Real Madrid
La brújula James
Volcó el juego del Madrid, marcó y dio más pases y toques que nadie
Por si alguien no lo vio, por si alguien lo olvida ocupado por la rutina de los domingos por la tarde, James, ayer, colgó un tuit en el que mostraba su alegría por el partido contra el Betis, acompañado de las fotos de su gol de chilena. Le vino un tiro-centro de Kroos, lo levantó y de espaldas lo metió en la portería. Fue la guinda a una noche estupenda. El Madrid, que no terminó de encontrarse a gusto en El Molinón, fue feliz en casa, con James al mando de las operaciones de ataque. Con su presencia, con su forma de entender el fútbol, cambió la cara del equipo. James aporta efectividad, centros desde la banda o fútbol por dentro. Llega al área para decidir o baja a juntarse con Modric para empezar o para defender. James es fundamental. Su suplencia en el primer encuentro no se va a volver a repetir en los días importantes. «No me meto en si tengo que jugar, sólo trabajo para ello. Benítez es el que manda y yo tengo que estar listo para cuando él quiera, yo sólo tengo que entrenar bien. Yo siempre he estado bien, ahora porque hice dos, pero yo sólo quiero ayudar para que Real pueda ganar y aportar para conseguir cosas buenas», decía el futbolista después de uno de sus mejores días en el Madrid.
Cuando Modric se lesionó la temporada pasada, en el club se señaló al colombiano como el futbolista que tenía que liderar al equipo hasta el final. James se puso a ello, pero el Madrid se quedó un pelín corto, a sólo un paso de los objetivos. Era su primer año en el club y James cumplió con todo lo que le pidió Ancelotti: ser un centrocampista, ser aplicado, mantener el equilibrio, correr y, por último, liderar. Ahora, el poso de esa temporada vivida ya le ha dado jerarquía. El resto lo pone su calidad. «Frente al Betis salimos con otra actitud y eso se vio en el campo. Hemos estado unidos y a la hora de crear jugadas estuvimos cerca. Eso también ayuda para los que intentamos jugar, salió todo bien», explicaba el sábado. James fue el futbolista del Madrid que más disparó a puerta después de Ronaldo y el que más balones tocó, el que más posesión tuvo de la pelota de los blancos, el que más pases dio, el que más ocasiones creó y el que metió dos tantos. Los dos para almacenar en la memoria, por cierto. Además, dio el pase a Bale en el primero y protagonizó las paredes con las que se cocinó el tercero, el de Benzema. Estuvo en todos lados, influyendo siempre.
Cuando jugó por la derecha, casi todo el partido, el ataque del Madrid se volcó por ese lado. Se juntó con Modric, pidió a Bale que se moviese y obligó a Danilo a ser protagonista durante muchos minutos. James fue quien más pases dio. Detrás de él, aparece Danilo, por encima de Kroos o Modric. El lateral brasileño lo tiene muy claro. Hay que darle el balón a James. Hasta 32 veces lo hizo. El colombiano le soluciona un problema, le da salida o le va a devolver la pared. El segundo futbolista que más buscó Danilo fue a Modric. Y los futboistas a los que más pases dio James fueron a Danilo y a Modric. Es ese triángulo por la derecha el que se ha convertido en el motor del Madrid de Benítez. El foco de James, que atrae al resto y el equipo empieza a jugar en esa zona. Benítez entrena y en el campo manda James.