Lin Jarvis: «Rossi ha impresionado a todos, él incluido»

Lin Jarvis habla de Lorenzo y Rossi con una mezcla de pasión, cariño y respeto. Asegura que su trabajo como máximo responsable del Movistar Yamaha es elegir las piezas para que el puzzle encaje perfectamente.

-¿Todo lo relacionado con la competición es la parte más dura del trabajo del director general de Yamaha?

- En el circuito no está la parte más dura, mi trabajo es tener todo aquello que se necesita. Cuando estoy en el circuito, mi trabajo es mirar, comprobar, ver cómo funciona todo, si algo está mal. Básicamente, mi trabajo es asegurarme de que todo está bien organizado: el personal, los patrocinadores, el dinero, los pilotos... Me encargo de elegir las piezas correctas para hacer el puzzle.

-¿Están viviendo la temporada perfecta?

-Lo responderé en Valencia. Diría que hasta ahora está siendo una grandísima temporada. Lideramos el título de constructores, de equipos y de pilotos, así que es un sueño para una escudería de fábrica. Parece que vamos a ganar todos los campeonatos, pero nada es seguro al ciento por ciento hasta que está hecho. Márquez se impuso en la última carrera, así que tendremos que prestar atención a Honda y a Marc en particular.

-¿Es usted un hombre más ocupado cuando las cosas van bien o cuando se tuercen?

-Es lo mismo, pero es más agradable cuando todo funciona. La cantidad de trabajo es más o menos la misma en las dos situaciones, pero ganar te carga de energía.

-¿Cómo es su relación con Lorenzo y Rossi?

-No soy el típico que está demasiado cerca de ellos. Necesitas tener una relación honesta, pero si te acercas mucho luego puede resultar difícil actuar como jefe. Es muy importante tener esa honestidad y esa confianza que permite que si pasa algo ellos pueden hablar conmigo y yo con ellos, pero no necesito estar a su lado todo el tiempo.

-No es amigo de los pilotos.

-Tengo una relación amigable, pero es difícil decir que somos amigos.

-¿Teme que una chispa rompa la buena relación entre ellos y cree un incendio?

-No tengo miedo de ello. Una cosa que aprendí y que decimos en inglés es: “Ten cuidado con lo que temes, porque normalmente es lo que atraes”. Esto es parte del juego y lo que sí me pasa es que estoy nervioso por lo que puede pasar. En el pasado la relación no fue tan buena, hubo carreras muy igualadas, algunos problemas en pista... Es algo que me preocupa, pero no tengo miedo, porque son muy distintos a como eran cinco años atrás.

-¿Por qué se llevan ahora tan bien? ¿Es culpa suya o de la madurez de los pilotos?

-Lo que hay es mucho respeto profesional entre ellos y más madurez. Hemos introducido la idea de que son rivales, pero el enemigo principal es Honda y Márquez. Así que pase lo que pase el objetivo es batir a Marc y a Honda.

-Rossi no es el más rápido, pero sí el líder de MotoGP...

-Al comienzo de la temporada explicamos a los pilotos que para poder batir a Honda y Márquez, después de dos años de un nivel tan alto, deberíamos prepararnos como nunca antes lo habíamos hecho. Teníamos que evitar errores y ser constantes al máximo nivel. Valentino ha estado en el podio siempre excepto en la última carrera y por eso tiene esta ventaja de puntos. Lorenzo firmó una racha tremenda de cuatro victorias, que Rossi no tiene. Jorge si se impone una misión, la cumple con una fortaleza increíble, pero ha cometido algunos errores. El problema del casco en la primera carrera le costó una victoria, desafortunadamente se cayó en la lluvia y esto le ha hecho no acabar varias pruebas en el podio. Los dos son igualmente capaces de ganar cualquier carrera, pero la consistencia ha puesto a Valentino por delante hasta ahora. Ahí ha estado la diferencia.

-¿Cómo es posible mantenerse en la élite con 36 años y tantos títulos ganados?

-La gasolina que alimenta su pasión es que se divierte haciendo esto. En su vuelta a Yamaha redescubrió el placer de ir en moto, porque no tengo dudas de que sufrió en sus dos años en Ducati, que fueron duros y complicados para él. Disfrutar de esta forma de vida es lo que le mantiene con ganas en su vigésima temporada en el Mundial, y eso que su fama le obliga a una carga extra de trabajo. Por cada diez fans de Valentino hay sólo uno del resto de pilotos. Es una cosa positiva, pero también es más trabajo y presión. Él está todo el tiempo entrenando en su rancho, tiene su academia de pilotos, el equipo de moto3... cosas que le permiten pasarlo bien, disfrutar y tener siempre nuevos proyectos. Nunca se aburre, es una de sus habilidades.

-¿Ha sido Márquez y su nivel el origen de esta gran temporada de Yamaha?

-Sí, por una cuestión de motivación. No nos gusta perder y lo hicimos dos años seguidos ante Honda. En 2014 era una especie de máquina que ganó diez carreras seguidas, y esto no era divertido, especialmente para nosotros. “Chapeau” por él, pero esta fue la motivación para los pilotos, para que los ingenieros hicieran una moto mejor y solucionasen los problemas para tener cierta ventaja. Trabajamos muy duro la segunda parte del curso pasado y, como el rendimiento en el motociclismo es cíclico, tuvimos suerte de que Honda cometiese algunos errores. Marc sufrió para manejar la moto. Ha tenido que pilotar en el límite o incluso más allá y de ahí sus cuatro ceros.

