes" de la selección y el dardo brutal de Rubiales

Las amotinadas de la selección también se han convertido -muy a su pesar- en protagonistas de la mayor hazaña del fútbol femenino español

La selección española, feliz -junto a Vilda y Rubiales- tras colarse en la final de un Mundial
La selección española, feliz -junto a Vilda y Rubiales- tras colarse en la final de un MundialRFEF

La Roja está en la final del Mundial y sigue escribiendo una historia espectacular en este campeonato de Nueva Zelanda y Australia. España se imponía Suecia en semifinales (2-1) y está a un paso de la gloria. Salma Paralluelo adelantó a las de Jorge Vilda, empató Blomqvist en el minuto 88, pero justo después el misil de Olga Carmona permite a la selección pelear por ganar el Mundial. Una hazaña que provocó un sinfin de reacciones en redes sociales, donde no solo se felicitaba a las jugadoras por su triunfo sino que se señalaba a las amotinadas como las grandes perdedoras de este mundial.

Cabe recordar que el pasado mes de septiembre quince jugadoras de la selección española femenina de fútbol renunciaron a jugar con el combinado nacional “mientras que no se revierta” la situación que se generó en la última concentración con el seleccionador Jorge Vilda, según confirmó la RFEF, que se mostró inflexible en su postura de no “admitir ningún tipo de presión por parte de ninguna jugadora a la hora de adoptar medidas de ámbito deportivo”.

Una polémica marcha atrás

Sin embargo, en un sorprendente cambio de guión, el pasado mes de junio, la gran mayoría de las 15 jugadoras que mandaron un correo electrónico a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) pidiendo no ser convocadas hasta que cambiasen las cosas mandaron un nuevo mail a la RFEF diciendo que estaban disponibles de nuevo y que eran convocables si el seleccionador Jorge Vilda así lo deseaba. Unos correos en los que, según fuentes internas no se recogía ningún tipo de disculpas. Una marcha atrás que fue duramente criticada en redes sociales y a la que la Federación solo cedió mínimamente.

Fueron ocho las que dieron marcha atrás y avisaron de su disponibilidad para disputar la Copa del Mundo, pero Vilda sólo recuperó a tres de las 15: Ona Batlle, Mariona Caldentey y Aitana Bonmatí. Las restantes siguen el mundial desde España. Siete de ellas, Mapi León, Patri Guijarro, Claudia Pina, Lola Gallardo, Ainhoa Moraza, Nerea Eizagirre y Amaiur Sarriegi se mantuvieron fuera por decisión propia y las otras cinco - Lucía García, Laia Aleixandri, Leila Ouahabi, Sandra Paños y Andrea Pereira- tras ser descartadas por el seleccionador por cuestiones técnicas.

Un silencio atronador

Sin embargo, ayer volvieron a ser protagonistas y no por haber contribuido al logro histórico del futbol femenino español sino por su estrepitoso silencio. No hubo ni una sola palabra de felicitación, animo o apoyo a su compañeras. El único gesto reseñable en redes ha sido un "like" de Lola Gallardo a un tuit de Carlota Planas, primera mujer en dirigir una agencia de futbolistas en España. "Orgullo también de Patri Guijarro, Claudia Pina, Lola Gallardo y Leila Ouahabi por hacerlo posible. Este hito es de TODAS", escribió la agente.

Pero además del llamativo "mutis por el foro", las amotinadas también estuvieron muy presentes en las palabras del presidente de la Federación, Luis Rubiales, que no dudó en lanzarles un dardo épico tras la victoria de La Roja. “Lo que hemos aguantado ha sido mucho. Que se ponga en tela de juicio a Jorge Vilda, que es un hombre trabajador, un técnico top mundial, que ha renunciado a otras selecciones que le ofrecían más dinero y se quedó en España. Nosotros nos hemos quedado con las que han querido estar siempre, pero también con las que han valorado el gran trabajo que se ha hecho para crecer, y hemos olvidado a las personas con resentimiento que no suman. Ha seguido trabajando con su gente y no ha hecho caso a los que querían destruir”.