Juego de espejos

Es posible que haya partidos que nadie quiera ganar. «No necesitamos ganar porque se puede pasar con dos empates», confiesa Ancelotti por la mañana en Valdebebas. «Ganar siempre es lo mejor», dice Simeone, pero el preparador del Atlético se imagina un partido como el que los dos equipos jugaron la temporada pasada en la Copa, cuando el Real Madrid se impuso por 3-0 y no dejó opciones para el Atlético en la vuelta.

Simeone se imagina un espejo, un Madrid intenso – «la intensidad se la da Modric»–, a pesar de que reconoce que la calidad individual de los madridistas es superior. «Somos un equipo que compite, que lucha hasta el final y que intenta ganar hasta el último minuto teniendo el control de juego», explica Ancelotti. Simeone imagina que el Madrid se olvida de elaborar y cambia su estilo para presionar y jugar más directo. Una «traición» en el fondo, porque Kroos e Isco son dos de los tres jugadores que más pases dan en la competición y el alemán es el que más pases completa, con un acierto superior al 95 por ciento. El Atlético prefiere ahorrarse los trámites. Ningún jugador rojiblanco aparece entre los veinte primeros en las estadísticas que miden esas dos categorías. El primero es Koke, que tiene una efectividad inferior a la de los madridistas. «Sólo» llega al 85 por ciento de acierto en el pase. Pero esos datos no preocupan al Cholo. Él prefiere mirar el apartado de asistencias, en el que Koke manda en la competición. Ha repartido cuatro, sólo igualado por Cesc. Koke es también el futbolista del Atlético que más kilómetros recorre, por delante incluso de Juanfran.

Koke es la clave del Atlético, que recuerda que el 4-0 de la Liga llegó sin él en el campo, lesionado a los diez minutos. Es el especialista rojiblanco en las jugadas con balón parado, una de las armas preferidas por Simeone. «Siempre las situaciones que rompen los partidos aparecen a partir de jugadas puntuales. Pelota parada, un error en la coordinación defensiva... Son cosas del juego y en cualquier partido sucede», asume el técnico del Atlético.

Algo parecido había dicho Ancelotti antes de comer. «Cada partido tuvo su problema, cada derrota fue distinta, una a balón parado, el último partido con una actitud que no era buena. Es difícil decir lo que ha pasado, no es tan interesante porque ahora es una eliminatoria, son dos partidos, y no necesitamos ganar porque se puede pasar con dos empates. Lo importante es pasar de ronda», afirmaba el italiano.

Cualquier detalle puede decidir el encuentro, aunque casi nada será una sorpresa. Seis veces se han enfrentado ya en lo que va de temporada, ocho serán la próxima semana. Cinco veces se cruzaron la temporada anterior. Demasiadas como para que algo suene a nuevo en la previa el derbi de Madrid.