Sin Cristiano se le va a exigir que, además de su juego, aumente la cifra de goles. «Creo que he madurado mucho», asegura

El primer gol en el Santiago Bernabéu del Real Madrid de Julen Lopetegui lo marcó Benzema en el trofeo del mismo nombre. Puede que sea una señal.

Mañana empieza de manera oficial la temporada para el conjunto blanco y más que nunca se va a mirar al francés, del que todos estos años se ha estado discutiendo acerca de su capacidad goleadora, de que es un delantero centro distinto y todas esas cosas que tanto se han dicho y que tampoco tenían mucha importancia. Los goles de Cristiano Ronaldo convertían esas discusiones en bizantinas, en juegos de salón, sin que se notase después en la práctica. Si Karim tardaba mucho en marcar se daba vueltas al asunto durante un par de semanas y luego se olvidaba hasta la siguiente sequía. Sin embargo, ahora, la marcha del portugués pone el foco en Benzema. O más que en él, en sus goles.

Si el Real Madrid no ficha a nadie más, el delantero francés va a necesitar que sus estadísticas aumenten, sobre todo en comparación con el año pasado: sólo hizo doce tantos, su temporada más pobre desde que llegó al Bernabéu, aunque es cierto que después la culminó a lo grande, con un tanto y un partido sensacional en Kiev frente al Liverpool. «Fue un gol especial, pero no fue fácil de marcar. Supe anticiparme a lo que iba a hacer el portero. Significa mucho para mí, pero no sólo el gol, sino el partido entero. Creo que jugué un gran encuentro. Puede que haya sido uno de mis mejores partidos con la camiseta del Real Madrid, y tuve la suerte de que fuera en una final», recordaba esta semana.

Su campaña, sin embargo, fue algo irregular. De todos modos, el pasado de poco vale en el conjunto blanco y ahora mismo él, Bale y Asensio son los tres delanteros principales de Lopetegui y detrás de ellos, las expectativas de Vinicius y, a la espera, Borja Mayoral.

Benzema es el que más años lleva en el club, es uno de los capitanes y más que nunca, le toca dar un paso adelante. «Lo único que puedo decir a los jóvenes es que trabajen, que den siempre lo máximo y que tengan como objetivo aportar algo distinto a este club», asegura el francés en una entrevista a la UEFA. Contra todo pronóstico, Karim ha ido aguantando más que sus competidores. Higuaín se tuvo que marchar y ha sido en este Santiago Bernabéu, cuando, por fin, años después, recibió una ovación que el público del Madrid siempre le negó. Cristiano ha dejado sus huella con sus cifras de goles, pero su adiós ha sido helado. Ha pasado Adebayor, ha pasado Chicharito, Morata no tuvo paciencia. A todos ha superado Benzema. «Creo que he madurado mucho. También he desarrollado mi juego. He ganado un montón de experiencia en un club que es el mejor del mundo. Fue un poco complicado durante los primeros años, pero yo siempre peleé y me marqué a mí mismo el objetivo de jugar y de jugar bien en este club», dice.

En la entidad están bastante convencidos de que con este plantel se puede aspirar a todo. «Lo más difícil siempre es volver a ganar. Hacerlo además concienciando de la capacidad colectiva del equipo, potenciando y tratando de ser cada vez más ambiciosos. El ADN del Real Madrid es ese. El ADN del jugador del Madrid es ese. Y el ADN del entrenador del Real Madrid debe ser ese», aseguraba ayer Lopetegui. La prueba del Atlético en la Supercopa de mañana va a ser definitiva. Hasta ahora, la pretemporada ha confirmado las buenas sensaciones de un equipo que empieza una nueva etapa y Benzema ha estado a la altura de lo que se espera. Mañana empieza la temporada en serio. Karim no tiene más remedio que sacar los galones.