-¿Es un ahora o nunca para Valentino?

-No diría tanto, porque si lo ha hecho con 36, lo podrá hacer también con 37, pero sí que está ante una oportunidad de oro que necesita aprovechar. Puede hacer lo mismo el año que viene, no hay razones para pensar lo contrario. Y Lorenzo está preparado para impedirlo. Es parte del juego y por lo que ésta es una temporada fantástica de MotoGP. No hay una única fuerza dominante, Lorenzo, Marc y Rossi pueden ganar cualquier carrera. Y esto aumenta la atención y las audiencias. Es una ocasión de oro para Valentino y también para este deporte.

-¿Ve a alguno más presionado que otro?

-Los dos saben que todavía pueden ganar el campeonato. Valentino tiene una presión diferente, que es la de ganar carreras y no cometer errores. Lorenzo no tiene nada que perder.

-¿Esto le hace más peligroso?

-Ya sabemos cómo es Lorenzo cuando tiene una misión en la cabeza. Cuando en lugar de la mantequilla saca el martillo, hasta el propio Rossi admite que es muy difícil de batir. Él necesita desde aquí mismo en Aragón volver al martillo y ofrecer al menos tres actuaciones sólidas para volver a tomar la iniciativa.

-¿Cree que Márquez tiene alguna opción?

-Está en una posición parecida a la de Jorge. Ninguno de los dos está interesado en la segunda posición. Sólo quieren ganar y no tienen nada que perder, pero Jorge está más cerca y su objetivo es más posible. Marc puede hacer pleno en todas las carreras y no ser suficiente si los rivales están en el podio. Pero si es Jorge el que gana todo, sí le basta. Sólo espero que no haya un problema con un tercero que decida el campeonato entre nuestros pilotos. No encontrarnos algo inesperado. Espero una verdadera y limpia lucha por el título de aquí al final.

-¿Qué consejo les ha dado más veces esta temporada?

-No tengo que darles muchos consejos. Saben perfectamente lo que hacen. Lo único que les digo es que no creen un problema entre ellos. Porque es algo que no necesitamos y que no beneficiaría a ninguno de los dos. Sé que en un momento puede haber una batalla en carrera y lo peor es que acabaran en el suelo. Creo que los dos son maduros y profesionales y comprenden lo que tienen que hacer. Lo importante es que si hay batalla, sea limpia.

-¿Puede el director general tener un favorito?

-No. Tengo una relación distinta con cada uno. Son muy diferentes. Valentino es una leyenda y si gana el título sería una mega leyenda. Nadie ha vuelto a ganar cinco años después en la historia del motociclismo. Sería increíble hacerlo a los 36 años. Así que entiendo que la gente alucine si gana Rossi. Pero al mismo tiempo, Jorge tiene dos títulos y busca el tercero para ponerse a la altura de Rainey o Lawson, por ejemplo. Y hacerlo frente a Rossi y Márquez en su mejor forma. Si tenemos una batalla limpia hasta el final y gana el mejor será brillante.

-¿Qué saldría de mezclar el talento de sus dos pilotos?

-Ganaríamos todas las carreras. Sería un piloto mega súper talentoso.

-¿Valentino es diferente?

-Es un chico divertido, simpático, sonriente. Es carismático y la gente siente su pasión y su compromiso con el motociclismo. Entienden que es alguien único y eso hace que donde vayas dominen las gorras y las camisetas amarillas. Si preguntas a un hombre de 75 años por su piloto favorito dice Valentino Rossi, y si la pregunta es a un niño de siete, contesta que Rossi también. Y esto es increíble. Ha sido capaz de trascender al paso del tiempo. La gente joven y los mayores le quieren y ésa es su magia.

-¿Cuántos títulos tiene Lorenzo en el horizonte?

-Creo que le quedan otros cuatro o cinco años sólidos en MotoGP, Márquez estará ahí luchando con él y vendrán los jóvenes. Tiene potencial para ganar otros tres campeonatos, probablemente.

-¿Está preocupado por encontrar un anti Márquez para el futuro?

-No necesito un rookie si estos dos siguen a este nivel, porque ambos pueden ser ahora mismo el anti Márquez del que la gente habla. La primera es cuestión es cuándo se retirará Valentino y la otra, cuánto continuará Jorge motivado.

-¿Ha hablado con Rossi de su retirada?

-No es algo de lo que haya que hablar ahora mismo, quizá en el pasado, porque se dijo que se pasaría a los rallys, a la F-1... Pero él eligió el motociclismo porque es un piloto de motos. Le gustan los coches, pero lo suyo es esto.

-¿Es de los que pensaba que nunca volvería a ganar?

-Estoy impresionado con lo que está haciendo. Es increíble. Para ser sincero, creo que había muy poca gente que le concediera opciones de volver a ganar un título, incluido él mismo. Pero esto le dio una enorme motivación de ponerse a prueba y de ver si era capaz. Rossi ha impresionado a todos, incluido él mismo.